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Cada niño un milagro del amor de Dios, una nueva historia de Dios con los hombres Each child a miracle of God’s love, a new history of God with mankind Jedes Kind ein Wunder der Liebe Gottes, eine neue Geschichte Gottes mit der Menschheit Foto: Ríos © 2005 |
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Hna Dra. M. Elena Lugo, con la Hna María Pilar Carrere , Asesora de la Rama de Madres y de la Obra Familiar de Córdoba Sr. Dr. Elena Lugo, with Sr. Maria Pilar Carrere, advisor of the Mothers’ League and the Family Movement in Córdoba Schw. Dr. Elena Lugo mit Schw Maria Pilar Carrere, tätig in der Mütter – und Familienarbeit in Cordoba Foto: Schelstraete © 2005 |
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ARGENTINA, Patricia Schelstraete de Aliaga. El tema de la despenalización del aborto está instalado en todos los medios de comunicación social de Argentina. Desde el Ministerio de Salud Pública de la Nación, se ha lanzado en los últimos tiempos una campaña que tiende a "facilitar" a la población métodos de anticoncepción sin costo alguno en los hospitales públicos. La rama de madres de Schoenstatt con apoyo de todo el Movimiento de Schoenstatt en Córdoba, organizó una conferencia para hacer escuchar "una voz que grita por la vida".
El próximo paso de esta "conciencia abortista" que crece avalada por organismos estatales, será la despenalización del aborto, argumentando que tal medida tiende a "evitar la muerte" de muchas mujeres que se someten a esta práctica en lugares clandestinos que no cuentan con la seguridad higiénica y profesional adecuada. Al mismo tiempo, han aparecido también numerosos grupos, entre ellos el llamado "MUJERES CATÓLICAS POR EL DERECHO A DECIDIR", que reclaman a la Iglesia que ceda en su postura en el tema de la reproducción, fundamentando su pedido en el "Derecho de la mujer sobre su propio cuerpo, sobre su vida sexual y su opción por la maternidad".
Este controvertido tema ya ha provocado a nivel gubernamental una crisis muy fuerte entre el Ministro de Salud de la Nación y el Obispo Castrense, quien fue reafirmado en su puesto por Su Santidad el Papa Benedicto XVI.
Promoción y defensa de la vida
En este marco, la Rama de Madres del Movimiento de Schoenstatt de Córdoba, apoyada por toda la Familia - especialmente por el Departamento de Comunicación del Movimiento y la Obra Familiar - organizó una conferencia debate sobre el tema: EL DERECHO A NACER, UNA DECISIÓN DE LOS HOMBRES?, dictada por la Hna Dra. Elena Lugo, especialista en bioética, miembro del Instituto Secular de las Hermanas de María, y la Prof. Patricia Ruiz Moreno, profesora universitaria de filosofía y ex legisladora de la Ciudad de Buenos Aires. El objetivo de este encuentro, que contó con la presencia de numerosos asistentes (más de trescientas personas), fue ayudar a formar opinión sobre este tema tan importante.
Las Madres, "CUSTODIAS DE LA VIDA", quieren hacer escuchar otra voz, una voz que grita a favor de la vida, a favor de los más indefensos de los más débiles. La promoción y defensa de la vida, desde el momento de la concepción, es un valor supremo, que está por encima de conceptos religiosos, filosóficos, políticos o económicos. Las madres saben que su misión es muy importante y que se les presentarán muchos escollos en el camino, pero ya están en movimiento, actuando por vocación y convicción.
Trabajar a favor de la vida
El lograr que en una sociedad se respete el derecho a la vida es responsabilidad de todos en su actividad cotidiana, pues todos - con el ejemplo de su conducta, sus palabras, sus escritos, sus opiniones, su voto, la educación de sus hijos, etc. - influyen en lo que se piensa, en cómo se vive. Y en lo que se legisla. Ciertamente, un papel importante corresponde a políticos, educadores y responsables de medios de comunicación social, por la repercusión que sus palabras o sus acciones tienen en la colectividad; pero ellos, al tiempo que influyen sobre la sociedad, son influidos a su vez también por ella.
Pero junto a esta actitud general, caben muchas maneras concretas de trabajar específicamente en favor de la vida: ¿Qué puede hacer para influir en esta materia un cristiano corriente, un ciudadano normal que ni sale en la televisión, ni habla desde una cátedra o una tribuna pública?
Rogar al Señor por los legisladores y los dirigentes sociales en general, para que sepan comprender que los hijos concebidos y no nacidos son los miembros más inocentes y los más indefensos de la sociedad, y que - como ha dicho repetidamente el Papa Juan Pablo II - nunca se puede legitimar la muerte de un inocente.
No despreciar el valor moral del dolor y del sacrificio, cuyo rechazo lleva a justificar cualquier intento de acabar con lo que se cree que son sus causas, incluidos los ancianos o enfermos inútiles, los deficientes que son una carga o los nuevos hijos que pueden complicar la vida o disminuir el bienestar de la familia. Rechazar el sentido "utilitario" o "funcional" de la vida humana.
Acoger y ayudar, también económicamente, a quienes, por razón de su maternidad, se encuentran en situaciones difíciles. Especialmente a las mujeres víctimas de violación , quienes deben sumar al terrible drama que sufren, la soledad, la incomprensión, la desesperanza. La decisión de un aborto no mejora ni repara de ningún modo la situación en que se encuentran. Jamás una muerte provocada puede ser una solución. Es sumar a su dolor la tremenda herida de la culpa. Sólo la contención espiritual, material, y el cobijamiento en el amor pueden ayudar a estas víctimas a gestar a un niño no deseado, contemplando también la posibilidad de que al nacer el niño sea entregado a otros padres para su adopción.
Recibir con alegría, por duro que pueda ser, al nuevo hijo enfermo o deficiente que llegue a la familia, como una bendición de Dios. Es ejemplar el testimonio de tantas familias en este sentido.
Reaccionar positivamente ante escritos públicos o programas audiovisuales que defiendan la vida humana, y críticamente ante los que la ataquen. Ejerciendo el derecho, como ciudadano, de participar en los medios de comunicación social.
Orientar el voto hacia las alternativas políticas que merezcan más confianza por sus actitudes ante la vida en general, y ante la cuestión del aborto provocado en particular.
Informar a quienes nos rodean, con caridad, pero con firmeza y claridad, de la realidad del hijo no nacido y de la importancia de defender su derecho a vivir.
Esto sólo es algo de lo que puede hacerse en defensa de la vida, lo importante es tomar conciencia, encender una luz, aunque sea pequeña, y no dejarse vencer por la oscuridad que crece.
Una anécdota, un signo, un regalo de Dios
La ecografía que ilustra el afiche utilizado para la difusión de la conferencia, pertenece al bebé de la señora Paula Llarens de Guernica, una mamá de la Rama que participó activamente en la preparación de esta conferencia. La fecha de parto estimada de este niño era los primeros días del mes de julio, pero el Señor quiso enviarnos un hermoso signo. Agustín (así se llama el bebé), "nació el mismo día de la conferencia". Él se encuentra muy bien y ya está disfrutando de su mamá, su papá y sus tres hermanitos.