La santidad de la vida diaria nos regala la consagración de la vida diaria

Consagración perpetua del primer curso de la Federación de Madres de Portugal

17 de noviembre: Misa en el Santuario Original November 17: Holy Mass in the Original Shrine 17. November: Heilige Messe im Urheiligtum
P. Alejandro Martínez, hast ahora Asesor de la Federación de Madres en Portugal Fr. Alejandro Martínez, until now Assitant of the Mothers’ Federation in Portugal P. Alejandro Martínez, bis jetzt Gründungsbeauftragter für den Mütterbund in Portugal
Encuentro alegre Joyful encounter Herzliche Begegnung
Santa Misa en el Santuario Regnum Patris, cerca de la Casa Marienland Holy Mass at the Regnum Patris Shrine, at House Marienland Heilige Messe im Regnum Patris-Heiligtum bei Haus Marienland
Las medallas  -regalo de la Federacion de Madres de Alemania – sobre el altar del Santuario Original The medals – gift of the Mothers’ Federation in Germany – on the altar of the Original Shrine Die Bundesmedaillen, Geschenk des Mütterbundes in Deutschland, auf dem Altar des Urheiligtums
18 de noviembre, Santuario Original: Rito de la consagración perpetua November 18, Original Shrine: Rite of the Perpetual consecration 18. November, Urheiligtum: Ewigweihe Fotos: POS Fischer © 2007 Álbum de fotos – photo album – Fotoalbum

SCHOENSTATT, mkf. El 18 de noviembre – día de alianza y cumpleaños del Padre Kentenich – en Schoenstatt se vivió la consagración perpetua del primer curso de la Federación de Madres de Portugal, cuyas 12 integrantes se sienten como curso fundador de la Federación en Portugal.

Llegaron a la Schoenstatt el viernes bien entrada la noche y se alojaron en la Casa Sonnenau - después de una búsqueda de equipaje varado en el camino. El sábado por la mañana celebraron una Misa en el Santuario Original junto a algunas representantes de la Federación de Madres de Alemania. Las acompañó el Padre Alejandro Martínez, hasta este momento asesor de la Federación de Madres en Portugal, y la Hna Liane, su asesora desde octubre. Al comienzo de la Misa, la Hermana Luciane, jefa de la Federación de Madres en Alemania, las saludó y les ofreció un regalo especial: las medallas, conquistadas por las madres de Alemania. Colocó la cajita con las medallas al pie de la cruz del altar del Santuario Original.

Las madres de Portugal destacaron que se sienten felices y orgullosas de no formar parte de una comunidad aislada sino de pertenecer a una comunidad que busca formar cada vez más una conciencia de internacionalidad. En un mundo globalizado, Schoenstatt tiene en el Padre Kentenich un ejemplo muy rico de cómo formar una internacionalidad orgánica.

Después de un encuentro enriquecedor con las representantes de la Federación de Alemania, y unas horas de retiro, las madres cerraron el día 17 con una hora privada en la tumba del Padre, maravillosamente adornada con ramilletes de rosas. Qué coincidencia… se ofrecieron al Padre para su misión desde el Santuario a la misma hora en que en Crete, Nebraska, se bendecía un nuevo Santuario de Schoenstatt.

Consagrarse es entrar en una relación

"Pronto, pronto llega el gran momento", dice una de las madres, visiblemente emocionada, la mañana del 18 de noviembre al salir del comedor de Sonnenau. A las 11 de la mañana, todos se reunieron en el Santuario de las ramas femeninas en el Monte Schoenstatt, "hogar también de la Federación de Madres", como dijo la Hermana Liane. En el año 1972 la Federación de Madres de Alemania llevó el cuadro de la MTA para este Santuario a Roma, donde fue bendecido por el Papa Pablo VI, justo cuando sucedió el atentado contra la estatua de la Pietá. Esta vivencia de llevar el cuadro de la MTA y a la vez ver la destrucción de su imagen, llevó a la Federación de Alemania a su ideal de querer ser imagen viva de la MTA: Transparente de la MTA. A la explicación de la Hna. Luciane al comienzo de la Misa respondieron las madres de Portugal con un alegre: "¡Sí, que quien me ve te vea a ti!".

En su prédica, en la Misa, el Padre Martínez les mostró las dimensiones de la consagración perpetua. Cada consagración es una continuación de la consagración bautismal, dijo. Cada consagración – de cosas, proyectos – es una entrega total; una consagración de personas, del propio ser, es una entrega total de amor para ser pertenencia total de Dios. La consagración corresponde también a la aspiración a la santidad. La consagración no nos hace santos "de golpe" (qué pena, ¿no?), sino que requiere nuestra aspiración a la santidad, a la santidad de la vida diaria. Pero también vale en este sentido: La santidad de la vida diaria nos regaló, de esta manera, la consagración de la vida diaria, de la vida diaria con todos sus proyectos, cosas, y personas de nuestra vida diaria.

La consagración, además, es una entrega mutua, tiene la característica de alianza. Es una consagración a Dios, que al mismo tiempo es una consagración a los hombres.

La consagración es un seguimiento de Cristo, un entrar en relación con él, un crear un vínculo con él, con Dios Padre, con el Espíritu Santo, con la Mater.

Nos consagramos no para nosotros mismos, destacó, sino para construir el Reino de Dios, para que nazca una nueva cultura.

Con la consagración a Dios, no dejamos detrás a la Mater, quien nos llevó en la Alianza a esta consagración. Al contrario, asumimos de nuevo su misión de construir una cultura mariana, nos identificamos completamente con ella, lo elegimos de nuevo como norma de nuestra vida. Nos consagramos a ella para compartir su misión – su misión permanente, como su misión para nuestro tiempo.

Cada una se consagra individualmente, guiada en su camino a la santidad y a compartir la misión de María para nuestro tiempo según su ideal personal; pero nos consagramos también en comunidad, guiadas por el ideal de curso.

En las peticiones, y a través del símbolo que llevaron al altar en la procesión de ofrendas, las Madres expresaron de manera muy profunda y original su entrega y compromiso. Siendo el primer curso de Portugal – con tres integrantes de España - se sienten la generación fundadora de la Federación de Madres en Portugal, al igual que las españolas respecto a la naciente Federación en su patria.

Tantas gracias recibidas

Después de la Misa se dirigieron a la habitación del Padre en la Casa de formación de las Hermanas de María, y más tarde al Santuario Original para el Rito de Consagración.

Grande fue la sorpresa de una de las Madres de España al ver frente al Santuario una figura conocida: ¡su marido que había viajado desde España para darle la alegría de participar en este momento tan importante de su vida!

Llegó el momento tan esperado... Se consagraron para siempre, como primer curso de la Federación de Madres de Portugal, en el Santuario Original, ¡en el día de alianza!

Después fue tiempo para celebrar, lo que hicieron con toda alegría. "Somos todas muy normales", comentaron después entre risas. "Queremos ser santas, sí, pero santas normales que disfrutan de la vida y saben festejar!

El lunes por la mañana, después de otra Misa en el Santuario Original donde juntas recogieron los dones de estos días tan bendecidos, regresaron a sus países para construir, en sus vidas diarias, una nueva cultura...