En memoria de Padre Carlos Bausenhart

Necrología

"Seguí mirando
y había un Cordero que estaba en pie sobre el Monte Sión,
y con él ciento cuarenta y cuatro mil,
que llevaban escrito en la frente el nombre del Cordero y el nombre de su Padre.
Cantan un cántico nuevo delante del trono
y delante de los Cuatro Vivientes y de los Ancianos.
Ellos han sido rescatados de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero" (Ap.14,1,3a,4b) (Lectura del 27-11-2006)

En memoria de nuestro hermano fallecido repentinamente
Padre Carlos Bausenhart
Padre de Schoenstatt

21 de marzo 1951 – 27 de noviembre de 2006
Miembro del Curso "Sión Patris in Paternitate"

La tarde del 27 de noviembre de 2006 fue como que un rayo nos partió por la mitad en medio de nuestra soleada existencia, al llegarnos la noticia de que nuestro co-hermano, el P. Carlos Bausenhart, había fallecido en el hospital de Colonia, Frechen, a causa de una embolia pulmonar. Tras varias semanas de internación en el hospital de Essen hace pocas semanas a raíz de una seria infección, el 20 de noviembre el P. Bausenhart debió ser internado nuevamente en el hospital cercano a Colonia por motivos desconocidos hasta ahora. Como causa de su enfermedad se habló de una nueva infección bacteriana, que se esperaba poder superar mediante la terapia correspondiente. En medio de esta situación se produjo, repentina e inesperadamente, una embolia pulmonar que puso término a su vida.

A la luz de un plan que por el momento no alcanzamos a entender, Dios ha llamado de entre nosotros junto a El, al Sión celestial, a uno de nuestros hermanos de comunidad, en su plenitud de vida, a los 55 años.

Carlos Bausenhart nació el 21 de marzo de 1951 en Ellwangen, Jagst. Era el mayor de cuatro hermanos.

Su niñez y juventud transcurrieron junto a sus padres y hermanos en Aalen-Wasseralfingen, donde su padre trabajaba como oficial de cuentas. Después de terminar la escuela primaria en Wasseralfingen, estudió en el Liceo humanista de Ellwangen. El bachillerato, terminado en 1969, fue para Carlos una notable incisión en su vida.

A través de sus padres, "ya desde la cuna" – como él mismo solía decir – estuvo en contacto con Schoenstatt y con el Movimiento de Schoenstatt. Durante sus años de estudiante se comprometió activamente en la formación de la Juventud masculina en su tierra suaba, donde ha entrado a la historia como cofundador de la región de Schwarzhorn. Al finalizar su formación escolar se sintió atraído más fuertemente todavía por Schoenstatt. Desde hacía mucho tiempo se había despertado en él el anhelo de ser sacerdote y entregar toda su vida por Schoenstatt. Su trabajo como voluntario en la sede central de la Juventud masculina en Schoenstatt, en el año 1969, le hizo más cercana la realización de este deseo. Al año siguiente ingresó en el noviciado de los Padres de Schoenstatt e inició el camino al sacerdocio junto con otros diez jóvenes.

El "Monte Sión" y la visión del Fundador, el Padre Kentenich, para la "Comunidad de Sión" lo entusiasmaron tanto a él como a sus co-hermanos, dejando su impronta en su ideal de Curso: "Sión Patris in Paternitate". Carlos Bausenhart terminó los estudios filosóficos y teológicos en diversas etapas: en el Colegio José Kentenich y en la Universidad de Münster, así como en la Academia católico-teológica de Varsovia, en Polonia. La gran simpatía del Padre Carlos por nuestros co-hermanos polacos y su compromiso por la fundación de la comunidad en ese país vienen de esa época de estudio en Varsovia. Poco antes de terminar sus estudios, Carlos fue ordenado diácono en Münster, en abril de 1978, y ya el 9 de diciembre del mismo año fue consagrado sacerdote en Liebfrauenhöhe, en su diócesis natal de Rottenburg Stuttgart. Recibió su ordenación de manos del obispo de aquel entonces, Mons. Georg Moser, amigo muy cercano de la familia Bausenhart.

