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 published: 2007-04-05

Cuando se hace difícil aceptar un hijo

"Signo de luz": una mirada a su trabajo – Juntos por la vida

 

La conferencista principal, Maria Grundberger, de la iniciativa „Helpers of God’s precious Infants“

Main speaker: Maria Grundberger, of the initiative „Helpers of God’s precious Infants“

Hauptreferentin: Maria Grundberger von der Initiative „Helpers of God’s precious Infants“

Foto: POS Fischer © 2007

 

Corinna Runge presentó su libro sobre el femenismo católico

Corinna Runge presented her book on catholic feminism

Corinna Runge präsentierte ihr Buch zum katholischen Feminismus

 

Moderación: Maria Engler, presidente de „Signo de Luz“

Moderation: Maria Engler, President of „Sign of Light“

Moderation: Maria Engler, Vorsitzende von „Lichtzeichen“

Fotos: Rainer Eichenberg © 2007

 
   

SCHOENSTATT, mkf. No dejan solas a las mujeres que no esperaban quedar embarazadas, las acompañan, también hasta después del nacimiento, las apoyan y les dan ánimo: de todo esto se ocupa "Signo de Luz". El 31 de marzo Signo de Luz organizó una jornada abierta en torno al tema "Compromiso por la vida", donde mostró variados aspectos del trabajo de esta Asociación cercana al Movimiento de Schoenstatt, y dio la palabra a una iniciativa en el amplio campo de la protección de la vida, "Helpers of God’s precious infants", Ayudantes de los valiosos hijos de Dios. María Grundmann, una obstetra de Munich de 25 años de edad, habló con convicción de su compromiso por la vida y contra el aborto.

A causa de la enfermedad de Martina Sauer, María Engler, presidenta de la Asociación Signo de Luz, se hizo cargo de la moderación en la sala de proyecciones de la Casa Padre Kentenich, en Schoenstatt. La conferencia estuvo enmarcada en una detallada presentación del trabajo de esta Asociación, cercana al Movimiento de Schoenstatt. Marie Helen Neihs llevó a los oyentes a pasar desde una simple escucha hacia un compartir participativo, por medio de su relato del acompañamiento concreto a cuatro mujeres con condiciones de vida totalmente distintas, y de las dificultades que tenían en aceptar un nuevo hijo, desde la carencia del ajuar, pasando por la sobre exigencia con los hermanos y la falta de un lavarropas, hasta la preocupación existencial por el dinero necesario para los alimentos por carecer de trabajo desde hace mucho tiempo. Nada de esto es insoluble, pero frecuentemente no se puede lograr con las propias fuerzas y en la confusión emocional de las primeras semanas del embarazo. Y es bueno que en este momento haya gente que sencillamente está allí y ayuda sin trámites burocráticos, incluso hasta después del nacimiento.

Valiosos hijos de Dios

"Pro life": aglutina a mucha gente en la encarnizada e insensible lucha contra el aborto. Variados relatos de los medios de Estados Unidos han acuñado esta imagen. El P. Philip Reilly, que trabaja desde hace décadas en el movimiento "Pro life", es sin embargo una figura emblemática de un acercamiento cariñoso a las mujeres que querían abortar o que ya lo han hecho. Y con esto salvó a innumerables mujeres y niños... Un encuentro con Mons. Reilly cuando ella tenía 17 años, la llevó a María Grundberger a entregarse por la protección de la vida. Como el movimiento de Mons. Reilly organiza discusiones en las veredas y oraciones delante de las clínicas donde se aborta, y construye centros donde las mujeres reciben ayuda para poder aceptar a sus hijos, desde entonces la Sra. Grundberger comenzó a hacer lo mismo. Se dirige a las mujeres que están en camino a la clínica donde se aborta, una actividad penosa, vinculada a muchos insultos y desilusiones. "Quizás pude salvar a cuatro o cinco niños, entre cien, que debían ser abortados", cuenta ella. Cuatro o cinco valiosos hijos de Dios. Los "Ayudantes" hacen su trabajo con mucha imaginación: reparto de volantes en discotecas, oraciones, conferencias, trabajo conjunto con otras asociaciones protectoras de la vida, apelaciones a las mujeres para que se relacionen con su hijo cuando lo han visto en una ecografía que les ofrecen hacerse...

Seria muy importantes crear redes y vincularse, dice María Grundberger en la ronda de preguntas del final. Muchas asociaciones defensoras de la vida no trabajan unidas a causa de sus diferencias internas. Pero es importante lograrlo en el sentido del compromiso por la vida. ¿Juntos por la vida? ¿Por qué no puede ser posible?

Una nueva casa para Signo de luz

Al final del encuentro la Sra. Runge, que habló en el pasado verano en un encuentro de Signo de luz, presentó su libro "Feminismo católico".

Las hasta ahora "las amplias, pero muchas veces muy frías" salas de la Casa de la Alianza, después de cinco años pasan a estar a disposición de Signo de Luz a mediados de año. La Federación de mujeres de Schoenstatt ha reaccionado con rapidez y generosidad y les ha ofrecido, para sus tareas de asesoramiento, un lugar en la Casa "Pequeño jardín de María", en la calle Höhrer, directamente en la "entrada" de Schoenstatt. Pero la necesidad es muy grande y sigue creciendo. María Engler habló de una "Casa soñada", que quizás pueda ser la Casa Signo de Luz, si la Asociación tiene éxito en conseguir, en los próximos dos meses, 90.000 euros. Es un precio reducido por el que la ofrece el dueño a Signo de Luz. Esta suma se compone de 180 veces 500 euros, explica María Engler. En esa casa no solamente se podría dar asesoramiento, sino también crear una vivienda transitoria para mujeres embarazadas.

Más informaciones sobre la "Acción 500 euros" se encuentra en el sitio de Internet de Signo de Luz (en alemán)

Traducción: aat, Argentina

 

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Last Update: 10.04.2007 Mail: Editor /Webmaster
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