Schoenstatt youth from Chile and Cuba: mutual enrichment Schönstattjugend aus Chile und Kuba: gegenseitige Bereicherung

Schoenstatt in Cuba: Meeting in the Home Shrine Habana, Cuba Schönstatt in Kuba: Treffen im Hausheiligtum in Havanna

Fr. Carlos Cox (m) visits the Schoenstatt movement in Cuba from time to time. P. Carlos Cox (m) besucht von Zeit zu Zeit die Schönstattbewegung in Kuba

Willing to form a new Cuba in the Covenant of Love... Bereit, im Liebesbündnis ein neues Kuba zu schaffen...

Fotos: POS Fischer © 2002

CUBA / CHILE, María Ester Abarca Bignon Desde hace aproximadamente dos anos se fundó el movimiento en Cuba con las primeras 21 Alianzas de Amor, el trabajo antes de las primeras Alianzas y durante estos dos anos ha sido apoyado por la juventud masculina y femenina de Chile y el último viaje de apoyo se realizó en enero de este ano 2002; el Padre Carlos Cox y dos jóvenes de la juventud femenina estuvieron diez días en la isla acompañando y vivenciando las maravillas que la MTA está realizando entre los jóvenes que participan en el movimiento, en un país donde las personas encuentran no pocas dificultades para vivir su fe.

En las siguientes líneas el testimonio de una de las jóvenes que participó de esta experiencia:

"Lo que quiero expresar en estas líneas es una parte muy pequeña de la historia de amor de la Mater con su isla de Cuba. Mi experiencia en estas tierras ocurrió junto al P. Carlos Cox y una amiga de la juventud femenina Constanza Valenzuela, y tuvo lugar desde el 20 de enero al 18 de febrero del 2002 día en que regresamos (fechas absolutamente providenciales... la Mater quería que no nos quedara duda de que esta misión era de Dios y que ese viaje lo presidía Ella).

Un Santuario Hogar, centro de la familia de Schoenstatt

Qué hay de Schoenstatt en Cuba en este momento? Formalmente existen dos grupos de juventud femenina y ahora uno de juventud masculina, dos de los jóvenes han partido a distintos seminarios de Cuba, la Habana y Guantánamo, para formarse como sacerdotes diocesanos, además uno va a entrar próximamente a la comunidad de los franciscanos, por eso que hubo que unir los dos grupos que existían. El lugar de reunión de la familia es en su santuario hogar, establecido en la parte de atrás de la casa de las Hermanas Sociales, consagradas que los han acogido y apoyado muchísimo. El santuario hogar es una pieza que está como debajo de la casa, con un techo muy bajo, lo que da la sensación como de catacumba, está pintado blanco con un altar donde está el cuadro de la Mater, la Cruz de la Unidad, algo para poner el Capital de Gracias, en el resto de la pieza hay bancas; ahí tienen sus reuniones de grupo, reuniones con el grupo de referencia, que es como el consejo, encuentros de familia y con la Virgen Peregrina, convivencias, etc.

Una profunda relación con la Mater a través de la Alianza de Amor

Muchos podrían preguntarse que tiene de especial esta fundación..., bueno, es increíble como en estos casi dos años hay personas que han captado muy profundamente lo central de nuestro carisma, la profunda relación con la Mater a través de la Alianza de Amor como algo cotidiano manifestado en un amor heroico en la relación con Ella y con los hermanos, todo esto (y mucho más) en un medio de inmensas dificultades, ya que por lo que muchos saben Cuba es un país en que el estado no apoya la práctica de su fe, al contrario, la combate.

La fecha de fundación de Schoenstatt en Cuba sería el 20 de mayo del 2000, ya que ese día se sellaron las primeras Alianzas de Amor (2 _ jóvenes y una señora), ya han pasado casi dos anos lo que está ocurriendo allá no es nada de evidente visto con ojos humanos... aquí va mi experiencia.

El tiempo que estuvimos con el P. Carlos Cox en jornada con los jóvenes cubanos fueron diez días y el compartir de esos días consistió principalmente en: dos encuentros de preparación para sellar Alianzas de Amor, más un retiro de un día; encuentros con cada uno de los grupos de vida, para animarlos y ayudarlos en sus realidades concretas; tres encuentros con el grupo de referencia, que es como el "consejo" de esa familia, para tratar temas más generales de la familia, su identidad, su realidad, dificultades y proyecciones según lo que se fuera descubriendo que era el querer de Dios; tuvimos también conversaciones personales, especialmente el Padre Carlos; y por supuesto tuvimos paseos para conocer la ciudad, y otros atractivos que puede tener la capital de una isla como Cuba. La verdad es que fue una experiencia súper completa, lo pasamos... demasiado bien!!!

