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Unidad en la diversidad .... Unity in diversity ... Einheit in der Vielfalt... |
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... aceptar lo diferente del otro... ...accepting the other one being different... …im Annehmen des Anderen beim Anderen… |
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... según el modelo de la Santisima Trinidad ... according to the model of the Holy Trinity … nach dem Bild der Heiligsten Dreifaltigkeit Fotos: Crivelli © 2006 |
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OPINIÓN. Parecería que hay que darle definitivamente un título de "profeta" al politólogo norteamericano Samuel Huntington. En 1993 publicó una tesis: "Clash of civilizations", sobre el "choque de las civilizaciones". Según sus afirmaciones, las naciones dejarán de ser protagonistas centrales de la política; en su lugar, las luchas mundiales más violentas se producirán entre las culturas, especialmente entre los musulmanes y los no musulmanes.
Después de todo lo que ha sucedido en relación con las caricaturas de Mahoma, la profecía de Huntington parece cumplida. Las muchedumbres de musulmanes iracundos que incendiaron embajadas europeas, parecen confirmar el escenario que trazó hace 13 años este profesor de Harvard.
Como siempre, en situaciones candentes puede ser muy reveladora una mirada calma. Muchos comentadores señalan, y justificadamente, que los disturbios, en forma notoria, fueron atizados por protagonistas interesados. Justamente en los países donde los regímenes dictatoriales luchan por sobrevivir, es muy bienvenida tal desviación de la furia popular. En este caso no se trata del choque de culturas en vez de un choque entre naciones. Más bien, evidentemente algunas naciones se sirven siempre del contexto religioso – cultural para conservar su debilitado poder.
También en el occidente, una precisa mirada al conflicto conduce a resultados interesantes. Se dice que está en juego el preciado bien de la libertad de opinión. Sorprendentemente esto lo manifiestan con insistencia los políticos, que por lo demás le señalan con gusto a la prensa los límites de su libertad cuando algo atenta supuesta o realmente contra la seguridad interior. Entonces, aquí: ponderación de lo que es mejor; allá: pretensión de darle un carácter absoluto a un valor fundamental. ¡Se mide con dos medidas!
¿Qué hacer? Quisiera gustosamente dar la razón a los que reclaman mucho – y de vez en cuando a los gritos – que se regrese a los valores cristianos de occidente. Con una añadidura: desde hace mucho tiempo no entendemos lo que eso significa. Y jamás lo realizamos.
Gisbert Greshake, teólogo de Friburgo, constató recientemente en una jornada de la Academia Católica en Baviera, que el occidente – desde el comienzo hasta hoy – tiene "un déficit de fe trinitaria" . La fe en un Dios trino exige realmente "la relación con los demás... y la comunión con ellos" La consecuencia de ello no es la "autodeterminación contra los demás", sino la "autodeterminación de y por el "ser-con", así como por la entrega a los demás"
La cultura occidental y cristiana no puede jamás – si realmente es cristiana y con ello trinitaria – chocar con otras culturas. Ella buscara siempre relacionarse, igual quien o qué tenga enfrente, y a pesar de todos los "profetas" modernos.
Joachim Schwind es el redactor jefe de la revista "Ciudad nueva" en Alemania, editada mensualmente por el Movimiento Focolar.
Traducción: aat, Argentina