Romper la estrechez de nuestra vida, salir al encuentro de los hombres

El obispo de Osnabrück, Mons. Franz Josef Bode, presentó en Schoenstatt la oración preparatoria de la Jornada de Católicos Alemanes, a realizarse en su diócesis.

Durante la presentación de las familias During the presentation of the families Während der Präsentation der Familien
Mons. Franz-Josef Bode compartiendo con los peregrinos Bishop Bode sharing with the pilgrims Bischof Bode im Gespräch mit den Pilgern
Durante la Santa Misa During the Holy Mass Bei der Heiligen Messe
Procesión en Monte Schoenstatt Procession on Mount Schoenstatt Prozession auf Berg Schönstatt
Despedida en el Santuario de Monte Schoenstatt Farewell at the Shrine at Mount Schoenstatt Herzlicher Abschied am Heiligtum auf Berg Schönstatt Fotos: POS Fischer © 2007 Albúm de fotos – photo album – Fotoalbum

SCHOENSTATT, mkf. En Schoenstatt pudimos vivenciar por anticipado la Jornada de los Católicos Alemanes 2008, cuando Mons. Franz Josef Bode llegó a Schoenstatt con más de 500 personas de la diócesis de Osnabrück el pasado sábado 5 de mayo. "Danos el ánimo de arriesgarnos a romper la estrechez de nuestras vidas, de cesar de girar en torno a nosotros mismos para salir al encuentro de los hombres" Por primera vez Mons. Dr. Franz Josef Bode rezó en público la oración preparatoria a la Jornada de los Católicos Alemanes de 2008, a realizarse en Osnabrück. Fue el 5 y 6 de mayo con ocasión de una peregrinación a Schoenstatt. La Familia de Schoenstatt de su diócesis – donde tendrá lugar la 97ª Jornada de los Católicos en el mes de mayo de 2008 – ha realizado esta peregrinación como símbolo de la preparación espiritual a este acontecimiento.

La Jornada de los Católicos a realizarse en Osnabrück, dijo Mons. Bode, debe dar un impulso hacia el futuro, en el sentido de la esperanza. El versículo del salmo 18 – algo modificado – "Tú nos guías hacia la amplitud", lema de la Jornada 2008, contiene una completa profesión de fe: se dirige a un Dios a quien se le puede decir "Tú", que acepta a cada hombre personalmente; es también una aceptación de la conducción divina y que nos dejamos dirigir por la voluntad de Dios, que queremos estar en camino hacia una nueva relación como pueblo de Dios, la Iglesia, que está dispuesta para una nueva relación de las distintas confesiones y para el diálogo con otras religiones.

"Debemos dejar de girar en torno a nosotros mismos para salir al encuentro de los demás", continuó diciendo el obispo. "Salir de la estrechez pero no a cualquier lugar, sino hacia la amplitud de Dios. Esto es algo que libera, que nos hace respirar hondamente, que nos permite mirar hacia delante y hacia arriba". El domingo de Pentecostés la diócesis comenzará a caminar unida hacia la Jornada de los Católicos, vinculada con el símbolo de un bastón de peregrino, algo "semejante a lo que fue la Cruz de la Jornada Mundial de la Juventud" que peregrinará por todas las parroquias. Mons. Bode agradeció a la Familia de Schoenstatt de su diócesis que quiso pedir la bendición de Dios para la preparación de esta Jornada mediante la peregrinación a Schoenstatt, con la expresa disposición de que "la Jornada de los Católicos tenga una prioridad absoluta en nuestro trabajo".

Donde muchas cosas se derrumban y fracasan, ya crece subliminalmente la nueva Iglesia

La presentación de la oración preparatoria a la Jornada de los Católicos se llevó a cabo después de un intercambio vivaz con Mons. Bode, en el que compartió con los peregrinos su preocupación por la pastoral de los sacramentos, pero también indicó un nuevo resurgimiento: la fundación de nuevos monasterios, nuevos "focos religiosos", es decir lugares donde se encuentra la gente que casi no conoce pero busca a Dios – por ejemplo en el centro de la ciudad de Bremen –, la escuela de oración en la catedral, la proyectada fundación del "Foro de la catedral" como centro de la pastoral urbana, el aumento paulatino y permanente de la cantidad de personas que quieren conocer el cristianismo y bautizarse, los muchos emprendimientos surgidos entre los jóvenes después de la JMJ, y la bendición que parte del principio de unidad de la Iglesia, el Papa.

Donde muchas cosas en la Iglesia caen y fracasan, dijo Mons. Bode, ya surge desde lo más profundo una nueva vida, tal como sucedió en Schoenstatt el 18 de octubre de 1914: en un momento en que Alemania estaba sumergida en una inmensa catástrofe, surgió aquí, en este pequeño lugar, algo que después tendría difusión universal. "Donde en la Iglesia muchas cosas caen y fracasan, surgen desde lo más profundo otras que guiarán a la Iglesia en el futuro. Hoy son los grupos espirituales, los círculos de oración, los Movimientos, las personas que se reúnen en los Santuarios, que hacen peregrinaciones, los círculos bíblicos – porque todo lo que sirve para profundizar, guía hacia la amplitud y hacia el futuro –"

Crear una red de fe, esperanza y amor

Mons. Bode había comenzado poco antes el día de peregrinación, junto con los peregrinos, en el Santuario Original. Avanzada la tarde, celebró con ellos una Sta. Misa cantada en la Iglesia de Peregrinos. En la homilía mencionó la red de fe, de esperanza y de amor, tema que también trató en la celebración de las bodas de oro del Santuario de Schoenstatt de Meppen, el pasado mes de septiembre. La red mundial de Santuarios y de Santos, destacó Mons. Bode, es el gran tesoro de la nueva Iglesia. Esta red apoya también a la diócesis de Osnabrück y a la preparación a la Jornada de los Católicos .A la tarde, Mons. Bode presidió también la celebración del mes de María en la Iglesia de la Adoración, que terminó con una procesión al Santuario de las Hermanas de María, en el Monte Schoenstatt, que celebraba un nuevo aniversario de su inauguración. La celebración mariana y la procesión terminaron en un cordial encuentro del obispo con los peregrinos.

A la mañana siguiente, el grupo de familias de Osnabrück otra vez acompañó musicalmente la celebración de la Sta. Misa. El punto culminante fue la bendición personal que al final impartieron muchos sacerdotes.

La peregrinación finalizó en las primeras horas de la tarde con una celebración mariana en la Iglesia de Peregrinos, una procesión al Santuario Original y el envío desde allí. Y de ahora en más: hay que romper la estrechez de nuestra vida, salir al encuentro de los hombres. ¡Tú nos guías hacia la amplitud!

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Traducción: aat, Argentina/es