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La ciudad de San Miguel de Tucumán, un jardín ...
The city of San Miguel de Tucumán, a garden…
Die Stadt San Miguel de Tucumán, ein Garten...
Foto: StockXchnge © 2006
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... desde el Santuario de Schoenstatt, hogar espiritual
del consejal valiente
... from the Schoenstatt Shrine, spiritual home of the
courageous councilman
… vom Schönstatt-Heiligtum aus, geistige Heimat und
Kraftquelle des mutigen Stadtrates
Foto: Cabral © 2006
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ARGENTINA, mkf. En los últimos tiempos, la ciudad de San Miguel
de Tucumán ha perdido el brillo que alguna vez tuvo como un verdadero
"Jardín de la República Argentina". Estamos lejos de aquella
Capital pujante, símbolo del Noroeste y con espíritu de
progreso. Eso hace que debamos trabajar arduamente para que nuestra Ciudad
vuelva a ser el Jardín de nuestra Patria, y los vecinos puedan
vivir dignamente en el barrio que eligieron para desarrollar sus proyectos
de vida, y el de sus hijos. Palabras reflejadas en la página web
de Eduardo de Zavalía, concejal de la ciudad de San Miguel de Tucumán,
Argentina, y miembro de la Familia de Schoenstatt.
Eduardo de Zavalía tiene 43 años y es ingeniero electrónico.
Está casado con Liliana Stordeur y tiene cinco hijas. Actualmente
es concejal de la ciudad de Tucumán, y profesor de Informática
en Marketing en la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino
(UNSTA). Y además también es miembro de la Obra Familiar
de Schoenstatt. ¿Cómo se hace para salir limpio de donde todos
salen sucios?, ¿cómo convivir con la corrupción sin morir
en el intento?, le preguntó a un Padre de Schoenstatt antes de
asumir su función como consejal. "Estaba claro", dice él,
"que mi misión era sembrar el ejemplo del cambio, que se pueden
hacer las cosas en forma correcta y lograr el éxito. Que si al
comenzar la gestión existía, supongamos, el 100% de corrupción
y al terminar la gestión había disminuido al 90% ya era
un éxito. Porque el próximo cristiano que tome la posta
empieza desde el 90%. Sabíamos que éste era un camino largo,
pero debíamos dejar semillas en la sociedad, para que otros las
sigan, se sumen".
En medio de una guerra de insultos y trompadas…
Aunque parezca un contrasentido, es posible. El martes, 5 de septiembre,
Eduardo de Zavalía escribió a sus amigos del Movimiento:
" Les quería comentar que ayer en la sesión del Concejo
Deliberante hice una fuerte defensa de la vida desde la concepción
y en contra del aborto, la cual fue recepcionada positivamente por los
demás concejales, que determinó que se apruebe y emita una
Declaración a favor de la vida desde su concepción y en
repudio a todas las prácticas abortivas. Además se hizo
un minuto de silencio por las dos victimas abortadas la semana pasada".
Como en muchos países de Sudamérica, también en
la Argentina el tema de la legalización del aborto surge siempre
de nuevo. La semana anterior se efectuaron dos abortos "legales" al cabo
de una extensa batalla judicial... Lo que en muchos países europeos
ya es "triste rutina" que a veces ya no conmueve más, aquí
se lo vive todavía como un drama... el drama de matar a un ser
humano inocente y totalmente desvalido y dependiente.
En un diario electrónico, el periodismo de verdad comentó
su actuación a través de un articulo destacado:
El Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán sesionó
en medio de una batahola de protestas en las que debió intervenir
la policía disparando con armas de goma mientras empleados municipales
pugnaban por entrar al recinto. A pesar de la pesadilla y del clima de
violencia, el Concejo con su mayoría oficialista aprobó
varios controvertidos proyectos como por ejemplo que la policía
estará facultada para librar actas por infracciones Además
se dispuso que los vendedores ambulantes del microcentro se trasladen
a dos locales céntricos. Se sancionó la compra total del
paquete accionario del grupo Macro para construir el shopping del abasto.
Se aprobó la ampliación de la red de gas y se habilitó
al Intendente a disponer de 17 millones más para saldar deudas.
Pero en medio de esta guerra de insultos y trompadas desparramadas, hubo
algo que merece destacarse y es la actitud del Concejal Eduardo de Zavalía
quién pidió por la vida. Una muestra de que en nuestra sociedad
no todo está perdido y de que bien vale la pena hacerse escuchar.
Eduardo de Zavalía, Concejal de Recrear, habló primero
en el período de homenajes para solicitar un minuto de silencio
por las dos vidas truncadas por un aborto. De Zavalía solicitó
un minuto de silencio por esos dos bebes abortados, lo que le fue concedido.