La situación de entonces en la comunidad internacional de los Padres de Schoenstatt hizo que el Padre Carlos, inmediatamente después de su ordenación y primera misa, fuera enviado a tomar un curso de castellano en España, desde donde partió a comienzos de 1979 hacia su primera tarea sacerdotal como asesor de la juventud masculina de Schoenstatt en Buenos Aires, Argentina. Aún hoy la Familia de Schoenstatt argentina – sobre todo en Villa Ballester, donde el "Padre Carlos" estuvo decisivamente involucrado en la construcción del Santuario - recuerda con gratitud y entusiasmo a ese padre alemán tan amable, cariñoso y con gran sentido de humor.

Trabajó cuatro años en la Argentina, hasta el año 1983 en que regresó a Alemania, donde junto con actividades académicas se desempeñó como asistente y director espiritual en el seminario internacional de los Padres de Schoenstatt, el Colegio José Kentenich, en Münster. Como asesor espiritual y no en último término también como profesor de alemán permanentemente consultado, adquirió grandes méritos en su relación con los estudiantes de teología de la comunidad de todo el mundo, y en gran parte estuvo en contacto con la joven generación de la comunidad de los Padres.

Las múltiples aptitudes del Padre Carlos, y sobre todo su talento para los números heredado de su padre, junto con su disposición natural a colaborar con todo tipo de iniciativas y proyectos, lo llevó a estar cada vez más involucrado en tareas de conducción dentro de la comunidad de los Padres de Schoenstatt tanto a nivel provincial como de toda la comunidad de Sión.

En la época de la antigua República Democrática Alemana, desde Alemania Occidental fue rector de la casa filial que tenían los Padres allí, desde 1985 hasta la reunificación de Alemania en 1990. Asimismo, desde antes del proceso de transformación emprendido en el este de Europa con la caída del comunismo, acompañó en forma clandestina el camino al sacerdocio del primer candidato checo de la comunidad de los Padres. Desde Münster fue llamado a Schoenstatt, donde fue designado rector de la Casa Provincial en el Monte Sión, entre 1988 y 1992, además de ser ecónomo provincial, miembro de la dirección de la Provincia e integrante de la dirección de la Editorial Patris, perteneciente a la comunidad de los Padres de Schoenstatt.

Después del Capítulo General de los Padres de Schoenstatt del año 1992, el P. Bausenhart fue nombrado ecónomo general, con lo cual que trabajó durante doce años al servicio de toda la comunidad internacional. La tarea implicaba numerosos viajes en torno al globo terráqueo –como ciudadano del mundo, – por lo que el P. Carlos debió asumir, a causa de su estructura física y su corpulencia, varias incomodidades y esfuerzos, que siempre sobrellevaba con gran serenidad e incomparable sentido del humor. Por ser un experto ecónomo, continuamente fueron solicitados su consejo y su ayuda tanto en la construcción como en la consolidación de la comunidad en sus diversas regiones.

Marcado por un fuerte interés en todos los proyectos que le acercaban, y con gran creatividad – por momentos un tanto excesiva a la hora de poder concretarlos –, no sólo veló con mucho amor y paciencia por los intereses económicos de cada comunidad en los diversos países y continentes, sino que también dedicó sus fuerzas y empeño a diversos proyectos sociales, sobre todo en Sudamérica, la India y Nigeria, motivo por el cual cosechó en muchos lugares una gran simpatía y un aprecio especial. Junto con la multitud de cuestiones prácticas y económicas que ocupaban su tiempo, desde luego desplegó también toda la riqueza de sus dotes como sacerdote y director espiritual

Fue así que estuvo siempre a disposición, a lo largo de todos estos años, como apoyo espiritual de muchas personas. A partir de 2004 se hizo cargo de la dirección espiritual de la nueva comunidad femenina surgida en Schoenstatt "María en camino", tarea que asumió con la convicción de que detrás de esto se esconde una iniciativa divina.

