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 published: 2005-09-22

Ser aliados de la creación

La conferencia de Viterbo sobre la ecología a la luz de la fe

 

Aliados de la creación

Allies of creation

Verbündete der Schöpfung

Foto: Ilabaca © 2005

 

El planeta Tierra, una realidad viva

Planet Herat, a living reality

Planet Erde – eine lebendige Wirklichkeit

 
 

Un gran pacto de paz con toda la creación

A “peace treaty” with all creation

Ein “Friedensvertrag” mit der ganzen Schöpfung

 
 

Temblorosos te aclaman tierra y mar: Santo, santo, santo Señor

All creation joyfully singst he glories of the Father…

Heilig, heilig, heilig Herr, rauschen zitternd Land und Meer…

Fotos: Ituzaingó © 2005

 

 

 

ROMA, P. Alberto Eronti. Desde el 23 de septiembre al 9 de octubre se llevará a cabo en Viterbo (Italia) un encuentro de singular importancia para el futuro de la Tierra. Se trata de las Jornadas tituladas: "Objetivo: Hombre-Medio-Ambiente". Premios Nóbel, científicos, ecologistas y políticos se "ocuparán del medio ambiente". En la gente el tema suscita angustia en algunos, en otros una honda preocupación por el futuro a mediano plazo, en la mayoría curiosidad. En la jerarquía de la Iglesia y en muchos de sus pensadores, el tema se ha instalado hace tiempo y no son pocos los documentos, publicaciones y advertencias. Así como la "globalización" es una palabra incorporada al vocabulario común, antes ya lo ha sido la "ecología" y todo lo que la palabra abarca hoy.

Desde los maremotos ocurridos en el – para nosotros – lejano oriente, tras la creciente desertización de bastas zonas del norte de África con la consiguiente hambruna de pueblos inermes; los incendios devastadores del último verano europeo debido a una sequía persistente y a las altas temperaturas, con el dramático saldo del huracán "Katrina", es mucho lo que se habla y se oye. En otras regiones del mundo se reconoce que "el clima está cambiando", que ciertos fenómenos "no ocurrían antes". Entre las tantas preguntas que lo dicho plantea, hay una recurrente en el ámbito de la fe: ¿Por qué Dios permite todo esto? Hay una fuerte tendencia a marginar a Dios de la vida, pero cuando éstos y otros sucesos acontecen, entonces le "preguntamos" a él.

El planeta Tierra, una realidad viva

Veamos cómo entrar de manera sencilla a la comprensión del problema y sus posibles soluciones. El planeta Tierra es una realidad viva. Mucha de esa vida ocurre en la superficie, ante nuestros ojos. Pero también hay vida en las entrañas de la tierra, vida que generalmente no vemos, pero que de cuando en cuando irrumpe y, a menudo, de manera dramática por la erupción de los volcanes, en los terremotos y maremotos. Estos fenómenos sabemos que pueden suceder e incluso muchas veces se pueden preanunciar por medios técnicos o por "los avisos" de la misma naturaleza. Es notable que algunas poblaciones muy subdesarrolladas del Oriente no sufrieron muertos con el último maremoto porque "supieron interpretar los movimientos de la naturaleza": cuando el mar se alejó, en vez de ir a recoger caracolas o quedarse mirando el fenómeno, corrieron hacia las tierras altas alejándose de las playas. Es decir: la naturaleza "habla", lo que importa es "escucharla" e "interpretar" su mensaje.

En cambio los fenómenos visibles a nuestros ojos no son siempre ni sólo "movimientos de la naturaleza", en ellos influyen en menor o mayor proporción las acciones equivocadas y a veces voraces del hombre. Desde el amanecer de la revolución industrial hasta ahora, el hombre ha colmado de cicatrices la tierra. Algunos datos: el Polo Norte ha perdido más del 7% de su hielo; los gases del dióxido de carbono han aumentado un 30%, produciendo el llamado "agujero de la capa de ozono"; en el siglo XX el hombre movió más de 40 millones de toneladas de tierra y roca al año (casi 40 veces más de lo que produce la erosión de los vientos); el uso de fertilizantes químicos con compuestos no aptos para la vida del hombre; la tala de bosques, en particular del Amazonas; la desertización… El número de huracanes y tifones no aumentó, pero su fuerza ha aumentado hasta en un 70% (caso Katrina).