Hoy, dijo el Concejal, es San Ramón Nonato, protector de los nonatos
y patrono de las embarazadas. Es menester recordar que San Ramón
nonato, llamado así porque nació de su madre fallecida,
junto a Pedro Nolasco fueron los creadores e impulsores de la orden de
lo mercedarios en España y luego vinieron al país trayendo
la devoción por la Virgen de La Merced, nuestra Patrona. En honor
a San Ramón Nonato quiero pedir un minuto de silencio por las dos
vidas que se perdieron en los públicos abortos cometidos la semana
pasada y por todos los abortos que no se conocen.
Más tarde, en consideraciones generales dijo: Esta es una sesión
con muchísimos temas importantes, como el de los varitas (Los "varitas"
son los empleados del municipio que hacen el trabajo de inspectores de
tránsito, o sea policías municipales. Ordenan el tráfico
de vehículos donde no hay semáforos y deberían aplicar
multas en caso de infracciones), el de los 30 millones de préstamos,
el del gas, el de los vendedores ambulantes, etc. Pero hoy para mí
esta es una sesión de vida o muerte.
La oportunidad de defender la vida
Hoy vamos a tener la oportunidad, los 18 concejales, de defender la vida.
Por una vez, que Tucumán sea conocida por estar a favor de la vida
y no como lamentablemente nos conocen por la muerte, ya sea de niños
desnutridos o por desapariciones. Hoy, reitero, tendremos la oportunidad
de mandar un mensaje a favor de la vida.
Por todos es conocido que nuestra Constitución Nacional en su
articulo 75 inciso 23 prohíbe el aborto, priorizando la vida por
nacer. Que el proyecto social constitucional ordena a los poderes legislativos
dictar un régimen de seguridad social especial e integral en protección
del niño desde su concepción.
Que nuestra nueva constitución provincial expresa taxativamente
defender la vida desde su concepción en el seno materno. Hace pocos
días nos partía el corazón ver imágenes de
niños muertos y mutilados por los bombardeos en Beirut, no hubo
nadie que no sintiera dolor por aquellas criaturas inocentes víctimas
de una brutal guerra. La semana pasada, bajo el criterio de haber sido
consecuencia de una violación, por ser las madres discapacitadas,
por ser una injusticia, por la razón que quiera, han matado y -
les aseguro- han mutilado a criaturas inocentes.
Ofrezco humildemente todo mi apoyo, tanto material como personal, para
evitar un aborto y para que el niño por nacer tenga un hogar
Yo me pregunto: ¿por qué se tienen que matar a una inocente e
indefensa criatura por una injusticia que comete otro? ¿No sería
mas justo castigar al agresor? Si en la Argentina no existe la pena de
muerte para el violador, ¿por qué debemos permitir que se la apliquen
a un inocente e indefenso...?
En San Miguel de Tucumán debemos defender la vida, y mucho más
la del no nacido, en honor a nuestra patrona la Virgen de la Merced, de
los mercedarios, de San Ramón nonato, por lo tanto defender la
vida debería ser una política de estado, los 365 días
del año tendríamos que tener campañas de educación
y concientización para evitar llegar al extremo de que una madre,
por difícil que sea su situación, quiera abortar a su hijo,
sumado al hecho de que abortando nunca se resuelve su verdadero problema,
la muerte de un hijo jamás mejora la vida de su madre.
Así como se hacen campañas para donar los órganos,
con mayor motivo, si una madre - por las razones que fuere - no quiere
su hijo, debemos ayudarla a que lo entregue en adopción a miles
de matrimonios que están deseosos de tener un hijo y les es imposible.
Y si algo ayuda, ofrezco humildemente todo mi apoyo, tanto material como
personal, para evitar un aborto y para que el niño por nacer tenga
un hogar. Si con todo esto todavía queda alguien que quiera abortar,
pues desde hoy podremos decir: que no sea en este municipio, porque en
San Miguel de Tucumán defendemos la vida.
Esto va mas allá de un aspecto confesional, que como cristiano
por supuesto lo defiendo, esto es un derecho natural a la vida y como
es potestad del municipio regular las actividades que se pueden desarrollar
en su territorio, he reservado un proyecto de ordenanza que prohíba
realizar prácticas abortivas en San Miguel de Tucumán, y
espero, de todo corazón, contar con vuestro apoyo unánime,
concluyó el Concejal de Zavalía dejando perplejos a todos
porque no se esperaban que alguien saliera con esto. Evidentemente, hay
quienes caminan con la frente en alto y por lo tanto no tienen que temer,
concluyó de Zavalía
Forjar la Patria nueva
¿Cómo se le ocurrió a Eduardo entrar en la política?
