Un cambio de paradigma

La creatividad de amor: bendiciones comunitarias de Santuarios del Hogar y del auto

2 de noviembre: bendición comunitaria de Santuarios del Hogar November 2: common blessing of Home Shrines 2. November: gemeinschaftliche Hausheiligtumgssegnung
Todos los elementos del Santuario del Hogar presentes All the home shrine elements are present Alle Gegenstände des zukünftigen Hausheiligtums sind da
Bendición Blessing Segen
Entrega en el Santuario Presentation in the Shrine Überreichung im Hausheiligtum
Conmigo para siempre... For ever with me... Für immer bei mir...

PARAGUAY, P. Antonio Cosp. El domingo 2 de noviembre, en el Santuario de Tupãrenda, se llevó a cabo una vez más la bendición comunitaria de Santuarios del Hogar. Además nuevamente se bendijeron Santuarios de auto – respuestas creativas de la vida a necesidades surgidas de la vida. De esta manera nació todo lo orgánico en Schoenstatt.

"La necesidad tiene cara de hereje", dice el refrán español. Y así fueron los inicios hace unos 5 años de la bendición comunitaria de santuarios del hogar. Con la necesidad que tenemos los latinos de contacto personal y de fiesta comunitaria, lo perfecto han sido nuestras bendiciones individuales con la presencia del sacerdote o al menos de un diácono permanente. Eran gran motivo de fiesta. La presencia del propio grupo, de amigos, de los parientes, e incluso, de los vecinos hizo que por años fuera algo adquirido y, al parecer, insustituible. Pero con la entrada de unos 150 matrimonios por año... esto se convirtió en algo casi inabarcable.

Por otro lado, fue dándose un cambio de paradigma: la Mater se instala en nuestro hogar apenas se lo pedimos como matrimonio y como fruto de nuestra relación y compromiso mutuo de amor. Fue desapareciendo la expresión "rincón schoenstattiano" para dar lugar al directo y evidente: "nuestro santuario". A la par, los peregrinos iban haciendo en nuestros santuarios igual experiencia: alianza y bendición en comunidad, en las fechas indicadas por la pastoral.

Hondo momento de familia

"La necesidad tiene cara de hereje". Esto parecía una herejía para los schoenstattianos más antiguos. Pero lentamente, grupos de la rama fueron escogiendo este camino con lo que se hace más simpático al hacerlo con hermanos ya conocidos. El primer paso, el más solemne, se hace en el santuario o en alguna ermita; el segundo, el mismo día, al regresar a casa, incluso con agua bendita para instalar los elementos en el lugar escogido. El tercero, de ser posible, invitando al párroco a venir a bendecir la casa y orar en el santuario.

La ceremonia principal se hace en el quincho frente al santuario de Tupãrenda. El momento que más les emociona es al entrar al final al santuario donde los padres reciben con imposición de manos la bendición sacerdotal y ellos bendicen a sus hijos. Uno de ellos me agradecía con lágrimas en los ojos por un momento tan hondo de familia que se siente en el santuario como su hogar y lleva ese espíritu de hogar a su casa. "Realmente participar de estas bendiciones y ser instrumento de la Mater para que puedan más matrimonios consagrar su hogar a ella nos permite sentir de cerca las gracias del Santuario", comenta Luis Cateura, de la Pastoral Santuarios del Hogar, inmediatamente después de la bendición.

Nuevo camino pastoral: el auto

En una exposición sobre el movimiento en Paraguay, interviene alguien buen conocedor de Schoenstatt y se manifiesta muy escéptico acerca de la bendición de los autos como santuario. ¿"Cuál es el límite para estas cosas?" se preguntaba.

En Paraguay la iniciativa la tomaron niños cuyos padres están en contacto con el Instituto de familias. Su deseo se basó en que pasan mucho tiempo allí, que allí también rezan mientras los llevan al colegio y que también puede haber alguna pelea entre ellos cuando el aburrimiento los cansa.

Así es que armaron un rito y llevaron adelante este nuevo camino pastoral en Tupãrenda y luego en el Santuario joven. No exigían ninguna charla previa. Pero explicaban muy bien que no se trata de una mera bendición conocida del auto sino que se le pedía a María que se hiciera presente allí como está presente en su santuario hogar.

Se trata pues de un santuario móvil. Allí se reza, se escucha una radio católica y se ofrece al capital de gracias conduciendo con amabilidad frente los demás y con los que van en el mismo santuario. Respetar las reglas de tránsito se hace un deber no tan fácil de cumplir en estas latitudes. Se les entrega la oración de consagración y alguna otra más.

Todo esto lo explicaban los niños. Luego viene un breve intercambio con el sacerdote y la bendición de las llaves de los autos y del agua, que llevarán para culminar la ceremonia ya ellos solos en sus autos donde pegan la calcomanía diseñada para ese momento y derraman el agua bendita pidiendo a la Mater que se establezca.

"Cuántas veces lo pequeño en la historia de la humanidad ha sido el comienzo de algo grande".

Repercusiones del 18 de octubre

Este 18 fue la fiesta perfecta. El eco mediático la convirtió en evento nacional. Por ello, diariamente siguen llegando muchos peregrinos, cosa que no se veía antes.

Uno de los tres viceministros de educación nos escribió alabando esta obra en función de las familias y animándonos a seguir en este aporte.

Hay una interacción notable entre un movimiento organizado joven, deseoso de protagonismo apostólico, y un evento desbordante de peregrinos que "ven" más que la elite. Son ojos que ven a la Mater y al Padre.

Por segundo año el Padre conquistó los corazones que se dirigían al bosquecito dedicado a él para poner su mano en las suyas. "Hoy te entrego mi corazón como hijo para que me enseñes a ser un hombre nuevo tal como Jesús nos enseñó en su evangelio".... 

Este fenómeno 18.10 tiene muchos protagonistas, no en último lugar la Campaña del Rosario. Pero el peso del movimiento organizado es superior.

Las próximas repercusiones de un 18 de octubre con unos 46.000 peregrinos sólo en este día se ven, pronto... en más bendiciones comunitarias de Santuarios del Hogar, más Alianzas de Amor, más corazones ardiendo por Schoenstatt... y más creatividad de amor.