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| Jornada de iniciación de la Obra de Familias en Ciudad del Este Journey of Introduction to the Schoenstatt Family Movement in Ciudad del Este Einführung in die Schönstatt-Familienbewegung in Ciudad del Este |
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Taller Workshop Arbeitskreis |
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Presentación Presentation Präsentation |
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Oración en el Santuario Prayer in the Shrine Gebet im Heiligtum |
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La Mater llama a sus hijos The MTA is calling her children Die MTA beruft Familien Fotos: Javier Cabral © 2007 |
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PARAGUAY, Javier Cabral. ¿Recuerda usted su Jornada de iniciación de la Obra de Familias? ¿Recuerda cuáles fueron los motivos por los cuales se acercó al Movimiento? Entre bromas y veras, algunos dicen que el 50% – las mujeres – lo hicieron para que sus maridos "se porten mejor" y que el otro 50 % – ellos – lo hicieron para que sus esposas "se porten mejor".
Independientemente de la historia personal de cada uno, en esta semana nos tocó asistir a una de las charlas de la Jornada de iniciación de la Obra familiar en Ciudad del Este.
La semana anterior, Lichi y Nelson Pérez habían hablado de "La vida conyugal, un camino hacia Dios" y ahora el matrimonio de Alma y Aníbal hablaron de la "Originalidad del amor matrimonial", tema basado en los cuatro tipos de amor del libro Lunes por la tarde (charlas del Padre Kentenich al primer grupo de familias en Milwaukee). Ambos matrimonios forman parte del Curso 18 de la Federación Apostólica de Familias que están en etapa de candidatura.
Fue una charla amena, con trabajos de grupo. Esa noche hizo mucho frío, lloviznaba lo que hizo pensar que los que llegaron al Terruño estaban muy interesados.
La charla anterior había terminado con una canción de amor, cantada por Nelson. En esta, el final fue un poema de amor que Alma le dedicó a Aníbal. Los aplausos al final fueron vibrantes.
La Mater llama a sus hijos
Todos dijeron ¡qué compromiso para los próximos charlistas!, tendrán que bailar, o algo así. Luego peregrinamos al Santuario para agradecer a la Mater por la magnífica jornada y antes de retirarnos hicimos una parada, bastante prolongada, frente a una abundante mesa de panes, chipas, rosquitas, palitos, algo así como un "de todo un poco", tanto dulce como salado, que el grupo Creciendo con Alegría había preparado.
Mientras volvíamos a casa con mi esposa, pensábamos como la Mater va atando el hilo de la historia, jornada tras jornada, grupo tras grupo, llamando a la gente que ha elegido y que va a ayudarle a construir el Reino de su Hijo en la tierra.