Una Iglesia en movimiento

Conferencia del P. Heinrich Walter en Buenos Aires

Padre Heinrich Walter en Buenos Aires: conferencia sobre la importancia de los Movimientos Father Heinrich Walter in Buenos Aires: Talk on the role of the Movements Pater Heinrich Walter in Buenos Aires: Vortrag zur Bedeutung der Bewegungen
Presentación del conferencista Presentation of the speaker Vorstellung des Redners
Publico Audience Blick ins Publikum
P. Heinrich Walter con la Hermana Maria Teresa Father Heinrich Walter with Sister Maria Teresa Pater Heinrich Walter mit Schwester Maria Teresa
El P. Heinrich Walter con Santiago, el servidor del Santuario Fr. Heinrich Walter with Santiago, the Shrine server P. Heinrich Walter mit Santiago, „Diener“ des Heiligtums
Charlando Talking Im Gespräch Fotos: Crivelli © 2006

ARGENTINA, mca. En el salón Anasagasti del Jockey Club -uno de los más antiguos y tradicionales de Buenos Aires, Argentina- se dieron cita el martes 27 de junio a las 19 hs. unas 150 personas aproximadamente, entre Hermanas, jóvenes, matrimonios, mujeres y hombres. El motivo que los reunía era la conferencia a cargo del Padre Heinrich Walter, Superior General de los Padres de Schoenstatt, titulada "Los nuevos Movimientos, respuesta para nuestro tiempo".

Se cumplía un aniversario más del fallecimiento de Don Joao Pozzobon, iniciador de la Campaña del Rosario -el "rostro evangelizador" del Movimiento de Schoenstatt-, cuando el Padre Heinrich Walter, de Alemania, por primera vez dio una conferencia abierta en la Argentina – ¡a tres días del partido entre Alemania y la Argentina en el mundial! A esto hizo referencia Guillermo Moreno Hueyo, de Confidentia, en su presentación del Padre Walter. Habla fluidamente el castellano ya que ha visitado varias veces nuestro país (la última, en el mes de abril para el encuentro de los superiores de su comunidad), comentó, lo cual "muestra su cercanía a la Argentina, que es una buena noticia ya que ¡vamos a ganarle a Alemania el viernes!". Obviamente, carcajada general del público y del Padre Walter. Que se reiteró nuevamente cuando el Padre Heinrich, al comienzo de su charla, le retrucó diciendo: ¡"No estoy seguro de que Argentina va a ganar"!

La Iglesia vive y es joven

La exposición en sí comenzó con un video muy breve, a modo de motivación o introducción al tema. Apuntó concretamente al mensaje de que la Iglesia se ha valido de grandes santos ante los muchos desafíos a las que se ha visto confrontada a lo largo de los siglos, graficado a través de imágenes de algunos Movimientos y fundadores.

En su conferencia, el Padre Walter citó a Benedicto XVI en su primera prédica como Papa: "La Iglesia vive y es joven". Nunca en la historia la Iglesia ha estado tan presente en la conciencia del mundo como en estos días, comentó el Padre Walter. Entre los "eventos masivos" que protagonizó se encuentran la Jornada Mundial de la Juventud, la elección e investidura del nuevo Papa que los diversos canales de TV competían por televisar, el Encuentro Pentecostés 2006 con una asistencia de más de 400.000 fieles. Estas son las experiencias en Europa en los últimos años, experiencias que para la iglesia europea son tan novedosas como enriquecedoras.

Latinoamérica está fuertemente arraigada a la Virgen y a los santos, de modo que son frecuentes las visitas a los lugares de peregrinación. En África y Asia se está dando un fuerte crecimiento cada año. También en Europa se percibe un crecimiento en la afluencia de peregrinos. La Iglesia se ha puesto en movimiento, es una Iglesia en movimiento.

Después del Concilio, la Iglesia experimentó un tiempo de inseguridad. Tras la caída del muro de Berlín se produjo un cambio general: se ha iniciado una revitalización de la Iglesia.

