Nachrichten - News - Noticias
 published: 2005-08-02

La Jornada Mundial de la Juventud, un tiempo de gracias

Más de cuarenta voluntarios que trabajan desde hace tiempo en la oficina de la JMJ en Colonia, peregrinan a Schoenstatt

Sonntag, 31. Juli: Schönstatt-Wallfahrt von etwa 40 Langzeitvoluntären aus dem Weltjugendtagsbüro in Köln

Domingo, 31 de julio: peregrinación de unos 40 voluntarios de la Oficina de la JMJ en Colonia

Sunday, July 31: pilgrimage of some 40 long-term volunteers of the World Youth Day Office in Cologne

Sonntag, 31. Juli: Schönstatt-Wallfahrt von etwa 40 Langzeitvoluntären aus dem Weltjugendtagsbüro in Köln

 
Messe in der Anbetungskirche  

Misa en la Iglesia de la Adoración

Mass in the Adoration Church

Messe in der Anbetungskirche

 
Ein Geschenk von Pater Kentenich für jeden  

Un regalo del Padre Kentenich a cada uno

A gift from Father Kentenich for each one

Ein Geschenk von Pater Kentenich für jeden

 
Eine Erinnerung für zu Hause  

Un recuerdo para llevar a casa

A souvenir to take home

Eine Erinnerung für zu Hause

 
Gesungenes Zeugnis: Meine Familie, mein Zuhause&

Testimonio cantado: Es mi familia, es mi hogar...

Singing her testimony: This is my family, this is my home

Gesungenes Zeugnis: Meine Familie, mein Zuhause…

 
Nach dem Mittagessen ging es zum Urheiligtum  

Despues del almuerzo en la Casa Sonnenau, caminaron al Santuario Original

From House Sonnenau, after lunch, they set out for the Original Shrine

Nach dem Mittagessen ging es zum Urheiligtum

 
Ausruhen

Descansando

Resting

Ausruhen

 
Wir sind gekommen, um dich anzubeten, Jesus  zusammen mit Maria  

Hemos venido para adorarte, Cristo – junto con Maria

We have come to adore you, Jesus – together with Mary

Wir sind gekommen, um dich anzubeten, Jesus – zusammen mit Maria

Fotos: POS Fischer © 2005

Mas fotos – more photos – mehr Bilder

 

 

 

SCHOENSTATT, mkf. "Se acerca la JMJ, en la que voy a participar, si Dios quiere, aunque yo ya no sea tan joven. ¡Pero tengo un corazón joven!. En los próximos días muchos grupos de jóvenes de todo el mundo se pondrán en marcha hacia Colonia, iluminados por el lema de los tres Reyes Magos: Hemos venido para adorarlo". Al mismo tiempo, tal como el Papa Benedicto XVI ha invitado a rezar por la JMJ en la oración del Ángelus en Castelgandolfo, más de cuarenta voluntarios que trabajan desde hace tiempo en la oficina de la JMJ en Colonia, han rezado en la Iglesia de la Adoración en Schoenstatt pidiendo que este sea un tiempo de gracias, de un profundo encuentro con Cristo, de bendiciones y alegría para toda la juventud que está en camino hacia Colonia. Aunque faltan sólo dos semanas para la JMJ, viajaron a Schoenstatt por invitación de los schoenstattianos que trabajan con ellos, y trajeron consigo todo su entusiasmo y también todo lo que les cuesta el trabajo que realizan en Colonia.

"¡Aquí está el mundo entero!", afirma Manuela Mañanes (del área personal y computación) que es integrante de la Juventud femenina de Schoenstatt de La Plata, Argentina, delante del grupo de peregrinos que llegó caminando a Schoenstatt desde la estación del ferrocarril en Vallendar a las 10,30 hs. Una primera parada intermedia en la oficina de prensa de Schoenstatt (donde colaboró durante 7 semanas Christel Sonnekalb, de Venezuela [ahora en el área comunicaciones y publicidad] y que por eso "hay que" conocer) mostró claramente la gran apertura de la juventud. Ante el mapamundi que está en el pasillo intentaron descubrir donde está Schoenstatt en sus países. "Yo no he oído nada de Schoenstatt como desde que llegué a Colonia", dijo un salesiano canadiense. "¡He preguntado aquí y todos sabían claramente a quien debía dirigirme!". "¿Está Schoenstatt en Albania?", preguntó una joven nativa de ese país y a toda costa quería conseguir algunas direcciones. Del mismo modo lo pidió una joven del Salvador, que estaba un poco triste porque allá no hay aún ningún Santuario. También hay aquí jóvenes de Nueva Zelanda y de Italia, de Azerbaiján y Méjico y quieren conocer Schoenstatt.

