published: 2007-02-02 |
Jesús me esperaDía de retiro para los padres de los niños que se preparan para la primera comunión |
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ALEMANIA, P. Paul Graf. El domingo 28 de enero de 2007 siete niños de la región de Eichsfeld que se preparan para la primera comunión, tuvieron una profunda vivencia en el Santuario "Pequeño Paraíso". Ese centro de Schoenstatt invitó a los padres de todos los niños que reciben esa catequesis en las parroquias del decanato de Heiligenstadt. Luego del saludo de los esposos Christiane y Ulrich Grosse, los niños entrevistaron y presentaron a la familia que tenían a su lado. Después de una canción muy alegre comenzó el programa propiamente dicho para los padres y los niños. Los niños recibieron una interesante catequesis sobre los discípulos de Emaús con la Hermana M. Judith. Mientras tanto, los hermanos de estos niños estuvieron ocupados haciendo manualidades y pintando con la Sra. Waltraud Brodmann. Y los padres se dedicaron a escuchar una conferencia del P. Paul Graf sobre el significado y el valor de la primera comunión. El matrimonio Grosse les dio consejos muy valiosos para la preparación de la fiesta. En una reunión los padres hablaron de tres preguntas que le hicieron al Santo Padre Benedicto XVI unos niños en camino a la primera comunión. Conversando sobre sus propias experiencias constataron con sorpresa que sus respuestas coincidían muchas veces con las del Papa. Un gran tesoroLuego de la pausa del mediodía, los padres se reunieron con los niños para una actividad creativa: juntos debían adornar una vela que expresara simbólicamente este tiempo de preparación. El resultado: cada vela era una pequeña obra de arte. Lo más importante de este día fue la celebración religiosa en familia con la representación catequística de la historia de los discípulos de Emaús. Una meditación llena de vida, dirigida por la Hermana M. Verónica, hizo que todos tomaron conciencia de que la primera comunión es un gran tesoro que Dios les ofrece a los niños para su vida. Luego de tomar el café con las tortas que habían llevado, los padres y los niños se despidieron muy contentos y agradecidos. Una madre dijo: "ˇHoy fue un domingo verdaderamente hermoso!" Traducción: Martina Boixader, Buenos Aires, Argentina
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Last Update: 22.02.2007
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