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 published: 2006-08-22

Vivir el cielo en la tierra es posible

Un hito en la historia del Schoenstatt paraguayo y quizás más allá…

 

Gran fiesta en el año santo schoenstattiano en Paraguay: Coronación de la “Reina de la Nación de Dios”, colocación de la piedra fundamental de la Iglesia Santa María de la Trinidad

Great feast in the Holy Paraguayan Schoenstatt Year: Crowning of the “Queen of the Nation of God”, blessing of the corner stone for the Pilgrims’ Church

Großes Fest im Heiligen Schönstattjahr Paraguay: Krönung der “Königin der Nation Gottes”, Grundsteinlegung der Pilgerkirche

 

Unos 4000 schoenstattianos asistieron en la re-fundación de Schoenstatt en Paraguay

Some 4,000 schoenstatt members participated in the act of re-founding Schoenstatt in Paraguay

Über 4000 Schönstätter kamen zum Akt der Neugründung Schönstatts in Paraguay

 

Todo el jubilo y alegría: globos en los colores nacionales

Joy and commitment: Balloons in the national colors

Freude und Jubel pur: Luftballons in den Landesfarben

 

La Reina recibió su corona

The Queen has received her crown

Die Königin mit ihrer neuen Krone

 

Colocación de la piedra fundamenta

Corner stone blessing

Grundsteinlegung

 

Todos entregaron su Acta de (Re-)Fundación

All placed their (Re-)Founding Document

Alle brachten ihre (Neu-)Gründungsurkunden

 

La nueva corona

The new crown

Die neue Krone

Fotos: Pardo © 2006

Albúm de fotos – photo album – Fotoalbum

 

 

 

PARAGUAY, P. Antonio Cosp/mkf. "9.00 horas. La procesión se iniciaba en Tupãrenda. 700 flores en cartulina marcaban el camino. La Reina esperaba frente al santuario, lista para recibir su corona. La piedra fundamental, la que sostiene y representa el edificio, estaba en su lugar de honor para ser bendecida y cobijar las miles de actas de fundación que los miembros de la Familia traían. Éramos casi 4000 los que veníamos dispuestos a la gran fiesta... pero toda expectativa fue superada. El cielo azul, el sol radiante, el clima fresco, el deseo de fundar de nuevo Schoenstatt. Para ello coronamos a la Mater nuevamente y nos incorporamos como piedras vivas en la piedra fundamental, bajo el altar de la iglesia María de la Trinidad. Realmente vivimos un anticipo del 18 de octubre, de los 25 años del santuario nacional. La fiesta siguió después. Se repitió una parte del festival de días atrás y se compartió en mesas primorosamente preparadas el almuerzo. ¡Gracias Señor por tu bondad!"

Pocas horas después de la gran fiesta de la Madre de Tupãrenda, el Padre Antonio Cosp, Director Nacional del Movimiento de Schoenstatt en Paraguay, envió este resumen de lo vivido. "Les aseguro, hace muy mucho que no sucedía una fiesta así. Quizás nunca. La mitad elite, la otra mitad misioneros y peregrinos. Pero todos se saludaban, la mayoría se conocía. Una gran familia. No se pueden imaginar la alegría íntima y profunda de todos... ¡Un hito!", sigue contando el Padre Antonio. Si, un hito. Para Paraguay y quizás más allá. ¿Quizás? "Lo de Tupãrenda, ¿no tendrá aplicación para todos y para cada uno de nosotros? Creo que es un mensaje muy actual para Córdoba y otras comunidades seguramente también...", comenta Juan Barbosa al reenviar el articulo sobre la re-fundación de Schoenstatt en Paraguay a sus amigos en la Argentina.

Todos queremos ser parte de este gran jubileo

Todo fue anticipación. "¡Mañana es el gran día de nuestra Madre y Reina tres veces Admirable en Tuparenda!", cuenta Clara Benítez de Pardo. "En el Santuario Joven hay carteles de aviso. En todo el país todos los schoenstattianos estamos preparados con el corazón y con nuestras actas de refundadores. Por ejemplo, los misioneros y misioneras de la Campaña del Rosario de Itacurubi del Rosario se preparan para la gran peregrinación y coronación. Todos queremos ser parte de este gran jubileo. No podemos quedarnos afuera".

