La fuerza del Espíritu Santo también se derramó sobre Munich

Jornada mundial de la juventud en Munich para los que se quedaron en casa

Cantando y rezando Singing and praying Verbunden im Beten und Singen
Motiviación Warm-up Einstieg am Samstag
Durante la vigilia During the vigil Vigilfeier
P. Thomas Jochheim Fr. Thomas Jochheim P. Thomas Jochheim
Coro Choir Chor bei der Vigilfeier Fotos: Michael Turinsky © 2008

ALEMANIA, Georg Zimmerer. Más de cien jóvenes de varias diócesis alemanas celebraron la "Jornada mundial de la Juventud en Munich", durante el fin de semana del 18 al 20 de julio. La Juventud de Schoenstatt de Munich quiso ofrecer con ello, a "los que se quedaron en casa", una posibilidad de unirse con los jóvenes y con el Santo Padre en Australia y traer algo del espíritu de Sydney a Alemania.

"Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo y seréis mis testigos" (Hechos 1,8). Este lema de la JMJ en Australia fue también el que utilizó la juventud schoenstattiana de Munich para su encuentro.

Algunos participantes llegaron ya la noche del sábado, pues la Familia de Schoenstatt de Munich participaba de la primera Sta. Misa del P. Hans Martín Samietz, un Padre de Schoenstatt recientemente ordenado. Arribó también una numerosa delegación de Eichsfeld por el mismo motivo.

El sábado a la mañana los participantes hicieron una visita guiada por Munich, dirigida por la historiadora muniquesa Anna Rutzmoser (de las JF, universitarias).

A la tarde hubo juegos deportivos y de acción. Especial alegría causó la popular escalada de cajones de cerveza.

Recuerdos del festival de la juventud

A más tardar a la hora de hacer la parilla en el parque del Centro de Schoenstatt de Munich, surgieron los recuerdos del gran festival de la juventud que hace exactamente un año se celebró en el mismo lugar.

Los moderadores, Marie Anne Bauer y Georg Zimmerer, saludaron delante del Santuario no solamente a los schoenstattianos sino también a la gente "de otras comunidades", a los "católicos normales", a "una protestante que no tiene ningún inconveniente con los católicos", y a los "indefinibles". Los participantes se habían inscrito previamente por Internet en estas categorías.

Fue un placer especial escuchar el coro de estudiantes "Spiritus lenis", que en un pequeño concierto interpretó algunas composiciones religiosas y profanas.

Más tarde la concurrencia podía optar entre dos ofertas. El P. Michael Marmann contó sobre sus encuentros y experiencias con su director de tesis: el Prof. Josef Ratzinger, hoy Papa Benedicto XVI. Marie Anne Bauer y Theresia Rutzmoser transmitieron sus experiencias de su voluntariado en el exterior: "Entusiasmadas por Schoenstatt: un año en Chile".

Donde se necesita la fuerza y urge la acción

A causa de la lluvia la solemne vigilia no se pudo hacer delante del Santuario iluminado, pero esto solo causó una desilusión fugaz. En el gran salón se produjo inmediatamente un ambiente digno de la JMJ. Los textos introductorios mostraron donde nos falta la fuerza, sobre todo en la vida cotidiana. Por ejemplo en el levantarse a la mañana, en las decisiones importantes, en las relaciones con los demás. En la vida de María se muestra ejemplarmente como puede obrar el Espíritu Santo. El P. Thomas Jocheim, que dirigió la vigilia, celebró un rito de unción. Los jóvenes se ungieron mutuamente con óleo. Finalmente la banda del festival de la juventud tocó "Unser Weg bewegt – camino a Cristo" y con esto señaló que se nos dio la misión de llevar, como misioneros, nuestra fe al mundo.

Los bocadillos que se sirvieron a la medianoche, incluso el abundante café, contribuyeron a fortalecerlos corporalmente para la transmisión en vivo de la gran Eucaristía de cierre con el Papa Benedicto en Sydney, que comenzaría a las 2 de la madrugada, hora de Alemania.

Después del "brunch" del domingo a la mañana, la Sta. Misa fue el punto final del encuentro. El P. Stefan Strecker mostró en cuatro imágenes donde y como puede obrar la fuerza del Espíritu Santo. La banda creada expresamente para la ocasión creó un marco muy acogedor.

Al final todos estaban algo cansados por la larga noche en vela. Sin embargo, bajo ese cansancio superficial, una fuerza abrió sensiblemente su camino, la que después apremiaría a los participantes a continuar su acción en la vida cotidiana.