Algún día habrá en cada Santuario... el Rincón de Don Joao

Fiesta de la Campaña del Rosario en Ciudad del Este, Paraguay

La Auxiliar sale en procesión The Auxiliary is carried in procession Die Auxiliar wird in Prozession getragen
Entrega de peregrinas: misionerito A young boy receives the Pilgrim MTA Auch die Kleinsten möchten Missionare sein
Entrega de peregrinas Commissioning of new missionaries Übernahme der Pilgernden Gottesmutter
Bendición del Rincón de Don Joao Pozzobon Blessing of the John Pozzobon Corner Segnung der Pozzobon-Ecke Fotos: Cabral © 2006 Album de fotos – photo album – Fotoalbum

PARAGUAY, Ana de Alvarenga. Fue un domingo de la Campaña en el Terruño, el Jardín del Padre, en Ciudad del Este. Se tuvieron charlas en tres lugares, una en el Rincón del Padre para las Alianza de Peregrinos, otra en la entrada, para misioneros, y una tercera en el galpón para renovación del compromiso misionero. En la misa hubo Alianza de Amor de peregrinos, también entrega de imágenes peregrinas, y de unas más pequeñas que son peregrinas para los niños. Luego fue la bendición del Rincón de Don Joao, el Rincón de la Campaña del Rosario en el entorno del Santuario.

La Mater nos regalaba un día espléndido, la incipiente mañana destacada de brillos de un sol que prometía calentar todo el día y, como un desafío, colaba sus rayos a través del follaje, iluminando así el Jardín del Padre. Las personas llegaban ataviadas de fiesta, con la imagen de la peregrina en brazos, como quien carga a un hijo, pero eran los hijos cargados por la Madre, que como en un milagro permitía a los/as misioneros/as llegar esta mañana a este lugar de gracias.

La fiesta comienza con el Rosario Iluminado

Como toda fiesta se inició con un rezo, el Santo Rosario iluminado en la explanada del Santuario y, en cada Avemaría se ponía una vela encendida, y cada uno quería ser el primero en encender las velas; su rezo era fuerte y los niños participaban entusiasmados de rodillas rezando a la Mater.

Las luces eran un símbolo vivo del pedido que hacíamos después de cada Gloria... "Ven Espíritu Santo, ven por María".

Y era ese el anhelo: que el Espíritu Santo ilumine de nuevo a cada misionero, para que así. con sus siete Dones, transmita la energía para empezar de nuevo. Que cada misionero sea capaz de volver a fundar Schoenstatt, volver a fundar la misión, en este año de gracias, año Jubilar del Santuario Nacional de Tuparendá.

La visita al Santuario, terminado el Rosario, fue muy emocionante, plagada de nostalgia, gratitud y pedidos. Y concluimos cantando, como un tierno "arrorro", la canción que trajeran del Brasil y que tal vez en todas las jornadas acompañó a Don Joâo:"Madrecita del Cielo" (Maezinha do Ceu).

Florecillas para la corona de la Auxiliar

Este año queremos coronar a la Mater Auxiliar, por ello en cada actividad del día le ofrecíamos en forma de florecillas, que se pegaban al Capitalario, una Corona; y el día continuó con talleres de Alianza de Peregrinos, de nuevos Misioneros y misioneritos; también por sobre todas las cosas, taller para los antiguos misioneros.

La idea de volver a fundar Schoenstatt estuvo muy presente en este taller para antiguos misioneros; así Fanny Pedrozo, misionera de la Parroquia San Lucas, dijo: "Sí, me creo capaz de volver a fundar la misión, cuando sea necesario, porque sé que no voy a estar sola, Ella estará conmigo y Ella obrará milagros". La imagen de la Mater Auxiliar partió en procesión desde el Portal del Terruño hasta el área de Misas, con cánticos y rezos a las 11:00 horas para iniciar la Santa Misa. Tras la lectura inicial, que Elena de Verdún hizo sobre la conquista de la imagen de la Auxiliar por la comunidad de Ciudad del Este, Ella entró triunfante hasta el Altar de manos de misioneras llegadas desde la lejana ciudad de Ytakyry. También Elena destacó el anhelo que tenemos de coronar a nuestra imagen Auxiliar de la Mater el día 18 de octubre próximo, por ello explicó nuestro lema "Todo por Cristo y María y, Cristo y María para todos", que llegó hasta el Altar de manos de dos misioneras; y el Capitalario trabajado ese día en forma de corona de flores.