¿A donde vamos a tomar fuerzas?

"Queremos hacerles algún regalito a los que van con nosotros: alguna oración, algo que pueda recordarles que Schoenstatt ha sido para ellos un hogar, una familia… Levamos 40 jóvenes que necesitan llenarse de Cristo vivo… que necesitan sentirse en casa, que necesitan ser tratados con la importancia que se merecen...", así escribió Manuela en un mensaje de correo electrónico poco ante de la peregrinación. "¡Por favor recen para que haya sol, Schoenstatt es tan hermoso cuando hay buen tiempo, y ellos deben experimentar que Schoenstatt es lo más hermoso que existe!" . Y los Aliados en el cielo agradecieron a sus Aliados en la tierra por toda su entrega e hicieron brillar el sol, aunque el pronóstico meteorológico había anunciado un aguacero y muchas nubes.

Fueron caminando hasta la Iglesia de la Adoración (unos 2 Km.) donde el Padre Duncan McVicar y algunos voluntarios de la oficina del proyecto de la JMJ en Schoenstatt, prepararon la Sta. Misa con cantos y lecturas en inglés, alemán y castellano. ¿A dónde vamos a tomar fuerzas para la acción?, preguntó el P. Duncan en la homilía. ¿Dónde tomamos la fuerza para que la JMJ sea para nosotros un tiempo de gracias y no solamente una fantástica organización? Con vivacidad y en forma muy plástica narró al final la visión de Don Bosco que fue mencionada por el Padre Kentenich en el último escrito de su vida: "Alegres por la esperanza y seguros de la victoria, con María hacia los tiempos más nuevos". Don Bosco tuvo la visión de una gran batalla naval: el barco de la Iglesia se salvaba cuando lograba anclarse a dos firmes columnas surgidas del mar: eran la Eucaristía y María. Ellas son las que dan la fuerza: la Eucaristía como la más profunda unidad con Cristo que es posible en la tierra, y María "la totalmente llena de Cristo" que no quiere otra cosa que conducir a la más profunda vinculación con Jesús. ¿Podemos vivir como cristianos, podemos mantener vigente la herencia de Juan Pablo II, podemos tener la fuerza para irradiar la fe en medio de las tensiones y desilusiones? preguntó. "Mi fuerza está en la Eucaristía y en María", dijo y se sentía que había acertado con el tono correcto.

Ser las manos, la mirada y la sonrisa de Dios Padre

"En este grupo que peregrina hay varios jóvenes – también alemanes – con mucha fe, con mucha necesidad de crecer en Cristo y que vieron en el "Schoenstatt vivo" que trajimos los schoenstattianos aquí aquello que "desean conocer"… están sedientos de saber "que es lo que hace a estos schoenstattianos ser lo que son", comenta Manuela sobre la gran apertura de los voluntarios. Después de la Sta. Misa todos fueron invitados a pasar a la Capilla del Fundador, porque allí querían darles una pequeña sorpresa. Tal como el Padre Kentenich saludaba a sus visitas mientras vivía, así quería saludarlas ahora, como lo decía un anuncio misterioso.

Primero se les contó una breve anécdota de la vida del Padre Kentenich, relatada hace poco por el Padre Alfonso Boess:

"Durante su exilio en Estados Unidos yo le había escrito varias veces desde Alemania y también desde Chile, y él me había contestado. Yo tengo esas cartas. Y cuando volvió a Schoenstatt, entró a la sala de las Hermanas para saludarlas. Había unas 400 Hermanas allá. Mi hermana – María Alfonsia, que es Hermana de María – estaba en el pasillo y cuando llegó a ella la reconoció, lo que era increíble ya que ella era novicia cuando salió el Padre. Y le preguntó: "¿y cómo está su hermanito?" Era increíble, yo era uno de entre muchos y esta Hermana también, una entre 400, y esto sucedió después de estar 15 años fuera de Schoenstatt".