Para reflexionar: La alegría en las dificultades

Además, me gustaría compartir especialmente algunas cosas con las que yo me quedé de este viaje, en el sentido de lo que Dios me regaló para reflexionar, a través del contacto con el pueblo cubano, especialmente con la familia de Schoenstatt... Los cubanos en general son personas muy alegres, increíblemente alegres, las dificultades se las toman con humor y optimismo, por ejemplo en muchas ocasiones tienen ellos que hacer cola, cola para comprar comida, cola para comprar pasajes en bus o avión, colas para tomar helado, colas para subirse a una guagua (así le llaman a las micros), y el humor siempre permanece.

Características: son generosos, solidarios y muy buenas para vincularse

Otra característica de los cubanos en general es que son muy generosos con lo que ellos apenas tienen, a nosotras nos tocó compartir además con personas que no eran católicas y así y todo nos invitaban a comer a sus casas sin ningún tipo de apretura.

Además son solidarios y muy buenos para vincularse, si uno les hace una pregunta felices contestan siempre, aunque para dar instrucciones no sean confiables. Nos tocó vivir como en casas de hospedajes cuando alguno tenía lista su casa trabajaban para buscarle huéspedes a sus amigos que aún no estaban completos...

La Mater en P4

Bueno, así son los cubanos en general, pero los jóvenes schoenstatteanos que viven allá se les suma algo de lo que me siento tan regalada y orgullosa de haber compartido, que son gracias especiales de fundación que ellos están recibiendo, y solo porque la Mater definitivamente está ensañada con Cuba y se quiere establecer; entonces para ellos, las dificultades que puedan vivir las convierten en desafío para la santidad diaria de su vida, haciendo todo por la Mater, por Schoenstatt, por la conversión de los que viven con ellos, también por su pueblo cubano. En esta línea, una de las tantas experiencias bonitas que tuvimos fue que caminábamos por la calle a esperar una guagua (bus), y mientras nos reíamos del escándalo y tragedia que iba a significar subirse a la guagua por la cantidad de gente que iba, por el calor, por el sudor, uno de los que estábamos preguntó - Cómo se puede llevar a la Mater en un P4 (bus)? - todos nos quedamos pensando con cara de: "la verdad es casi imposible..." y sin saber mucho qué contestar..., después de mirarnos uno de ellos dice: - dándole el asiento a quien veamos que lo necesita, sonriéndole a las personas, contestando bien a quien nos trata de mal modo,... - y así una experiencia tan cotidiana y casi siempre desagradable como era andar en guagua se pudo llenar de mucho sentido... y nada menos que llevando a la Mater.

Sacar lo mejor de un pueblo

Lo que a mi me llegó muchísimo, fue como vivían ellos las carencias materiales, en el fondo la pobreza... si pensamos en Cuba, o si escuchamos comentarios sobre Cuba, lo que van a escuchar es solo una especie de compasión porque: son pobres, no son libres, por lo tanto las personas son infelices... y yo pienso como el mundo no va pensar que son infelices si los parámetros para medir la felicidad son hoy en día materiales... yo me atrevo a decir que el pueblo cubano es feliz, es alegre y si hay personas que no lo son es por las mismas razones que en cualquier otro país. La ventaja de ellos es que la pobreza en la que viven los ha llevado a desarrollar valores que a mi parecer son fundamentales, y que si no vivieran en esas condiciones no los habrían desarrollado... una vez más podemos contemplar a Dios en su omnipotencia ya que Él ha sabido sacar lo mejor de un pueblo, que está sometido sin duda que a muchas adversidades... y ese es el aporte que Cuba debe hacer al mundo, y hacernos reflexionar especialmente a nosotros como cristianos y católicos.

Me gustaría plantearles una pregunta que ha sido motivo mucha reflexión y vida en este último tiempo: "si la pobreza que el pueblo cubano vive, sin ser elegida libremente es fecunda..., cuánto más fecunda sería una pobreza elegida libremente?"

"No sabes las ganas que tengo de entrar a un santuario!"

Finalmente los quiero invitar a hacer mucha oración por nuestra familia de Schoenstatt en Cuba, que recién está naciendo, pero con mucha fuerza en el sentido de la santidad; llévenlos al santuario cada vez que puedan, porque sin duda lo anhelan mucho... de hecho una de las últimas cosas que uno de ellos me dijo antes de venirme que a mi me marcó mucho fue: "No sabes las ganas que tengo de entrar a un santuario!"... y solo con eso yo quedé con mi tarea clarita... que ellos, cada uno, aunque físicamente no puedan peregrinar, siempre tengan la experiencia de las gracias del santuario, especialmente la del encuentro profundísimo con Dios a través de la Mater, nuestra Madre, Educadora y Reina.