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25 años de la Rama de Madres en Burundi 25 years of the Mothers’ League in 25 Jahre Schönstatt-Mütter in Foto: Seitzer © 2006 |
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BURUNDI, Hna. M . Lisette Seitzer. Con gran alegría la rama de madres, y con ella toda la Familia de Schoenstatt, celebró el 25 aniversario de su presencia en Burundi. Las jefas regionales y diocesanas de Burundi y las madres de Schoenstatt de Bujumbura ya llegaron el viernes, y el sábado tuvieron un día de formación y reflexión. El sábado a la mañana viajaron hacia allí más de 200 madres de Schoenstatt de todo Burundi. A la noche se celebró una solemne Sta. Misa en el nuevo centro de formación "Reina de la fe".
Muchas madres tenían la nueva pañoleta de Schoenstatt. Cuatro madres sellaron la Alianza de Amor como colaboradoras y 14 madres hicieron la consagración como miembros de la Liga luego de una larga e intensiva preparación. Reinaba una verdadera y profunda atmósfera de consagración en la gran sala, que estaba completamente llena. El coro de jóvenes de Schoenstatt "Santa María" cantó con entusiasmo. La canción del jubileo de las madres permitió que todos escucharan el anuncio del ideal de la rama de madres de Burundi: ellas quieren ser Custodias vivas, que, como María, llevan a Cristo al mundo.
A partir de un pequeño comienzo, ya hay 216 grupos de madres en Burundi
El domingo se celebró el aniversario con todos los feligreses en la Iglesia de Peregrinos del Monte Sión. En el Kyrie, tres madres pidieron perdón por todo lo que en el pasado no estuvo bien. También ellas formularon las peticiones y en la ofrenda llevaron un canasto con sus ofrendas espirituales. Luego 25 madres ofrecieron 25 rosas como signo de agradecimiento por todas las gracias recibidas en estos 25 años, y 25 velas como expresión de su compromiso de distribuir en adelante la luz que ellas recibieron. Después de la Sta. Misa hubo una procesión con el Santísimo Sacramento en la custodia. Las mujeres se trasladaron al Santuario junto con la gente. Allí hubo una breve adoración que finalizó con la bendición eucarística. Una madre dijo: "Me conmovió profundamente que en nuestra celebración se haya hecho esta procesión con la Custodia, porque expresa lo que queremos ser: Custodias vivas"
En la comida final se destacaron las conferencias que habían escuchado y la importancia de este día . Fueron especialmente honradas las diez madres que formaron el primer grupo de la rama. El comienzo fue pequeño y sencillo, pero de esa semilla creció un gran árbol y hoy son más de 216 los grupos de madres de Schoenstatt en Burundi.
Traducción: Marta Correa, Tres Arroyos, Argentina/aat