Cuando en 2004 concluyó su tarea como ecónomo general, el P. Bausenhart se trasladó a la casa de los Padres en Essen, de la que pronto fue designado rector. Desde allí emprendió su nueva tarea como asesor de la obra familiar del Movimiento de Schoenstatt en las diócesis del norte de Alemania. También en este campo de apostolado tenía multitud de ideas y grandes proyectos.

Durante toda su vida el P. Bausenhart se sintió muy vinculado con nuestro Padre y Fundador, el Padre Kentenich, a pesar de que sólo por única vez tuvo un breve encuentro con él, siendo joven, en Liebfrauenhöhe. De allí que el estudio y en parte también la redacción de textos del Fundador fue una inquietud predilecta que lo acompañó siempre. Su amor al Padre Kentenich se expresó también en su compromiso con la "Casa de la Alianza" (-el "Bundesheim"-) en Schoenstatt, donde el Padre Kentenich vivió y trabajó durante muchos años. En los últimos años el P. Bausenhart acostumbraba alojarse en esa casa cuando estaba en Schoenstatt. También fue signo de su vinculación con el Fundador el compromiso asumido durante largos años con la casa natal del Padre Kentenich en Gymnich. A lo largo de los dos últimos años inició una gran cantidad de actividades en la misma ciudad de Gymnich, por lo que el Padre Kentenich se ha hecho ampliamente conocido y popular a nivel masivo. Incluso este año el Padre Carlos colaboró activamente en la celebración del aniversario de nacimiento del Padre Kentenich el domingo 19 de noviembre en Gymnich, desde donde al día siguiente debió ser trasladado al hospital a raíz de una infección – donde pocos días después recibió el llamado de Dios para ir al cielo.

Una colaboradora cercana del P. Bausenhart exclamó espontáneamente al recibir la noticia de su muerte repentina: "Tenía aún tantos planes". Sí, nuestro co-hermano fue arrancado en forma totalmente inesperada de una vida muy activa. Pero más allá de eso, el reflejo de su vida terrena llegada a fin inesperadamente es prueba de la inmensa bendición que hemos recibido todos a través del P. Bausenhart.

Con su espíritu amplio, en el que tenían lugar simultáneamente muchos universos, con su alma tan profunda y su gran amor, que abrazaba a muchos hombres y culturas, asumió gran cantidad de iniciativas y movilizó mucho dentro y fuera de su comunidad.

Podemos estar agradecidos por esta bendición que significó él para Schoenstatt, por todo lo que ha hecho por nuestra comunidad de Sión y por tanta gente en muchos lugares del mundo. Nuestra gratitud va dirigida a él, que ahora, desde la eternidad, sigue vinculado a nosotros de una manera distinta. Y va dirigida también sobre todo a la Santísima Trinidad, por regalarnos a este hermano. El P. Carlos Bausenhart nos dirige un saludo a todos en su testamento donde escribe: "Impulsado por el inmensamente grande amor misericordioso del Padre Dios, y en Alianza con la querida Mater, nuestra Reina de Sión, les envío a todos ustedes mi último saludo y bendición sacerdotal en esta tierra. Recen por mí, para que yo pueda rezar plenamente por ustedes".

Permanecemos unidos en la fe y en la Alianza de Amor común con la Mater, esperando reencontrarnos de nuevo un día en la eternidad donde juntos podamos colaborar en la amplia realización de la visión que nuestro Padre y Fundador tuvo para con el Monte Sión.

Monte Sión, Schoenstatt, 2 de diciembre de 2006.

Por la comunidad de los Padres de Schoenstatt

P. Franz Johannes Brügger

Superior provincial

En lugar de coronas y ofrendas florales, pueden colaborar con la formación sacerdotal de los Padres de Schoenstatt: DKM, Cuenta Nº 39 50 300, BLZ 400 602 65.

Traducción: aat, mca, Argentina