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Por la vida: taller de la iniciativa “Lichtzeichen” For life: workshop of the initiative “Lichtzeichen” Einladung zum Leben: Vortragsabend von “Lichtzeichen” |
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Si a la vida In favor of each human life Ja zum Leben |
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P. Dr. Lothar Penners: conferencista Fr. Dr. Lothar Penners: talk Den Vortrag hielt Pater Dr.Lothar Penners |
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Información Information Es gab gute Möglichkeiten, sich zu informieren Fotos: Eichenberg © 2005 |
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ALEMANIA, Hna. Anne Meike Brück / mkf. No fue casualidad: mientras en las vísperas de la "Jornada internacional por la liberación del aborto", en numerosos países – sobre todo en Sudamérica – muchas personas respondían a la convocatoria "Un signo de luz por la vida" y encendían una luz por un niño no nacido, la Asociación "Signo de Luz" realizaba en la "Auf'm Nippes" en Vallendar, una conferencia de la serie "Invitación a la vida". Fue un estímulo para comprometerse por la protección de la vida.
Ulrike Eichenberg, de Vallendar, comenzó el encuentro con una "torta de cumpleaños" con tres velas encendidas en la mano. Es que hacía tres años que se había fundado la Asociación "Signo de Luz". La Sra. de Eichenberg saludó al conferencista, el P. Dr. Lothar Penners, quien por su parte agradeció por el compromiso de "Signo de Luz".
Nada de lamentos y denuncias:¡hay que buscar soluciones!
Conocemos la mayoría de los hechos. Europa envejece, faltan niños. El término medio de nacimientos aconsejable es de nada más que de 1,2 niños, dijo Ulrike Eichenberg. Estos hechos son poco conocidos: informó la Oficina federal de estadísticas que en el cuarto trimestre de 2004 hubo 31.600 abortos en Alemania, 4% más que en el cuarto trimestre del año anterior. Y no se considera una elevada cifra que hay en negro. La cantidad de abortos en el mundo describe el cuadro de un drama mundial. Anualmente son abortados alrededor de 46 millones de niños. Uno de cada cuatro niños es asesinado antes de nacer. Cuando los colaboradores de "Signo de Luz" trabajan en el área "Protección de la vida, pasa que a veces se siente como que se hace el trabajo pesado sin jamás ver sus frutos. Sin embargo las apariencias engañan, gracias a Dios.
Los crudos hechos mencionados no permiten ciertamente ninguna idealización. Sin embargo las lamentaciones sirven de poco. Cuanto más claro es el diagnóstico, tanto más precisa y categórica debe ser la búsqueda de la solución a esta crisis.
La buena noticia es que avanza y se extiende la cultura de la vida tanto en el ámbito internacional como en el nacional. Cada vez son más las organizaciones, las personas que trabajan a favor de la vida. Cada vez, y con mayor frecuencia, la política recibe una fuerte presión cuando un proyecto de ley atenta contra la dignidad humana.
El periodista Stefan Rehder opina que se está deteniendo la cultura de la muerte. Incluso está convencido de que se aproxima una revolución de la "Cultura de la vida". En todo caso, él cree que se necesitan más seguidores. Los colaboradores de "Signo de Luz" han tomado como tarea responsabilizarse por una cultura de la vida y jugarse concretamente por ella. De este deseo ha surgido la serie de conferencias que, con el título "Invitación a la vida", se ha organizado este año.
La tentación del pragmatismo, marcada por una percepción funcional
El P. Dr. Lothar Penners se ocupó al comienzo de su conferencia del tema de la resistencia y el estímulo para tratar el tema de "protección de la vida". Dijo que ciertamente no podemos crear una nueva cultura en un santiamén, pero que debemos ver los signos de esperanza que atraviesan todos los países como un impulso y una confirmación. Junto a todas las evaluaciones reales de la situación, hay síntomas de que se ve de nuevo el valor de la vida humana y se puede difundir una cultura de la vida si se apoya esto.
Entonces señaló los temas que están en cuestión en el ámbito de las ciencias de la vida, y explicó el impacto de las expectativas económicas.
En vistas al remolino del desarrollo social, el P. Penners destacó la apertura principal de la sociedad pluralista para el libre juego de fuerzas. En nuestro tiempo es difícil ver desinteresadamente al hombre. Nuestra cultura está más marcada por una percepción funcional del hombre que por una búsqueda de su ser. La verdad es compleja y solo se la reconoce paulatinamente y por este motivo muchos prefieren el pragmatismo y no tienen el ánimo de buscar la verdad sobre el hombre, sobre su dignidad y sus derechos. Tal visión entra en la cultura del derecho, la que produce una determinada legislación en la que el "derecho a ser persona" está más o, como ahora en Alemania, menos protegido.
Una cultura de la vida
El estado no puede crear una cultura del derecho con sentido del derecho y conciencia del derecho; ella se desarrolla en y a través de una cultura de la vida fundada en la familia, cuando son transmitidos los valores fundamentales de la vida. Se requiere un movimiento mundial por la vida. La experiencia de la JMJ en Alemania levanta el ánimo, porque aquí se presentó una juventud que es creyente, con sentido de Iglesia y muy viva, una juventud de la que se puede esperar que se haga cargo de esta tarea. Aún no se estudió ampliamente lo que enseñó y plasmó el Padre Kentenich como pedagogía de la vida; aún no se ha sondeado con profundidad lo que significa que el proyecto del Movimiento de Schoenstatt "Signo de Luz" esta respaldado por un Santuario.
Encender una luz por los niños aún no nacidos. Alguien alguna vez lo encendió por ti: ese fue el lema de la acción a favor de la vida arriba mencionada, realizada el 28 de septiembre. Signo de Luz ha encendido muchísimas luces.