Fue un retiro de la Obra Familiar que le dio el impulso. "En abril de
2003 concurrimos con mi esposa a un retiro espiritual para matrimonios
que anualmente realiza el Movimiento de Schoenstatt en Tucumán",
cuenta. "El tema sobre el que giró dicho retiro era "forjemos la
patria nueva". Se trabajó sobre la comparación de la patria
vieja de la injusticia, de la corrupción, de los desnutridos, y
la patria nueva, a la que todos los cristianos aspiramos, con justicia,
igualdad, honestidad, trabajo y fundamentalmente aquella del compromiso
que debemos asumir para llevar adelante ese cambio".
A los pocos días del retiro espiritual, y a un mes de las elecciones
en su provincia, le ofrecieron participar de un sublema. En Tucumán,
en esa época, regía la ley de lemas, es decir, que para
participar los partidos políticos constituían un lema y
las distintas corrientes internas constituían sublemas; entonces,
la gente común, al votar, simultáneamente votaba la interna
partidaria y la elección global.
El tema de la propuesta fue llevado a la mesa familiar, donde fue debatido
y, dada la muy mala imagen de los políticos y de la política
en general, decidieron no participar. Faltando unos quince días
para el cierre de listas, un amigo le ofreció integrar otro sublema,
por otro partido con mejor imagen que el primero; una vez más se
trató el tema en la mesa familiar, donde se volvió a debatir
y nuevamente la decisión fue no participar de la contienda. El
fin de semana previo al cierre de listas (era un lunes, a las 20), por
tercera vez le ofrecieron participar con un sublema, diferente a los dos
anteriores, constituido totalmente por gente que nunca antes estuvo en
la política. Ante eso, su señora comentó: "¿cuántos
llamados más necesitamos para darnos cuenta?"
"Era un desafío", dice Eduardo. "David contra Goliat, pero nos
confiamos con fe, casi como algo divertido, sin hacernos mala sangre.
Su apoyo, afirma él, está en su familia, en Schoenstatt,
en su experiencia de vida, en su cátedra universitaria. "Ambos
somos profesores de Informática Aplicada al Marketing en la carrera
de Comercialización en la Universidad Católica de Tucumán,
conocimientos que se aplicaron fuertemente en la campaña y en la
segmentación del electorado para llegar a cada uno con un mensaje
apropiado", comenta.
Un señalador de camino
"Hay que marcarles el camino a miles de cristianos comprometidos para
que ocupemos la mayoría de las sillas, así las decisiones
tendrán otro rumbo", comparte. Vale la pena dar a conocer también
que en el Movimiento de Schoenstatt hay varias personas comprometidas
con la política – como por ejemplo alcaldes, y diputados. Muchos
de ellos están en Paraguay. Seria lindo tener contactos, dice Eduardo,
para compartir experiencias. "Somos muy poco apegado a enviar mensajes
mostrando nuestra coincidencia y hacerle sentir a quien nos defiende que
no está solo; por ello es muy importante cultivar esta práctica
entre los cristianos", afirma.
"Como sociedad debemos dejar de transmitirles a nuestros hijos que la
política no sirve y que todos los políticos son corruptos,
porque lo único que logramos es que se alejen de la participación
ciudadana y que vean mal a los que intentan, con buenas intenciones, participar
en la vida pública. Así siempre estaremos sufriendo las
consecuencias de la mala política. Les debemos enseñar a
diferenciar los buenos de los malos políticos e inculcar la participación
activa en los asuntos del bien común, aunque no sea un partido
político, en organizaciones en defensa de los animales, del medio
ambiente, pro vida, movimientos católicos de las parroquias; ser
en todo verdaderos laicos comprometidos. Es importante tener en cuenta
que existen cristianos en todos los partidos; lo que es necesario es asumir
el compromiso, ocupar las bancas y, sobre todo, una vez allí, aguantar
los ataques del "sistema", que busca que nada cambie, y empezar a producir
los cambios desde los valores, las virtudes y la verdad". Resuena en el
ambiente lo que la familia de Schoenstatt tucumana dio como mensaje al
pueblo el día de la bendición de su Santuario: "Que Tucumán
sea un floreciente Jardín de María en la República,
donde broten y florezcan pequeños reflejos de Cristo y María.
Y que, conformados en Cristo, sean sus portadores al mundo, para construir
así el Reino del Padre aquí en la tierra".
Intervención
de Eduardo de Zavalía
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