Al mismo tiempo no crece el número de nuevos creyentes, se está disolviendo el vínculo entre cultura y fe. Por un lado, se da un gran interés por la religión pero por otro, muchos se apartan de la Iglesia como institución. La Jornada Mundial de la Juventud fue un éxito en cuanto a cantidad de jóvenes que movilizó, pero también se percibía la indiferencia en cuanto a llevar una vida cristiana. Es un desafío esta situación, que requiere de verdaderos testigos de una fe vivida.

Una respuesta de la Providencia

El hombre moderno es un buscador. Antiguamente había mucha certeza, y poca libertad. Hoy hay poca certeza y una enorme libertad. Es por eso que los Movimientos están llamados a ser "escuelas de libertad interior", y mostrar el modo de vivir con dicha libertad.

El Papa Juan Pablo II se convirtió en la gran figura del siglo. Ha vivido las respuestas a las preguntas de este tiempo. Su amor paternal, su entereza, su fuerza, su entrega -hasta el fin- son respuesta para el mundo.

¿Da la Iglesia suficiente respuesta a los desafíos de nuestro tiempo? Los Movimientos son la respuesta de la Providencia a las exigencias del tiempo. Nacen en momentos de desafío muy particulares. Por ejemplo, el Camino Neocatecumenal, cuando el Bautismo estaba casi olvidado, en momentos en que la familia y la escuela ya no son lugares de inserción en la fe. Comunión y Liberación es fundado por Don Giussani en tiempos del marxismo, como una revolución desde la Iglesia. Schoenstatt nace a partir del grito de los jóvenes clamando por ser libres y autónomos. El Padre Kentenich captó esto y los condujo genialmente a una Alianza de Amor con María.

Un despertar carismático

Juan Pablo II animaba a las nuevas comunidades, percibiendo que allí se encuentran las respuestas a muchas preguntas del hombre moderno. En su discurso el 2 de marzo de 1987 dijo él: «El gran florecimiento de estos movimientos y las manifestaciones de energía y de vitalidad eclesial que los caracterizan han de considerarse ciertamente como uno de los frutos más bellos de la amplia y profunda renovación espiritual, promovida por el último Concilio» (Insegnamenti, X/1). Hablaba también de una inagotable variedad de iniciativas de orden social y de santidad.

Benedicto XVI, en Pentecostés 2006, afirmó: "A través de los fundadores e iniciadores habéis vislumbrado de manera especial el rostro de Cristo y os habéis puesto en camino".

¿Qué lugar ocupan los Movimientos en la Iglesia? Son un despertar carismático regalado por Dios. Tienen y hacen la experiencia de la cercanía de Dios como en los primeros tiempos del cristianismo.

Hay 4 características distintivas de todo Movimiento:

1. Una forma particular de seguimiento de Cristo.
2. Paternidad/maternidad del fundador/a que lleva a los miembros a la madurez plena, y la santidad.
3. Lleva a los miembros a una misión particular.
4. Integración mutua propia y de la Iglesia.

El Padre Kentenich buscó pronto una inserción del Movimiento en la Iglesia. Es siempre una tensión llevar un nuevo carisma a la Iglesia sin generar un cisma, una reforma. Cada Movimiento es distinto, pero están unidos en la misma misión y en su ser iglesia. Se presentan como reflejos de la única Iglesia

Madurez eclesial de los Movimientos

"Hoy, ante ustedes, se abre una etapa nueva: aquella de la madurez eclesial. Esto no significa que todos los problemas hayan sido resueltos. Es, más que nada, un desafío, un camino por recorrer. La Iglesia espera de ustedes frutos "maduros" de comunión y de compromiso", dijo Juan Pablo II en Pentecostés 1998 a los Movimientos.

Ningún carisma dispensa de la sumisión a los pastores de la Iglesia. De allí que sea fundamental el reconocimiento oficial de la Iglesia. En ese sentido, el Padre Walter compartió que el 4 de junio pasado la Obra de Schoenstatt hizo entrega del Estatuto General del Movimiento al Prefecto del Pontificio Consejo de los Laicos, el cual, Dios mediante, recibirá su aprobación para fin de año (más).

