Las llaves encerradas

Despedida del Padre Cruz Viale de Ciudad del Este

Misa de despedida del Padre Cruz Viale en Ciudad del Este Farewell Mass of Father Cruz Viale in Ciudad del Este Abschiedsmesse von Pater Cruz Viale in Ciudad del Este
Cena con el 12° curso de la Federación de Familias Dinner with the 12th course of the Federation of Families Abendessen mit dem 12. Kurs des Familienbundes
Un regalo original... A special gift... Ein originelles Geschenk… Fotos: Cabral © 2006

PARAGUAY, Javier Cabral. El Padre Cruz Viale celebró una Santa Misa en el Santuario del Terruño, a la cual fue invitada toda la Familia de Ciudad del Este.

Rápidamente han pasado tres años de su permanencia en el Paraguay, en los cuales la página Schoenstatt.de acompañó parte de su tarea pastoral, como por ejemplo;

• Se presentaron 26 novicios en el Santuario Joven
• Sin darnos cuenta
• A la Mater hay que decirle Sí nomás
• Fuego en el Corazón
• Se despertaron bajo la mirada de José Engling
• El Jardín del Padre
• Un gran secreto...
• Ustedes son la luz del mundo
• CADA FEDERADO UN APÓSTOL
• No es tan común ver a un sacerdote subido a una escalera apoyada en un árbol
• Corazón de Fuego, Roca de la Patria
• Un nuevo curso de la Federación de Familias en Alto Paraná
• Jornada de arranque 2006 de la Federación de Familias
• Padre, tu herencia nuestra misión

La anécdota más festejada

Luego de la Santa Misa, el Curso 12, Pilares del Santuario cenó con él en el terruño.

A la hora de los homenajes, se le entregó un regalo del curso: una afeitadora eléctrica. Pasada la sorpresa inicial señaló: "Bueno, ya sé lo que me dice el curso, ahora voy a reflexionar a ver qué me dice Dios".

Luego recordaron diversas anécdotas de los años que compartieron. La anécdota más festejada fue cuando el Padre Cruz se alojó en casa de uno de los integrantes del curso 12. El Padre salió con su portafolios y luego al volver no encontró su llave para ingresar a la pieza que tenía de esas cerraduras que se cierran desde afuera. El Padre pensó que había dejado la llave dentro de la pieza. Los dueños de casa rompieron una ventana y lograron entrar. Buscaron la llave dentro y no la encontraron. Al rato el Padre al revisar el portafolios encontró su llave.

PD del autor: No es bueno reírse de los sacerdotes.

Por supuesto nos reímos todos hasta cansarnos de la anécdota de la llave encerrada. Luego de la cena todos nos despedimos y con mi esposa quedamos por último juntando algunas copas y platos. En eso mi esposa me dice: "¡Huy, dejé mi cartera en la cantina y ya se fueron todos los que tienen la llave"! Yo, muy comprensivo, le dije: "No importa, buscamos mañana tu cartera…Ahora vamos a casa que ya es más de medianoche". Mi esposa me respondió: "Es que la llave del auto está dentro de mi cartera". Lo demás no les cuento. Pero eso sí, una recomendación. No es bueno reírse de los sacerdotes.

PD de la Oficina de Prensa de Schoenstatt

Es bueno saber que las llaves encerradas (o que se presumen encerradas) junto con todos las experiencias de desesperanza creadora, son otro momento de unidad de la familia, como obviamente les sucede a Padres, Federados, paraguayos, alemanes... ¡y Hermanas a cargo de la Oficina de Prensa!