Gran conquista de los misioneros

La lectura del día "Ser un buen pastor..." y a la vez ser la piedra angular, fue sin duda explicado como pocas veces por el Padre Dirceu Bortolatti, brasileño, sacerdote misionero scalabriniano, quien presidió la celebración con el Rito de Alianza de peregrinos y de nuevos misioneros.

Al final de la Misa se entregaron las imágenes, y las nuevas misioneras no conseguían disimular una profunda emoción.

En procesión, de nuevo, nos dirigimos al Rincón de Don Joâo, Rincón de la Campaña del Rosario, un círculo recientemente construido, como una conquista de los Misioneros que así, a partir de ahora, cuentan con un lugarcito ideal para las reuniones, a la sombra de dos árboles frondosos, cubiertos de plantas de orquídeas, cuyas mudas fueron traídas de la ciudad de Ribeirao Preto, lugar donde nació Don Joâo. La foto de Don Joâo estaba rodeada de un Rosario de flores con los colores de los cinco continentes, y ese círculo allí construido recientemente significa eso, el mundo, donde la Campaña sigue caminando cada día. Somos conscientes de que la propia entrega de don João, su vivencia de la Alianza de Amor y su dedicación total a la Campaña -a la que él mismo denominaba su "tercera esposa"- han sustentado el Capital de Gracias que hace fecunda la Campaña. Ella no puede ser considerada fruto del sólo esfuerzo humano; ella es, en sí misma, una irrupción de gracias destinada a llevar la corriente de vida de Schoenstatt a los círculos más amplios del pueblo (Santa Maria 1989 PDF)

El Padre Dirceu Bortolatt bendijo el lugar y la piedra que representa la Primera Estación del Vía Crucis en el Terruño.

Al final rezamos la oración por la canonización de Don Joâo y luego de dar la bendición final el Padre se alejó del lugar seguido de siete monaguillos/as que le dieron un brillo muy especial a esta celebración; ellos/as llegaron desde la Capilla La Merced perteneciente a la Parroquia San Lucas.

Los misioneros se dirigieron luego al Santuario a decirle hasta pronto a la Mater y a su Hijo Jesús Eucaristía y rezaron el Ángelus con mucha alegría.

No faltaron anécdotas: insistentes llamados, viento, llegada tarde, denario extra, Biblias...

Como en toda fiesta, no faltaron anécdotas:

Estuvo sufrida la construcción del Rincón de Don Joâo, y que lo cuente en encargado de realizar el trabajo, Rafael Paredes, a quien le llamamos día y noche, incluso con el "comisario de su barrio"; son formidables los del equipo de Construcción de la Pastoral Jorge y Rafa, la Mater les bendiga eternamente.

Un viento suave pero firme soplaba a la hora del Rosario, que nos obligó a permanecer de rodillas para proteger las velas e impedir que se apagaran.

La llegada de las misioneras de Ytakyry al terminar el Rosario ya que se han extraviado un poquito yendo a parar en el Área 5 de Franco, poniendo de manifiesto la solidaridad, porque los que estábamos entonábamos el Avemaría y las recién llegadas rezaban Santa María... Hicimos así un denario.

La presencia de un grupo de misioneros colombianos, que dieron al final una charla sobre niños sidosos y ofrecían una Biblia, muy bonita por cierto, nos trajo a la realidad de que los comerciales no sólo aparecen en la televisión. Sólo que las personas salieron conmovidas, y a la vez satisfechas llevando una gran estampa de la Virgencita de Caacupé. No se sabe si alguien compró la Biblia.

Hasta el sonido estuvo bien es esta fiesta.

Nadie pudo dejar de aportar su granito de arena, así las lecturas durante la Misa lo hicieron Elena, de la Pastoral; Cristina, de Federación y Sonia, de la Rama Familiar. ¡Gracias a todos quienes hicieron posible esta fiesta! La juventud como siempre apoyando en su función de servidores.

Comentaban las misioneras de Ytakyry que debieron salir en moto desde varios kilómetros para poder abordar el transporte que las trajo hasta el Terruño. Y hablando de moto, las misioneras del Barrio San Alfredo se encontraron con un dilema a la hora de retirarse, porque eran tres y había una sola moto... finalmente Luis las acercó a las otras dos hasta su barrio porque de lo contrario... Todo ese el día de la peregrinación de motociclistas al Santuario Original y de la bendición de "Peregrinas de Moto"...

Y la partida fue un tanto demorada, compartimos la mesa con nuestras misioneras de algunos barrios de Ciudad del Este y las que llegaron de Ytakyry, pero en general nadie estaba apurada en emprender el retorno, porque estaban tan bien en casa de su Madre.