Mariya Arashafa

Los niños de la calle se llaman a sí mismos "Niños de María" – 150 niños pueden ir al colegio gracias a "Maria Ayuda" Burundi y bienhechores de Chile

Padres de Schoenstatt con „Niños de María” Schoenstatt Fathers with “Mary’s children“ Schönstatt-Patres mit “Marias Kindern”, ehemaligen Straßenkindern
El regalo de poder estudiar The gift of learning Es ist ein Geschenk, zur Schule gehen zu dürfen
Primera casa de los niños de la calle First home of the street children Erste Unterkunft der Straßenkinder
Jóvenes en su practico laboral Youth doing a practical training Jugendliche im Berufspraktikum
En construcción: la nueva casa „Maria Reina de la Paz“ Under construction: the new house “Mary Queen of Peace” Im Bau: das neue Haus “Maria, Königin des Friedens”  Fotos: Maria Ayuda, Schönstatt-Patres Schweiz © 2009

BURUNDI, mkf. En su nueva encíclica, "Caritas in veritate", Benedicto XVI habla del clamor de "los numerosos jóvenes que viven en los pueblos pobres, los cuales «reclaman tener su parte activa en la construcción de un mundo mejor»". (49) La Iglesia, y con ella Schoenstatt, siempre ha estado cerca de los pobres y sin duda alguna, continuará haciéndolo hasta el final de los tiempos. La Iglesia no hace sino seguir el mensaje de Aquél que se identificó con los más pobres y que dijo: «Estaba desnudo y me vestiste, tuve hambre y me diste de comer…». En Burundi, la obra social "Mariya Arashafa" (Maria Ayuda), desde el año 2006 busca puntualmente mejorar la situación de niños y jóvenes que son victimas de la guerra civil.

Burundi es un pequeño país ubicado en el corazón del África negra. Su densidad poblacional es una de las más grandes en el mundo, lo que explica, en parte, la pobreza extrema de sus habitantes. Debido a las consecuencias de la guerra civil, de carácter étnico, durante los últimos 15 años el país quedó sumido en la miseria y muchos niños perdieron a sus padres. Burundi es un país que está saliendo de esa guerra con dificultades, un país con serios problemas de corrupción y conflictos de distinto tipo. Hoy Burundi necesita ser reconstruido tanto en el ámbito espiritual, como en el moral, el social y el económico. La Familia de Schoenstatt en Burundi - una de las que más crecimiento ha experimentado en todo el mundo y especialmente entre la generación joven - se compromete con la reconciliación, la paz y el desarrollo humano, incluyendo una ferviente lucha contra la pobreza, el hambre y el abandono infantil.

La Fundación « Mariya Arafasha » (Maria Ayuda), cuyo inicio data de 2006 y tiene apoyo institucional de Maria Ayuda Chile, está presente con dos programas sociales muy bien definidos:  El primero, destinado a ayudar a niños en situación de calle y, el segundo, orientado a la reinserción escolar. 

Somos los "Niños de Maria"

Girizina- que tengas un nombre -, es un programa de ayuda a niños de la calle. Muy rápidamente han adoptado otro nombre, ahora se llaman «niños de Maria». El objetivo es que recobren su dignidad como personas. Es una gran felicidad ver allí a ex-niños de la calle. Impresiona su alegría y el constatar que verdaderamente han comenzado una nueva vida. La mayoría va al colegio y los más grandes además, aprenden un oficio que les permitirá una pronta salida laboral. Paralelamente, una parte de ellos ha hecho recientemente la Primera Comunión mientras que otros están en plena preparación para su Bautismo. Estos niños comienzan a ver un porvenir mejor, comienzan a creer que es posible ser como el resto, estudiar y trabajar como los demás mientras crecen en su formación espiritual.

El centro «Reina de la paz», ahora en construcción, cobijará al principio un orfanato (interno) para los «Niños de María» (ex-niños de la calle) y para otros huérfanos que también serán acogidos. Si los medios lo permiten, se asistiría en ese centro a unos 100 niños y jóvenes. También se quiere construir una escuela técnica para que estos niños, junto a otros jóvenes, puedan aprender un oficio. Además, la enseñanza técnica facilita la creación de empleo en un país en el que el paro y la pobreza han superado el nivel tolerable. Más tarde, Dios mediante, se construirán otras obras de interés público con vistas a promover una educación para todos y contribuir a la consolidación de la paz.

