published: 2007-06-15 | |
Eres realmente parte de algo más grandeLa juventud de Schoenstatt se une en la celebración en Munich. Impresiones de una participante mexicana |
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ALEMANIA, Aleida Montalvo. Entre cantos, bailes, risas y meditaciones se pasó un excelente fin de semana en Munich entre 600 jóvenes reunidos en el corazón de un mismo Santuario. La invitación fue nacional, sin embargo también llegaron suizos, españoles, franceses, mexicanos, húngaros, paraguayos, argentinos y hasta sudafricanos; todos atraídos por este lugar llamado "Pequeño Schoenstatt". La organización del acontecimiento fue impresionante, la decoración, el hospedaje, la comida, el transporte, las pláticas y las actividades. La música no fue excepción, era increíble escuchar a como cantaba la banda. Y la respuesta era acorde: los jóvenes los ovacionaban gritando "¡Otra, otra!". Y aparte de todo eso lo más agradable aun era el ambiente, donde se experimentaba que verdaderamente eras parte de algo más grande, y sin ti esto no sería posible. El mismo logotipo del encuentro muestra cómo una pequeña gota (cada persona) puede mover todo un mar y tener un gran impacto. La alegría que se respiraba en el lugarSe experimentó de todo, desde la solemnidad a la hora de la vigilia hasta el gran baile que hubo a la noche donde se respiraba alegría y nadie podía quedarse sentado y no bailar. Era admirable ver como había alemanes que se acercaban espontáneamente a los extranjeros para traducir toda una plática, lo que requería de un gran trabajo y concentración. Estando ahí no había duda de que Schoenstatt sí es un estilo de vida; y la alegría, la humildad, y la disposición de servicio, estuvieron presentes en todo momento. A la hora de la fiesta se podía ver la libertad con la que la gente bailaba y cantaba, no había inhibición alguna que les impidiera expresarse. Mucha gente lo describió como lo mejor después del Festival de la Juventud en 2005 (en el marco de la JMJ 2005) y se comprobó al momento de cantar el tema central (‘’Unser Weg Bewegt’’) de ese pasado festival ya que todos recordaban la letra y hasta la coreografía. Era fascinante ver a la juventud schoenstattiana reunida de nuevo con ese alto ideal, con la esperanza de un mejor futuro. Sí hay esperanzaEl tema de la jornada: "Darle vida al futuro", comenzó con un video con entrevistas a jóvenes a los que se les preguntaba cuáles eran sus sueños para el futuro. Las respuestas fueron decepcionantes ya que muchos contestaban que no los tenían, ya que para qué tenerlos si probablemente nunca se realizarían. Estando ahí se desarrolló el tema y fue ampliamente discutido por jóvenes, adultos, Hermanas y Padres, y al final se pudo comprobar que sí hay esperanza, que los sueños sí existen. Nadie puede inhibir el futuro, y no se le debe tener miedo. El futuro va a llegar y hay que estar listos para recibirlo con los brazos abiertos. |
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Last Update: 28.06.2007
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