Como ellos, miles de personas llegaron con sus actas de fundación y de re-fundación, para ser colocadas bajo la piedra fundamental de la Iglesia, símbolo de su compromiso con Schoenstatt y con Paraguay para los próximos 25 años; llegaron para ofrecerle de nuevo a la Madre de Tupãrenda la corona que le fuera robada hace algunos años. Nada mejor, nada más adecuado que trasmitir lo vivido ese día a través de testimonios vibrantes de vida:

El torbellino de amor que nos despierta ver tanta devoción en tanta gente y descubrir esa misma devoción en nuestros propios corazones

"Con mucha alegría, después de una mañana y media siesta cargada de demasiada emoción, nos reunimos para poder saborear mejor los momentos de "unción" que nos fueron regalados por nuestra Madre María en todo este día", escribe Clara de Pardo, pocas horas después de volver de la fiesta. "Tal vez no quepan las palabras exactas para describir los regalos que tuvimos en todos estos 25 años, el torbellino de amor que nos despierta ver tanta devoción en tanta gente y descubrir esa misma devoción en nuestros propios corazones.

Tampoco es fácil describir lo que podemos regalarle, nos mueve un compromiso que nos lleva a decirle a la Mater en un lenguaje más sencillo: "simplemente Madre mía te regalo toda mi vida y todo lo que soy". Es reconocer que si en este corto camino nuestro en Schoenstatt (5 años) me pide muchas cosas… Ella, la Mater y Jesús nos regalan muchísimas cosas más.

No pudimos dejar de reunirnos antes que termine el día para recolectar también todas las fotos de 3 cámaras fotográficas diferentes. Me despido con la felicidad de haber vivido un día de alianza plena...".

Día de coronación, de piedras vivas, de gran entrega

Fue imposible no compartir directamente lo vivido. Mirta Patino y su esposo Julio de inmediato escribieron su testimonio:

"Hoy, 20 de agosto, fue un día de fiesta en Tupãrenda. Somos verdaderamente bendecidos porque la Mater nos quiso tener presentes en este día tan pero tan emotivo. Le volvimos a coronar a la Mater después de mucho tiempo; en que el Padre Antonio nos preguntó: ¿no será que la Mater realmente quiso que le robaran la corona para venir hoy en masa, todos juntos coronándola de nuevo y comprometiéndonos para siempre con su Obra? Hubo alrededor de 4.000 personas, mezcladas sin distinción de estratos sociales, no importó si eran de la familia organizada, si eran peregrinos, si eran misioneros de la Campaña del Rosario, etc., lo único que importaba en esos momentos de gracia es que éramos todos hijos de Maria, hijos de Schoenstatt, hijos de una Gran Obra.

¡Y cómo no mencionar la colocación de la Piedra Fundamental de nuestra Iglesia Santa María de la Trinidad, qué hermoso momento!!! ¡Qué fuerza maravillosa se sintió! ¡Qué bendición! Cada hijo de la Mater pudo depositar todo lo que tenía en su corazón, en sus sentimientos, llenando sus Actas de Refundación, comprometiéndose con la Gran Educadora, dando su ‘SÍ’. Ese ‘sí’ que nos lleva a demostrarle todos los días cuánto le amamos. Este "si" que nos tiene que llevar a construir día con día la Nación de Dios en el Corazón de América.

Hoy el Señor nuevamente salio a sembrar, y se encontró con "piedras vivas" en Tupãrenda, con "piedras" que serán la respuesta para la Nación de Dios que queremos todos los paraguayos".

Raquel Beltrán, al comienzo de un nuevo día de trabajo para la Fundación Dequeni el 21 de agosto, no pudo dejar de transmitir también su experiencia, resumiendo lo vivido por todos: "El domingo 20 de agosto en Tupãrenda la jornada fue maravillosa, cargada de emociones y de mucha renovación para los próximos 25 años…. En el cual todos estamos llamados a ser protagonistas".

Vivir el cielo en la tierra. Claro que es posible. En Tupãrenda.


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Last Update: 22.08.2006 Mail: Editor /Webmaster
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