Hoy el Padre Kentenich preguntaría: ¿cómo les va a los voluntarios que hace tanto tiempo están en Colonia? El Padre Kentenich, transmitiría a través de todo su ser el mensaje del infinito amor del Padre Dios, ya que él mismo, como María, era para cada persona las manos, la sonrisa, la cálida mirada, la comprensión, el interés personal del Padre. Y para que así lo experimentaran, había sobre el sarcófago un regalo para cada uno: una foto de Juan Pablo II en la primera JMJ (Buenos Aires, 1987), la foto de una rosa, un pequeño portarretratos articulado de madera (en forma de libro) con una imagen de la Mater de un lado, y en el otro distintas imágenes originales: Jesús, el ángel de la guarda, la cruz de la unidad, el Santuario, el Padre Kentenich... Cuando todos habían recibido su regalo (más de uno eligió bien conscientemente el que más le gustaba) había algo más: ¡chocolate! Cada uno fue invitado a pensar en alguna persona que en los últimos días lo trató bien, para llevarle un chocolate. Y también recordar si alguien no los trató tan bien ¡y llevarle dos!. Hubo alguien que, riéndose de sí mismo, se llevó todo un paquete.

Con gran entusiasmo cantaron los schoenstattianos, en castellano, la oración del P. Reinisch: "Tú eres el signo grandioso... Hazme un apóstol de Schoenstatt, cual caballero estaré, y moriré sonriendo, ¡querida MTA!" Y no necesitaron decir nada más sobre lo que Schoenstatt significa para ellos. ¡Se sentía y se oía! Agradecieron aún a todos los que habían aceptado viajar a Schoenstatt con ellos, para comprender el "por qué" y el "como" de su compromiso y de su atractivo. "¡Aquí me tienes, Madre, como ofrenda de amor!"

Simplemente: estar aquí y adorar

Luego hubo un almuerzo especialmente rico en la casa Sonnenau: "¡Llegamos a las 14 hs. ¡y nos saludaron con mucho cariño!", (¡sabían que en Alemania llegar a esa hora para el almuerzo no es lo mejor!). "Hace semanas que no comía algo tan rico, ¡tengo que volver aquí otra vez!" "¡Incluso había postre!" "Ya te dije que en Schoenstatt debes conocer a la casa Sonnenau y la Hna. Lisann, de lo contrario faltaría algo!" Finalmente fueron todos juntos al Santuario Original. Se sentaron todos en el prado y hubo muchas preguntas, relatos... hasta que el Santuario Original quedó libre y pudieron entrar. Nicolás, de Chile, comenzó a tocar la guitarra y a cantar, y poco a poco todos se reunieron alrededor... El Sagrario estaba abierto, Jesús y María esperaban a los jóvenes "con las puertas y los corazones abiertos... y una tinaja, ampliamente abierta, recibió todas las alegrías, todo lo que hace feliz, pero también todo lo difícil que muchos jóvenes quisieron regalar..."

"La Virgen Madre del Redentor, de la cual recordaremos en el mes de agosto la Asunción al Cielo, vele por cuantos se preparan a participar a la Jornada Mundial de la Juventud. Ella, que siempre nos precede en la peregrinación de la fe, guíe en modo especial a los jóvenes en la búsqueda del bien verdadero y de la alegría auténtica", ha dicho el Papa Benedicto al concluir el Ángelus, un párrafo que todas las agencias de noticias alemanas "se olvidaron" de comunicar.

Rezaron todos juntos, cada uno en su idioma, la pequeña consagración, el Padre nuestro, y se quedaron sencillamente allí, adorando...

Algunos fueron todavía al Santuario de las familias, otros, que habían llegado tarde a la Sta. Misa, participaron de una Eucaristía en castellano en la casa Marienau, otros fueron al Monte Sión, otros simplemente se sentaron a comentar las vivencias de este día. "Ha sido un hermoso día" dijo un joven de Paraguay. "Con seguridad volveré otra vez". Ya era el momento de volver... de volver a la preparación de la JMJ que comenzará dentro de dos semanas.

"Quisiera invitar a los jóvenes creyentes del mundo entero, incluso a los que no van a poder participar a un evento eclesial tan extraordinario, a unirse en una común peregrinación espiritual hacia las fuentes de nuestra fe", dijo el Santo Padre.

"Según una feliz intuición del amado Papa Juan Pablo II – explicó –, la Jornada Mundial de la Juventud constituye un privilegiado encuentro con Cristo, con la conciencia segura de que solo Él ofrece a los seres humanos la plenitud de vida, de alegría y de amor".

Traducción: aat, Argentina



Zurück/Back: [Seitenanfang / Top] [letzte Seite / last page] [Homepage]

Last Update: 05.08.2005 Mail: Editor /Webmaster
© 2005 Schönstatt-Bewegung in Deutschland, PressOffice Schönstatt, hbre, All rights reserved, Impressum