Una especie de gran pacto de paz con toda la creación

La preocupación ecológica es uno de los signos de nuestro tiempo. Creyentes y no creyentes parecen estar de acuerdo en la necesidad de defender el medio ambiente, porque está en juego el futuro de la humanidad, pero este futuro ya ha comenzado y muchos de sus signos nos son absolutamente visibles. Estamos ante un problema ético de dimensión planetaria. El 1º de enero de 1990 Juan Pablo II señalaba que la paz social, fruto de la paz con el Creador, exige también una especie de gran pacto de paz con toda la creación. En este contexto el Papa habló de formar una conciencia responsable y solidaria respeto al medio ambiente. No fue la naturaleza la que rompió el equilibrio en la superficie de la tierra, sino el hombre. De aquí la pregunta del Papa : "¿Podemos quedar al margen ante las perspectivas de un desequilibrio ecológico, que hace inhabitables y enemigas del hombre vastas áreas del planeta?" (NMI Nº 51)

Muchas veces, para justificar la explotación de la naturaleza, se ha hecho referencia al relato de la creación del libro del Génesis (1, 28), cuando Dios le dice al hombre: Creced y multiplicaos, llenad la tierra y sometedla, dominad los peces del mar, las aves del cielo, los vivientes que se mueven en la tierra". El problema es que con frecuencia el hombre entendió el "someter" y "dominar" como un derecho a usar y abusar. No es ésta la interpretación del texto bíblico: El hombre, "imagen de Dios", a quien se le encomienda el destino de lo creado, no está llamado a ser un señor arrogante y despótico; sino sólo intendente y gerente, administrador y tutor. Esta es la convicción del hombre bíblico que confiesa: "El cielo pertenece al Señor, la tierra se la ha confiado a los hombres" (Salmo 115,16). Si es importante la función de dominar, no es menos importante el modo de ejercer el dominio, que ha de ser responsable y amoroso, como es el dominio de Dios.

Dominar la creación sirviéndola y no destruyéndola

Reflexionando sobre lo dicho, en el contexto de las Jornadas de Viterbo, veo que el Padre de la Familia percibió el tema ya a inicios del siglo XX, como también nos orientó en el modo de responder a esta realidad. En 1912 les decía nuestro Padre a los jóvenes: "…¿están los pueblos cultos y civilizados suficientemente preparados y maduros para hacer buen uso de los enormes progresos materiales de nuestro tiempo? ¿O no es más acertado afirmar que nuestro tiempo se ha hecho esclavo de sus propias conquistas? Sí, así es. El dominio que tenemos de los poderes y fuerzas de la naturaleza no ha marchado a la par con el dominio de lo instintivo y animal que hay en el corazón del hombre. Esta tremenda discrepancia, esta inmensa grieta, se hace cada vez más grande y profunda…" (Acta de Pre-fundación, Nº 12). Dos años después, en la plática del Acta de Fundación (Nº 11) nos orientará en la respuesta a esta realidad como una exigencia de la Alianza de Amor: "Ahora tienen para ello la mejor oportunidad. Y no crean que es algo extraordinario si ustedes suben al máximo (sus exigencias)… Es esta santificación la que exijo de vosotros (…) por medio del fiel y fidelísimo cumplimiento del deber (de estado). Tras lo dicho llegamos a una conclusión: En primer lugar estamos ante un desafío ético y moral que, según el magisterio de la Iglesia, exige: dominar la creación sirviéndola y no destruyéndola. Se trata de un domino responsable y lleno de admiración. En segundo lugar estamos ante un desafío pedagógico de autoeducación, educación familiar y social.

Una anécdota para entender que no basta con la buena voluntad y lo superficial, sino que se nos exige convicción para la acción: En Florencia se realizó una manifestación de ecologistas y "verdes" a favor de la naturaleza, al terminar y retirarse del "campus" dejaron tras ellos un tendal de botellas y latas de gaseosas. Era un panorama desolador. A lo lejos se veían, casi vacíos, los contenedores puestos por el municipio para tal fin. No, no basta con manifestarse, hace falta "algo más": ser aliados de la creación.


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Last Update: 22.09.2005 Mail: Editor /Webmaster
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