published: 2008-01-25 |
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Unidos en la Virgen: la Catedral imperial y el "Palatinado de María"Santa Misa en preparación al cuadragésimo aniversario del Centro de Schoenstatt en Herxheim |
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ALEMANIA, Walter Dejon. "Se aproximan grandes acontecimientos". Así saludó el P. Michael Hergl, de Neustadt, a la gran cantidad de gente que llenaba la iglesia de Marienpfalz (Palatinado de María) el 18 de enero. El gran acontecimiento al que se refería es el 40º aniversario del Centro de Schoenstatt de Herxheim, en Landau. Con la bendición del Santuario y de la casa de las Hermanas – el 16 de junio de 1968 – fue inaugurada la primera etapa de la construcción, un motivo para que el Movimiento de Schoenstatt de la diócesis de Espira agradeciera por los 40 años de "historia de la salvación" mirando hacia atrás y preparándose para el futuro. Por este motivo, los schoenstattianos de las regiones del Palatinado y del Sarre – Palatinado (dos regiones que pertenecen a la diócesis de Espira) han comenzado su marcha hacia este gran aniversario: la primera estación fue una jornada sobre lo porvenir realizada el 16 de junio de 2007 y una peregrinación de gratitud al Santuario Original, el 30 de septiembre de 2007. La gran fiesta del aniversario será el 22 de junio de 2008. El 18 fue elegido para celebrar la solemne Sta. Misa, porque cada 18 de mes se recuerda en todo el mundo schoenstattiano la fundación de Schoenstatt el 18 de octubre de 1914. Se trata de conservar viva la herencia mariana de la diócesisEsta Santa Misa, dijo el celebrante, tiene como lema "La catedral imperial y el Palatinado de María", que busca expresar la estrecha relación del Centro de Schoenstatt "Palatinado de María" con la diócesis. "He aquí a tu Madre": las palabras de Jesús a Juan, en el Evangelio, son nuestra tarea y la de nuestra diócesis. Es válido dirigir de nuevo la mirada a María y conservar viva en la actualidad la herencia mariana de la diócesis de Espira. El P. Hergl manifestó su alegría por el nombramiento del nuevo obispo de Espira, Mons. Dr. Karl Heinz Wiesemann, y leyó un mensaje de bienvenida que luego podían firmar todos los feligreses. La homilía festiva estuvo a cargo del P. Dr. Stefan Seckinger, de Homburg. Las banderas pueden dar pistas sobre los fines y los ideales de un Movimiento, dijo el predicador, recordando su propia experiencia en la Juventud masculina de Schoenstatt. La figura de la inmensa catedral de Espira estaba representada en estas banderas y en su centro, incluido el pequeño Santuario de Schoenstatt. Así lo mostraba también el logo del Centro de Schoenstatt del Palatinado de María, en la localidad de Herxheim. Su mensaje: la catedral y el Santuario, la diócesis y el Palatinado de María, la Iglesia y Schoenstatt, son inseparables. Faltaría algo si el Palatinado de María no estuviera en la diócesis, y el Santuario, sin la Catedral, no tendría en que fundarse, tanto en la bandera como en la vida. La vinculación entre la catedral y el Santuario es María, la Patrona de la diócesis. Un lugar de peregrinación de la diócesisEl predicador se apoyó en un artículo que el párroco de su pueblo natal, el P. Martín Nieder , escribió en 1994, al afirmar la importancia de la historia mariana de la diócesis para el Movimiento de Schoenstatt diocesano. Esta historia es también importante para nuestra vida, porque la fe en la Divina Providencia, tal como la anunció el Fundador de Schoenstatt, Padre José Kentenich, fue apoyo en el pasado, determinó el presente y es una orientación para el futuro. Desde el principio, desde su construcción hace casi mil años, la catedral está consagrada a María: Ella es la Patrona de Espira. Una de las estatuas de María, proveniente del siglo XIII, se salvó en 1689 – durante un conflicto bélico – del incendio de la catedral, pero en 1794 la quemaron las tropas de la revolución francesa y la catedral fue utilizada para fines extraños: depósito y lazareto. "¿Qué hizo el pueblo ante esta situación?", preguntó retóricamente el P. Dr. Seckinger. "La catedral había perdido su significado, pero continuó la vida de fe; la imagen de María fue destruida, pero María continuó viva en el pueblo", fue su respuesta. Por eso después, en 1822, la catedral fue consagrada nuevamente. En 1930, para los 900 años de la catedral, se entronizó una nueva estatua de María. La catedral continuó siendo un lugar de peregrinación de la diócesis, como lo experimentó él mismo, siendo vicario de la catedral, especialmente en las fiestas patronales del día de la Asunción de la Sma. Virgen. Saludo del Padre Kentenich para la bendición de la piedra fundamentalPara el día de la bendición de la piedra fundamental del Santuario en el Palatinado de María, en 1967, el Padre Kentenich envió un cuádruple saludo:
Por eso está el pequeño Santuario de Schoenstatt en la gran catedral, finalizó el predicador, porque podemos enriquecer a la diócesis si en nuestra vida se transparenta María. La catedral y el Santuario son dos lugares en los que experimentamos a María, donde podemos agradecer, alegrarnos, y marchar al futuro llenos de confianza. Un Santuario de la alegríaLa celebración eucarística en el ámbito de la catedral terminó con el rezo de la Salve en el Santuario de la Alegría, tal el nombre del Santuario de Schoenstatt. Como no podían entrar todos en un lugar tan pequeño, la oración se hizo al aire libre. La experiencia de los cuarenta años de existencia del Palatinado de María, es que Ella puede enriquecer especialmente a nuestra diócesis por un regalo: una profunda alegría, decía en la introducción de la oración. "Con este Santuario, el Palatinado, donde se goza de alegría, sol y alborozo, surge una nueva fuente de alegría, de naturaleza profunda, que fluye del corazón de Dios y del corazón de nuestra querida Madre tres veces Admirable. Donde hay alegría hay amor, y viceversa. Todos los que vengan aquí en el futuro deben encontrar una alegría profunda y verdadera, tienen que encontrar aquí, en el Palatinado de María, a la Reina de la alegría, la causa primera de nuestra alegría", así lo escribió el Padre José Kentenich en su saludo para la bendición de la piedra fundamental. Con esta experiencia, los participantes pudieron partir alegremente de regreso a sus casas, después de una reunión en la que se sirvieron galletitas y bebidas calientes. La próxima etapa en este camino hacia el aniversario, será la renovación de la coronación el próximo 8 de marzo a las 15 hs. Siguiendo una tradición de la Iglesia, María será coronada con una nueva corona. Su titulo original en el Palatinado de Maria será: "Reina de la alegría". Traducción: aat, Argentina |
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Last Update: 01.02.2008