published: 2005-10-05 |
Hace ocho años como hijos, hoy como Padres.Los novicios de entonces visitaron el Hospital Regional de Ciudad del Este
|
"¡E’á! (expresión popular que indica asombro), ¿o sea que ya son Pa’i (sacerdotes)?" les preguntaban. Otras recordaban la jornada espiritual que habían realizado en un local al aire libre que concluyó con una Sta. Misa celebrada por el Padre José María García, entonces Maestro de Novicios. Los acompañé en la recorrida por las distintas salas y en todas ellas encontraron gente que los reconoció y se alegró por la presencia de los hoy sacerdotes. En especial la sorpresa. "Y ustedes, ¿vinieron para agradecernos?" decían. "Y sí, recién llegamos y ahora estamos acá para saludarlos y darles las gracias a todos". Recuerdos...Si bien el hospital está muy cambiado, ha mejorado mucho en las instalaciones y hay personal nuevo, me llamó la atención el hecho que muchos funcionarios antiguos se acordaban de los distintos grupos de novicios que trabajaron en el hospital y preguntaban por ellos: ¿Y Sergio…, y Patricio…, y el peruano…, y ese chiquito que hablaba mucho…, y ese al que lo operamos del apéndice…, y esos que pintaron las salas…, te acordás de esos altos…., había uno chiquito que ya tenía pinta de pa´i? Recibieron un efusivo abrazo de las cocineras. "Ahora estamos un poco más gordas nomás…, pero qué le vamos a hacer si trabajamos en la cocina…", dijo una de ellas, como explicando las razones de los cambios físicos. El Padre Beltrán recordó el primer día de trabajo. Llegó, y se sentó. Una licenciada encargada del sector le interrogó: "¿Y vos…?" "Y yo soy uno de los novicios….", comenzó con el discurso. Y antes que pudiera terminar, la licenciada le dijo imperativamente: "Sentado y con los brazos cruzados no vas aprender nada, así que vení ahora mismo a la sala". El quinieleroY el Padre Andrés recordó que el primer día había sido asignado a urgencias. Llegó una persona con una herida en la cabeza que exigió un corte. El doctor lo llamó y comenzó a explicarle los detalles del proceso, el tipo de corte…. El entonces novicio Andrés trató de mantener la compostura ante la herida abierta, hasta que no pudo más y se sentó respirando profundamente. El doctor, lo miró y le preguntó: "¿En qué año de medicina estás?". "No doctor, no estudio medicina", respondió Andrés. "Bueno, ¿en qué año de enfermería estás?". "No doctor, no estudio enfermería, soy un novicio". El doctor abrió los brazos haciendo un gesto como diciendo ¿y eso qué es? ¿y para qué estás aquí? En uno de los momentos vino a saludarlos con gran cariño el quinielero del hospital. La quiniela es un juego que se sortea diariamente, en el que se apuesta dinero a uno o varios números. En el Paraguay en cada lugar de trabajo, en cada esquina, hay una persona que recibe estas apuestas, se les llama quinieleros. No me animé a preguntar si las relaciones con el quinielero del hospital habían sido del orden espiritual o monetario. ¡Quedará como uno de los misterios de la Familia local! |
Zurück/Back: [Seitenanfang
/ Top] [letzte Seite / last page]
[Homepage]
Last Update:
05.10.2005
Mail: Editor /Webmaster
© 2005 Schönstatt-Bewegung in Deutschland, PressOffice Schönstatt,
hbre, All rights reserved, Impressum