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Inicio de las obras para el Santuario de Schoenstatt en Reñaca, Chile Groundbreaking ceremony for the Shrine in Reñaca, Chile Die Arbeit am Heiligtum von Reñaca, Chile, beginnt |
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Aportes de la familia en los cimientos Contributions of the family in the foundations Beiträge der Familie im Fundament |
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Ofertas Offering Gabenprozession |
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Ladrillos de un Santuario vivo Stones for a living Shrine Steine eines lebendiges Heiligtums |
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Bendición Blessing Segen |
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Un momento tan anhelado Everybody had longed so much for this moment So lange war dieser Tag herbeigesehnt worden Fotos: Vinculo © 2006 |
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CHILE, Laurita Toro / mkf. La Familia de Schoenstatt de Reñaca retiene vivo en sus corazones este día de tanta gracia y cercanía con el cielo, un día en el que se experimentó el ser familia, el ser hermanos: el día de la bendición de la piedra fundamental de su futuro Santuario.
El inicio de la obra, el pasado 19 de marzo de 2006, ha sido ofrecido como el gran fundamento de una obra de Dios. Un nuevo Santuario para Schoenstatt, para la Iglesia, ¡aquí en Los Pinos, donde brota nueva vida!
Fue un día hermoso con un gran ambiente de familia, donde todos quisieron estar presentes. Al llegar los invitados, los recibían dos carretillas como símbolo de esta construcción donde cada uno dejaba los ladrillos conquistados, las cartas, todo lo que se quisiera ofrecer como Capital de Gracias para ser parte viva de los fundamentos que deben sostener un sólido edificio.
Los bellos cantos anunciaron el comienzo de la santa Misa. ¡Llegan muchos peregrinos!, mucha juventud, Hermanas... hay globos, flores, banderas.
¡Es un día de fiesta!
Lo que cada uno ofrece
La Eucaristía fue concelebrada por los Padres Miguel Kast, Mario Romero y Alfonso Boess. Durante el ofertorio se llevaron al altar las ofrendas más significativas de cada rama: ante todo el primer ladrillo, Josefina Mágasich, quien con su testimonio de vida contribuyó al nacimiento de esta nueva vida. Luego se ofreció tierra de distintos lugares santos, las carretillas llenas de símbolos de aportes al Capital de Gracias, y otros signos de gran importancia para la Familia.
Al término de la Sta. Misa, con los corazones llenos del amor de Dios, todos fueron al terreno donde se aprecia una profunda excavación de la que ya asoman algunos hierros de los fundamentos del tan anhelado Santuario. Allí se depositaron todas las ofrendas, el P. Miguel Kast impartió la bendición con unas significativas palabras, y luego todos entonaron con alegría el Himno de la Familia. También se presentó un significativo acto poético, cuyo autor fue el coordinador y arquitecto de Los Pinos, Felipe Murillo. Finalmente todos tomaron esta tierra santa entre sus manos. La fiesta culminó con un abrazo y un acogedor encuentro familiar de esta gran y cálida Familia de Schoenstatt.
Fuente: Vinculo 1/2006