Un comienzo al final del año litúrgico

Gymnich celebró el aniversario del nacimiento del Padre José Kentenich

La procesión sale de su casa natal The procession setting out from the house where he was born Die Prozession beginnt am Geburtshaus
Rumbo a la iglesia On the way to the church Auf dem Weg zur Pfarrkirche
Predica: P. Franz Brügger, Schönstatt Sermon: Fr. Franz Brügger, Schoenstatt Predigt: P. Franz Brügger, Schönstatt
Participaron unos 50 miembros de la familia de Schoenstatt de Colonia Some 50 members of the Schoenstatt family of Cologne were present Etwa 50 Schönstätter aus dem Bistum Köln waren gekommen
Almuerzo en el centro parroquial Noon meal in the parish hall Mittagessen im Pfarrzentrum Fotos: POS Fischer © 2006 Album de fotos – photo album – Fotoalbum

ALEMANIA, mkf. Estadísticamente son muy grandes las probabilidades de que el clima de hace 121 años, en el día del bautismo de José Kentenich en Gymnich, fuera el mismo que el de este domingo 19 de noviembre de 2006. Un cielo oscurecido por densas nubes, lluvia, ¡simplemente noviembre en Alemania! Final del año litúrgico, hojas de otoño que caen, día de los difuntos... y en medio de todo esto un nuevo comienzo: el en un niño nacido el 18 de noviembre de 1885 y bautizado al día siguiente – en aquel entonces fiesta de Santa Isabel de Hungría – con el nombre de Pedro José en la pila bautismal del siglo XVI de la parroquia de San Cuniberto.

Por iniciativa del párroco de San Cuniberto y de la Asociación de fomento de la casa natal del Padre Kentenich fundada por los habitantes de Gymnich, el año pasado por primera vez se celebró solemnemente el aniversario del nacimiento del Padre Kentenich en su propio pueblo. Cada cinco años quieren celebrar el aniversario a lo grande, pero tambien en los años intermedios quieren recordar el gran hijo de esta pequeña ciudad que está ante las puertas de Colonia, y lo hacen siempre el domingo siguiente al 18 de noviembre. A pesar de la lluvia torrencial, típica para esa epoca del año, se encontraron en la casa natal del Padre Kentenich representantes de la parroquia y de la Asociación de Fomento, miembros del Movimiento de Schoenstatt de la diócesis de Colonia – entre ellos también las Hermanas de María de Colonia, Bliesheim y María Rast, y los Padres de Schoenstatt de Essen – y la Hna. M. Adele, responsable del Secretariado Padre Kentenich. No faltó la banda de vientos, y así, cerca de las 10 hs. todos marcharon, bajo los paraguas, hacia la plaza de San Cuniberto. La pequeña procesión siguió el camino a la parroquia por el que presumiblemente fue llevado el pequeño José Kentenich el 19 de noviembre de 1885. Llegados a la parroquia, los sacerdotes rodearon la pila bautismal e invitaron a rezar por la beatificación del Padre Kentenich.

Es bueno conocer el lugar de pertenencia

El gran cuadro de la MTA que estaba en el altar mayor fue colocado únicamente para esta celebración. Siempre hay en la parroquia Novenas del Padre Kentenich, tarjetas y la revista "Schoenstatt Aktuell" para que las lleven los feligreses. La solemne Sta. Misa, concelebrada por muchos sacerdotes, fue acompañada por un conjunto musical y presidida por el P. Franz Brügger, superior provincial de los Padres de Schoenstatt. En la homilía se refirió al final del año litúrgico que estaba presente en los textos y vinculó las ideas del fin con el comienzo marcado por el nacimiento del Padre José Kentenich. "El fin y el principio están marcados por nuestras preguntas por el por qué, el para qué; el principio y el fin estan cobijados por el Amor del Padre", dijo el P. Brügger

Citó a Ernst Bloch: "Al fin, el hombre espera conocer su lugar de pertenencia". Es la pregunta por el hogar, por la patria, dijo el P. Brügger, pero no solamente al final de la vida. El niño quiere saber a donde pertenece cuando ha nacido, los matrimonios lo quieren saber y los ancianos y enfermos preguntan: ¿quién se ocupará de mí?. Esta es, para millones de personas, la cuestión que los moviliza más profundamente. Jesús testimonió durante su vida terrena: vengo del Padre, y reveló por sí mismo el poder y el amor de Dios por los hombres como un misterio del amor divino. Vino para abrirnos las puertas del cielo y asegurarnos una patria, un hogar.

El P. Franz Brügger mostró el misterio del bautismo, el misterio de la Eucaristía y la Alianza de Amor con María. Como en la vida del Padre Kentenich, son para todos nosotros, los cristianos, la permanente certeza de tener una patria, un hogar en el Padre del Cielo, al que le pertenecemos. "Y entonces sabemos finalmente cual es nuestro lugar de pertenencia: no es la tierra, no es el cementerio. Le pertenecemos al Padre, allí está nuestra patria, nuestro hogar".

Después de la Sta. Misa todos fueron invitados a almorzar en la casa parroquial, pues la lluvia impidió realizar el proyecto inicial de almorzar al aire libre. Hubo un intenso intercambio entre los 50 invitados, provenientes del Movimiento de Schoenstatt, de la Asociación de Fomento y de la comunidad parroquial. Interesaron especialmente las novedades en torno a la casa natal del Padre Kentenich: algunos estudiantes de arquitectura hacen su tesina sobre el tema "Construcción de un ámbito para reuniones". Ya estuvieron en Schoenstatt para "incorporar" el espíritu que debe tener la obra. Al comienzo del próximo año deben presentar las maquetas en Gymnich y posteriormente también en Schoenstatt.

El día terminó con testimonios sobre el obrar del Padre Kentenich en la diócesis de Colonia y el solemne rezo de vísperas.

Traducción: aat, Argentina