Los Movimientos entraron en una nueva etapa. Los más antiguos se afianzaron en su estructura, otros no buscan afianzar esa dimensión. La cantidad de Movimientos que existen y el número incontable de obras que realizan dan muestra de su importancia para la Iglesia.

Son una escuela de vida para el hombre moderno, bajo cinco aspectos:

1. Escuela de la experiencia de Dios. Una escuela de vida espiritual para muchos.
2. Escuela de comunidad. Los testimonios de vida hablan al corazón de la alegría de compartir, de entregarse a los demás, y la alegría del servicio. Todo un aprendizaje.
3. Escuela de santidad. el mundo necesita este testimonio. De cada carisma surge una escuela de santidad específica.
4. Escuela de libertad. Benedicto habló mucho de libertad. El experimentar amor nos hacer ser libres interiormente, la libertad de los hijos de Dios.
5. Escuela de misión. La Iglesia necesita este nuevo espíritu misionero de los Movimientos.

En la mayoría de los Movimientos hay una cercanía a María. Nadie está más abierto al Espíritu Santo que ella. Ella es la Educadora y Maestra del hombre moderno. En la Campaña, María peregrina a casas de familia para educar.

 El Espíritu Santo nos ha regalado carismas diferentes y diversos. Estos serán fecundos en la medida en que se animen mutuamente, en una actitud de respeto, de trabajar con amor, sin competir – una experiencia de comunión que se ha vivido fuertemente en Alemania a través de la Alianza de Amor sellada por Movimientos católicos, luteranos, evangélicos y ortodoxos en Stuttgart 2005, durante el encuentro "Juntos por Europa".

Un aluvión de saludos

El clima fue muy distendido, gracias al buen humor y la simpatía del Padre Walter. La conferencia muy profunda, que incluso por momentos hasta se hizo difícil seguir ya que abarcó un montón de elementos, interesantísimos y súper novedosos. El Padre Walter estuvo acompañado por el Padre Juan Pablo; a la vez que estuvo presente también la Comunidad de las Hermanas de Maria a través de su superiora provincial, la Hna. Elisa, y la Asistente de la Dinámica, Hna. Maria Teresa, entre otras.

Al finalizar la exposición la gente hizo cola para saludar al Padre Walter y felicitarlo por su charla. Todos querían conversar con él, que recibía a cada uno con mucho afecto y dispuesto a escucharlo y responder a su pedido, ¡ya sea una foto con él o bendecir la remera de uno de los Servidores del Santuario Nacional!

Obra de la MTA

Santiago, de 28 años, se retiró feliz de la vida con su remera bendecida por el Padre Walter, que conservará de reliquia en el futuro, aunque la seguirá usando, más que nunca. Vive en Berazategui, a varios kilómetros de Florencio Varela, adonde se traslada siempre en bicicleta. Fue especialmente a la charla ese día para sacar fotos y hacer bendecir su remera, pulcramente lavada, como le contó al P. Walter. Preparó la cámara, los rollos de foto, etc., y al momento de sacar la primera foto se quedó sin pila… Un poco desolado, le pidió a la corresponsal de schoenstatt.de si podía sacarle una foto con el P. Walter, a raíz de lo cual se pusieron a conversar. Al despedirse, con toda naturalidad y sencillez, comentó él: Al final, fue providencial que me quedara sin pila ya que si no, no las hubiese conocido a ustedes. Fue obra de la MTA.

Cayó la noche, y el Padre Walter seguía saludando a la gente en el salón. Para todos, fue un lujo poderlo escuchar en la que fue su primera charla, abierta a todos. Junto con su claridad de pensamiento en un tema tan actual y trascendental para la Iglesia, les regaló también el relato de varias experiencias suyas, como estudiante, sacerdote recién ordenado, y de hoy día. Y su simpatía, por supuesto, que se conquistó a todos.

Su charla dio pie a un diálogo posterior muy interesante sobre Schoenstatt, cuentan algunos, que quedaron "enganchados" con la charla.

Juan Pablo II a los Movimientos