Ayudame a estudiar

Girumuvyeyi – que tengas padres- , es un programa que busca facilitar a niños huérfanos a concurrir al colegio. Actualmente en Burundi la educación primaria o básica es gratuita, no así la secundaria.  Por esta razón, muchos jóvenes con capacidades y motivación para avanzar en su formación, se ven obligados a dejar la escuela por no tener los recursos para pagar la escolaridad anual, la cual no sobrepasa los 40 dólares al año.  Es difícil creerlo pero muchas familias no logran reunir esta cantidad por pequeña que parezca. Existe además otro problema: los jóvenes se ven presionados por sus padres a dejar la escuela por ayudar en la casa con el cultivo de la tierra y las labores de la dura vida en el campo.

"Ayúdame a estudiar" es el nombre de la campaña con la que María Ayuda Chile busca recolectar dinero para financiar el regreso al colegio de 150 niños y niñas burundeses que pertenecen a la filial de la Corporación en África. Unos 150 niños y niñas esperan por la ayuda para pagar por un año su cuota escolar, el uniforme y sus útiles escolares, y así darles la posibilidad de terminar sus estudios y acceder a más oportunidades para forjar un mejor futuro para ellos y para su país.

Durante todo el mes de septiembre y parte de octubre, los niños beneficiados por el proyecto llegaron hasta el Santuario de Schoenstatt del Monte Sión en Bujumbura, donde funciona la sede de María Ayuda, para recibir el dinero de la matrícula del primer trimestre, los uniformes y los útiles escolares, además de hablar con los encargados del proyecto y exponerles su situación, y compartir un momento de oración de alabanza a la Santísima Virgen, que les ha permitido emprender este nuevo camino de vida.  Los niños también durante el ciclo escolar visitan a menudo el Santuario y comparten sus logros y dificultades, lo que posibilita el poder acompañarlos y seguir ayudándoles. 

Testimonio de Goreth Manirakiza (16 años)  

"Déjame cantarte, Santa Madre María, por todas las cosas buenas que Tú haces por tus hijos. Mira ahora a tus hijos e hijas que acuden a Ti, con el fin de colocarnos bajo tu protección. 

Muchos de nosotros carecíamos de medios para ir a la escuela, la mayoría de nosotros la habíamos dejado. Pero Tú, Madre nuestra, no nos olvidaste y nos invitaste para protegernos y colocarnos bajo tu manto. 

Para esto, nos regalaste la Fundación Mariya Arafasha (María Ayuda Burundi), que no tardó en venir en nuestra ayuda bajo el Proyecto Girumuvyeyi (Ayúdame a estudiar).  

Madre Santa, fuiste Tú quién dijo: " Nada sin Ti; Nada sin Nosotros ", lo que significa que si no nos confiamos a Ti, no podemos hacer nada. Es por esta razón que nos diste la Fundación Mariya Arafasha.  Madre querida, si la Fundación no estuviera presente, habríamos abandonado la escuela. ¡Oh!, Ahora estudiamos sin problemas y cuando una dificultad aparece, corremos hacia los queridos padres burundeses y chilenos a los que la Madre Santa nos dio para ayudarnos y apoyarnos. Sí, yo agradezco fuertemente al Señor y la Virgen María.

Sea bendita la Fundación y lo mismo para todos los que pasan necesidad. Que la Fundación permanezca por mucho tiempo y siga progresando, no podemos contar todo lo que Tú has hecho por nosotros…"

Maria Ayuda es una corporación de beneficencia con más de 25 años en el trabajo de reparación y prevención del maltrato infantil. María Ayuda trabaja con niños, niñas y familias que viven situaciones de violencia, abuso y negligencia. Cuenta con 20 programas sociales en todo Chile, donde se organiza a través de filiales regionales que dependen administrativamente de Santiago. También tiene presencia internacional en España, Burundi, Perú y Argentina. Fue fundada en 1983 por el sacerdote de Schoenstatt Hernán Alessandri Morandé.

• Textos en parte tomados de la página de Maria Ayuda y de la pagina de los Padres de Schoenstatt en Suiza.