Preparing the way for the birth of Jesus: for many of the participants of the Limburg family retreat afternoon, the reason to come was the religious program for the children Den Weg zur Geburt Jesus bereiten: für viele der Teilnehmer des Limburger Familientages war das religiöse Angebot für die Kinder ein Grund zum Kommen.

The children,also the very small ones, were eager to pave the way for Jesus Auch die ganz kleinen Kinder waren mit Feuereifer dabei

Parents and children enjoyed the advent impulses Eltern und Kindern gefiel die gemeinsame Adventrunde

Fotos: Link © 2001

Verkündigung an die Hirten

Karte: Beate Heinen © Kunstverlag Maria Laach

(Maria y Manfred Link) Las familias de Schoenstatt de la diócesis de Limburgo invitaron a familias con niños a una preparación de adviento el domingo a la tarde en la casa de las Familias en Schoenstatt. En dicho encuentro muchos descubrieron que el adviento ofrece una excelente oportunidad para estar más atentos a las necesidades de nuestro prójimo. Hubo un motivador intercambio entre las distintas familias, padres y niños, lo que impulsó a llevar ideas y entusiasmo a las casas.

Asistieron 15 familias, más de 70 personas. Muchos de ellos estuvieron por primera vez en un encuentro de Schoenstatt. Los primeros contactos surgieron a través de "10 minutos junto al pesebre."

"Vinimos porque acá se hace algo para los niños", explica un matrimonio. El año pasado vinieron a los "10 minutos junto al pesebre", y estaban entusiasmados. "Buscamos algo para los niños, a veces vamos al servicio religioso evangélico, porque allí explican a los niños la Biblia en forma tan interesante."

Ellos buscan, al igual que otros participantes, experiencias de fe para sus niños en el tiempo de Adviento y Navidad, tan sensible para lo religioso. Especialmente para los niños se hizo una cuestión muy práctica el comprobar que la preparación a la Navidad no sólo es espiritual sino que también incluye creatividad manual. Esta experiencia de adviento incluyó pesebres vacíos y figuras para acompañar el lugar. Incluso los tres Reyes Magos se encontraban en el camino. Los adultos quedaron admirados por la religiosidad espontánea y natural de los niños, que sin duda contagia.

Atrapar el momento

Para los padres, esta es una gran oportunidad para el diálogo de pareja. "Usted sabe lo que se siente cuando la vida pasa tan rápido, y pareciera que se nos va de las manos, la desilusión que sentimos cuando vemos que perdemos oportunidades." Se dan algunas motivaciones que ayuden a la pareja a crecer juntos, a descubrir y a vivir el momento justo, para que no pase de largo. También los niños viven momentos clave cuando se conmociona por algún motivo su interior. El secreto es estar atentos. "Esto nos vino muy bien", opinaba alguien luego de un intensivo diálogo en pareja que mantuvo cada matrimonio. El tema central fue: cómo atrapar el momento en beneficio de la pareja especialmente en el adviento en medio del estrés, la velocidad y el nerviosismo.

Camino de luces al Santuario

Luego de un café familiar de adviento, la tarde acabó con una peregrinación iluminada hacia el Santuario de las familias. Tanto los niños como los adultos fueron bajando el camino al Santuario con velas en las manos mientras el sol se despedía tras el horizonte. En la casa de la Mater los niños son los protagonistas. Allí escuchamos una emotiva historia de adviento. Los niños tenían en sus manos una figura, y la levantaban a la vista de todos, cuando era nombrada la propia. Vivimos una experiencia profunda y alegre en la casa de María. Los niños especialmente, pero quizás no sólo ellos. Y así vamos caminando hacia la Navidad.

Traducción: Enrique Soros, Washington, USA (Argentina)