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Mons. Robert Zollitsch entrega los certificados a matrimonios que terminaron con sus estudios en la Academia para Matrimonio y Familia Archbishop robert Zollitsch gives the certificates to couples who finished their studies at the Academy for Family and Marriage Erzbischof Dr. Robert Zollitsch überreicht den Absolventen-Ehepaaren der Akademie für Ehe und Familie ihre Zertifikate |
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Publico: los niños en primera fila Audience: children in the front row! Blick ins Publikum – Kinder in der ersten Reihe! |
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Maria Theresia y Dr. Hubertus Brantzen Maria Theresia and Dr. Hubertus Brantzen Maria Theresia and Dr. Hubertus Brantzen |
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Los matrimonios presentaron sus temas The couples presented their themes Die Ehepaare präsentierten ihre Themen |
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Misa de envío Holy Mass with mission Sendungsgottesdienst |
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Simbolos de los matrimonios Symbols of the couples Symbole der Ehepaare |
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Marrimonios que quieren fortalecer a otros matrimonios Couples who want to make a difference Ehepaare, die etwas tun wollen für Ehe und Familie Fotos: POS Fischer © 2007 |
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ALEMANIA, mkf. "Justamente hoy, hay que anunciar la imagen de la familia como sustrato de una vida bien lograda". Así describió Mons. Dr. Robert Zollitsch en el primer domingo de Adviento, una de las tareas más apremiantes de la Iglesia. Mas esto no podía "suceder solamente en un hermoso sermón". Pero el anuncio de esta imagen "solo tendrá resonancia donde, por medio de la vida práctica y el ejemplo experimentado, se manifiesta la familia como célula originaria de la vida", dijo Mons. Zollitsch en la ceremonia del envío canónico de los egresados de la Academia para el matrimonio y la familia en el Centro de Schoenstatt de Oberkirch. Le entregó a ocho matrimonios el certificado que los identifica como entrenadores de familias, después de haber aprobado con éxito los dos años de formación profesional. "Estoy feliz y agradecido que ustedes recién hayan enfocado esto. No a través de estadísticas, brillantes conferencias o esperándolo todo del Estado, sino asumiendo, como cristianos, su responsabilidad".
La finalidad de la Academia – dijo el matrimonio de María Theresia y Hubertus Brantzen, de Maguncia – no es hacer simplemente un "lobby" por la familia, sino la de capacitar a matrimonios comprometidos para fortalecer a los demás en su matrimonio y en su familia. "Se trata de un fortalecimiento de la competencia básica de un matrimonio", dijo el Prof. Dr. Brantzen. Cada matrimonio busca, según sus propias inquietudes y fortalezas, su campo pastoral en la Iglesia, en el área de la educación o en el entorno de la vida familiar o profesional. Nutrida de la espiritualidad de Schoenstatt, la Academia para el matrimonio y la familia, está abierta para todos los matrimonios que estén dispuestos a trabajar en su propia relación, que estén interesados en descubrir nuevas perspectivas y actitudes en su matrimonio, que tengan una orientación religiosa fundamental y que estén dispuestos a colaborar en el análisis científico de la formación profesional. La Academia capacita para una actuación consciente y competente como equipo matrimonial, proporciona fundados conocimientos sobre temas relevantes del matrimonio y de la familia y conocimientos técnicos metodológicos en retórica, presentaciones y moderación.
Los temas que me mueven a mí, también mueven a los demás
En presencia de numerosos representantes de la Iglesia – ante todo la del Arzobispo de Friburgo, Mons. Dr. Robert Zollitsch – de la prensa, de los dirigentes del curso y de la Academia, así como de sus invitados, los ocho matrimonios egresados mostraron en breves presentaciones lo que les ha aportado la Academia y que temas ofrecerán. Para algunos matrimonios, se han hecho importantes los símbolos y los ritos, otros han descubierto que la comunicación cotidiana orientada en la solución de las tareas familiares no es suficiente para establecer, como matrimonio, un dialogo conyugal más profundo. Por eso es necesario tener un tiempo para el "diálogo matrimonial". La búsqueda de huellas de la conducción de Dios en la propia vida y en la vida de la familia es el tema preferido de Claudia y Bruno Kulinsky, de la diócesis de Rottenburg – Stuttgart.
"¡Esto ayuda a darle un rumbo claro a la vida!". La educación religiosa de los propios hijos, dijo el matrimonio Seckinger, "depende de que nosotros, los padres, llevemos una vida veraz y auténtica ante ellos". En el segundo año de la formación de la Academia, ellos han elaborado un "ABC de la educación religiosa", que quieren ofrecer a las demás familias. Que no solamente cada persona, sino cada matrimonio es único, y que vale la pena descubrir las huellas de Dios en la vida cotidiana del matrimonio, entusiasma a los esposos Margit y Joaquín Swientek, del Instituto para la evangelización universal, ICPE, de Oppenau – Allerheiligen . En una conversación con el P. Birkenmaier, se habían dado cuenta de que existía la posibilidad de participar en la Academia, casi directamente ante la puerta de su casa. Son apenas 5 kilómetros desde Allerheiligen a Oberkirch. Los esposos Beate y Christian Glögger se alegraron especialmente porque ellos "entraron en la Academia como matrimonio y salieron como familia". Quieren invitar a otros matrimonios para elaborar, especialmente para la Misa, algunos ritos propios que acompañen a los de la liturgia. "Si en el Padrenuestro el matrimonio se toma de las manos, es algo que también da fuerzas en la vida diaria".
La vida se enciende con la vida
"Es el ejemplo positivo que libera las fuerzas y puede motivar a los demás. Lo sabemos de nosotros mismos, cuando nos orientamos en personas, quienes por sus vivos testimonios, despiertan en nosotros nuevas energía que nos da ánimo para comenzar de nuevo . Pues la vida se enciende en la vida", citó Mons. Zollitsch al Padre José Kentenich, Fundador del Movimiento de Schoenstatt, en cuya espiritualidad familiar se orienta la Academia para el matrimonio y la familia. "No tanto por el reclamo de innumerables, aunque útiles, mandamientos, puede comenzar un cambio en las ideas, sino sobre todo por el ejemplo logrado, hecho con alegría. Esta es el arma de la luz que se nos da, y de la que podemos hacer uso. Pues es un arma que no causa ninguna herida. Es un arma que toca la vida y la deja surgir, y sobre todo es la luz que nuestro mundo tanto necesita".
En el ofertorio, los egresados llevaron al altar símbolos originales que expresaban lo que los motivaba, lo que llevaban consigo y el compromiso que querían asumir por la familia en la vida diaria.
Entusiasta y profunda fue la gratitud a los dirigentes del curso y de la Academia. Al final de la Misa, gratamente acompañada por la música, Mons. Zollitsch recibió una tinaja.
La ceremonia de envío terminó con un almuerzo festivo.
En febrero comenzará en Oberkirch un nuevo curso de la Academia para el matrimonio y la familia. Quedan muy pocos lugares.
La Academia para el matrimonio y la familia está patrocinada por el obispo de Maguncia, Cardenal Karl Lehmann.
Traducción: aat, Argentina