 |
Il pellegrinaggio di famiglie italiane a Schoenstatt Peregrinación de familias italianas a Schoenstatt Pilgrimage of Italian Families to Schoenstatt Italienische Familien in Schönstatt |
 |
 |
Viva Italia! Viva Italia! Viva Italia! |
|
 |
|
El Padre Ludovico Tedeschi con un amigo querido Father Ludovico Tedeschi with one of his little friends Pater Ludovico Tedeschi mit einem seiner kleinen Fans |
|
 |
|
Saludos a Schoenstatt en Italia! Greetings to Schoenstatt in Grüße nach Italien! |
|
 |
|
Padre, ¿vio la peregrine en moto? Father, did you see the Pilgrim MTA on the bike? Pater, haben Sie die Pilgernde Gottesmutter auf dem Motorrad gesehen? |
|
 |
|
Mi Schoenstatt My Schoenstatt Mein Schönstatt Fotos: POS Fischer © 2006 |
|
|
SCHOENSTATT, mkf. "¡Viva Italia!! ¡Viva Italia!!" – "¡Padre Lu-do-viii-co, Padre Lu-do-viiii-co!" Haría falta un árbitro de calidad excepcional para decidir cuál de estos gritos se escuchaba más o era más ruidoso. ¡A simple vista parece un empate a un nivel altísimo de competencia! Con banderas italianas y como verdaderos conquistadores, desde sus cochecitos, la generación más joven de Schoenstatt en Italia hizo presente a su país en Schoenstatt el primer fin de semana de mayo. Acompañados por el Padre Ludovico Tedeschi y la Hermana Asunción, varios matrimonios jóvenes de Italia con sus niños pasaron un fin de semana soleado en Schoenstatt.
"Nos fue muy bien aquí, todos encantados de ver italianos en Schoenstatt," comenta el Padre Ludovico el domingo por la mañana, mientras unos de los matrimonios miran extasiados las motos estacionadas frente de la Iglesia de la Adoración, en momentos en que los participantes de la peregrinación de motociclistas se encontraban en la tumba del Padre Kentenich rezando. "Padre Ludovico, ¡vio esto?", pregunta uno de los hombres, mostrándole al Padre Ludovico la Peregrina en la moto de uno de los participantes. ¡Se nota que despierta mucho interés! Tantas cosas que descubrir en Schoenstatt.
La peregrinación de Italia llegó el viernes al mediodía y se alojó en la Casa Marienland, en el Monte Schoenstatt. Pronto llenaron la casa, el parque infantil y el Monte Schoenstatt con su vivacidad contagiante, sus sonrisas y sus alegría de vivir. Los chicos, como siempre, fueron los primeros en sentirse "en casa": ¡Con la naturalidad que los caracteriza, le hablaban a cada Hermana que veían en italiano, les ofrecían sus chocolates y galletitas y fueron el centro de atención de todos!
Mientras tanto los padres profundizaban en la historia y la espiritualidad de Schoenstatt, y juntos pudieron recorrer y conocer algunos de los lugares santos de Schoenstatt. Seguramente fue debido a su presencia que la Iglesia de la Adoración, donde celebraron la Santa Misa el sábado, estaba tan bellamente decorada, como también el arribo de cientos de Hermanas de todos lados de Alemania y más allá para saludarlos en Schoenstatt... ¡y de paso -ya que estaban- saludar a su Superiora General y celebrar el santo de ella!
El domingo después del almuerzo, una visita en la Casa Missionshaus y una foto del grupo para schoenstatt.de, volvieron a Italia. ¡Nos vemos en Roma!, fue su saludo al partir.