El rostro de la MTA en millones de pantallas de ordenadores en todo el planeta

De las carpetas archivadas a las páginas Web: más ágil, más vinculante, a la disposición de todos

El P. Nicolás Schwizer con la „generación Internet” Fr. Nicolas Schwizer with members of the “Internet generation” P. Nicolas Schwizer mit der “Generation Internet”
En la Pagina de la Federación de Madres, Argentina/Paraguay At the Homepage of the Mothers’ Federation, Argentina /Paraguay Auf der Seite des Mütterbundes Argentinien/Paraguay
En la pagina de la Rama de Madres, Chile At the Homepage of the Mothers’ League, Chile Auf der Seite der Mütterliga, Chile
En schoenstatt.de At schoenstatt.de Auf schoenstatt.de
En la pagina del „Rosario de Hombres“, Brasil On the page of the “Men’s Rosary”, Brazil Auf der Seite des “Rosenkranzes der Männer”, Brasilien Fotos: Cabral © 2007

PARAGUAY, Javier Cabral / mkf. Cuando asistimos a un buen retiro y nos entregan los textos, los guardamos como un tesoro. Claro, muchas veces los guardamos tan, pero tan bien, que luego no los encontramos más. Eso sí, están en algún lado. No sabemos dónde, pero están. Es interesante el impacto y la agilidad del intercambio que permite Internet. Desde que salieron los retiros del Padre Nicolás Schwizer de las carpetas archivadas y llegaron a al correo electrónico y a las paginas web, algo cambió: se volvieron más ágiles, a la disposición de todos, convocando a la decisión y a la iniciativa propia, vinculando e inspirando a tantas personas como nunca antes. Se hicieron parte de esa nueva calidad de la comunicación schoenstattiana, que en el espíritu del Fundador utiliza Internet para difundir Schoenstatt y permitir el intercambio de inspiraciones en la Familia.

En un mismo día, Rose de Australia solicitaba la suscripción contando que era el décimo tercer aniversario de su Alianza de Amor. También la Hermana M. Danielle de la Marian Library de la Universidad de Dayton, Estados Unidos, Emely de la Juventud Femenina de Londrina y el Padre Daniel Jany de Paso Mayor (Argentina), pedían su ingreso a la lista de distribución. Luego siguieron pedidos de Burundi, la India, Nigeria y paro de mencionar los países para que no parezca una clase de geografía.

Son muchas personas en ambientes tan diversos, con un mismo deseo: profundizar en la vinculación a Schoenstatt, en la vinculación a la Santísima Virgen a través de las fichas de reflexión. Esto es un indicador que a la gente le es útil, le es práctico el mensaje de la Alianza en el día a día del mundo de hoy.

Algo que es útil a la gente

Al ver las distintas páginas Web que se han hecho eco de los textos del Padre Nicolás Schwizer que son enviados quincenalmente – la página de la Federación de Madres de la Argentina y Paraguay, la de la rama de Señoras en Chile, una página de Paraná, Argentina, la página del Rosario de Hombres en Brasil, la página de Schoenstatt en Paraguay, ¡y por supuesto schoenstatt.de! – hace pensar:

Leer al Padre Nicolás es como si estuviera hablando el Padre Kentenich. Su mensaje está siempre girando en torno a la Alianza de Amor con la Virgen María en el Santuario. Evidentemente la cantidad de suscripciones de tantos países, indica que este mensaje es muy necesario hoy, la gente lo necesita, lo pide....

El rostro de Cristo en Internet

Muchos de los textos, homilías o retiros, tienen muchos años. Sin cambiar el contenido, sólo cambiando la diagramación, una página en forma de ficha… y con una manera diferente de distribuirlo y de llegar a la gente, tiene una nueva gran repercusión. No se cambió el contenido, es el mismo mensaje de siempre; pero sin embargo es una renovación de los métodos, concretamente: la utilización de las nuevas tecnologías al servicio de la evangelización.

Es un ejemplo de que es posible hacerlo. No hace falta tener miedo de los nuevos medios, al contrario, ya lo proclamó Juan Pablo II hace años. Como San Pablo sin dudar un minuto usó las rutas del Imperio Romano – gran medio de comunicación en esa época – hoy hay que usar las "autopistas de datos" para llevar el evangelio hasta los confines del mundo. "Internet: un nuevo foro para la proclamación del Evangelio" fue el lema escogido por Juan Pablo II para la XXXVI Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales que se celebró en 2001. "A lo largo de los siglos sucesivos, esta misión evangelizadora (de la Iglesia) se extendió a todos los rincones de la tierra, a medida que el cristianismo arraigaba en muchos lugares y aprendía a hablar las diferentes lenguas del mundo, obedeciendo siempre al mandato de Cristo de anunciar el Evangelio a todas las naciones (cf. Mt 28, 19-20)", dice en el documento que con razón se puede llamar la entrada de Internet a la misión de la Iglesia. "Internet produce un número incalculable de imágenes que aparecen en millones de pantallas de ordenadores en todo el planeta. En esta galaxia de imágenes y sonidos, ¿aparecerá el rostro de Cristo y se oirá su voz? Porque sólo cuando se vea su rostro y se oiga su voz el mundo conocerá la buena nueva de nuestra redención. Esta es la finalidad de la evangelización. Y esto es lo que convertirá Internet en un espacio auténticamente humano, puesto que si no hay lugar para Cristo, tampoco hay lugar para el hombre. Por tanto, en esta Jornada mundial de las comunicaciones, quiero exhortar a toda la Iglesia a cruzar intrépidamente este nuevo umbral, para entrar en lo más profundo de la red, de modo que ahora, como en el pasado, el gran compromiso del Evangelio y la cultura muestre al mundo «la gloria de Dios que está en la faz de Cristo» (2 Co 4, 6)."

Si queremos "bautizar" la era digital, aquí tenemos las herramientas para hacerlo. Sean las fichas de reflexión del Padre Nicolás, sean los innumerables artículos publicados en las páginas de Schoenstatt: sobre cada letra, sobre cada foto, sobre cada esfuerzo de los que en la Alianza de Amor se dedican a poner algo al alcance de todos en Internet, deben brillar las palabras que el Padre Kentenich escribió en Dachau: "En nosotros (y en nuestros mensajes puestos en Internet o enviados por correo electrónico) recorre nuestro tiempo (y los medios de comunicación), preparándolo para Cristo Jesús".

Para que el rostro de Maria, el rostro del Padre, y el rostro de personas asemejadas a ellos en la alianza de amor, aparezca cada día en más pantallas de todo el globo – para eso y para ninguna otra cosa – hay que seguir enviando fichas, fotos, textos, experiencias, artículos.

Y ¿no es una amabilidad genial de la MTA permitirle al Padre Nicolás – ¡en premio a su fidelidad! – impedido de trabajar, de viajar, de predicar, de escribir, después de su accidente, ser un instrumento tan valioso para llevar adelante el uso de los nuevos medios de comunicación para el bien de todo Schoenstatt y de todos schoenstattianos que abren su casilla de correo y ven el rostro de Cristo, el rostro de la MTA entre sus mensajes?