¡Por un malentendido!La Liga Apostólica de enfermos de Suiza estuvo de vacaciones en Valais |
SUIZA, Claudia Zimmermann. Alrededor de 30 personas respondieron a la invitación a pasar una semana de vacaciones espirituales en Valais. Como consecuencia de un malentendido fracasó el proyectado viaje a Schoenstatt. ¿Sería esta la oportunidad de probar la "accesibilidad para las sillas de ruedas" de la Casa Schoenstatt en Brig, recientemente restaurada? El apoyo de varios voluntarios animó a la Hna. M. Claire Lise Buschor a intentarlo. La Casa pasó exitosamente por la prueba, y las primeras vacaciones en Valais son probablemente el comienzo de una nueva tradición. "Desde luego que la Casa no es totalmente ideal para desplazarse en silla de ruedas", contó la Hna. M. Claire Lise. Por ejemplo hay un solo toilette para personas con impedimentos motores, y en algunos lugares se necesita ayuda para subir algún umbral. Pero antes de la remodelación habría sido completamente imposible que la Liga de enfermos pudiera alojarse en la Casa Schoenstatt. "Aquí ni siquiera se podía llegar a la Capilla de la casa en silla de ruedas" recordó la Hermana. Cuando se construyó el Santuario, desde el principio se cuidó que también las personas con impedimentos tuvieran la posibilidad de acceder libremente. Los huéspedes de la Liga de enfermos lo disfrutaron mucho, diariamente rezaban allí el mes de María e incluso una vez participaron de la Sta. Misa en el Santuario "Fuente de una fe viva". El resto de los días podían participar de la Sta. Misa en la Capilla de la casa. "La Liga de enfermos ha regalado el cáliz y la pequeña custodia (que está dentro del sagrario), así tienen una relación especial con el Santuario", destacó la Hna. M. Claire Lise. Grandes preocupaciones y enérgica ayudaLa Hna. M. Claire Lise junto con Myrtha Keller planearon y dirigieron esta semana de vacaciones. Entre otras preocupaciones, estaba ante todo el viaje: ¿cómo podrían llegar hasta Brig tantas personas con sus sillas de ruedas? ¡Los ómnibus del servicio público con chofer, adaptados para discapacitados, son muy caros! Finalmente un primo de la Hna. M. Claire Lise, se ofreció a tomar una semana de vacaciones y se puso a disposición para manejar el ómnibus del Hogar para discapacitados de Weesen. Con la colaboración con una empresa de ómnibus local pudieron hacer excursiones por los alrededores de Brig. Una vez fueron hasta el Simplón, donde hicieron el camino del Rosario. Corpus Christi en Törbel"Lo mejor de todo fue celebrar Corpus Christi en Törbel", dice la Hna. M. Claire Lise. Como ellos – junto con otras personas – buscaron un lugar apropiado para participar en la Sta. Misa de Corpus Christi, les dijo el párroco de Törbel: "¡Vengan con nosotros!". La Liga de enfermos pudo acceder a los asientos reservados y recibir el saludo del Párroco. Hubo procesión con cruz y banderas, con los grupos locales de tiradores... Un picnic en Mosalp, y a la tarde, la bendición con el Santísimo Sacramento. "Muchos hasta el día de hoy hablan con alegría de esto". dijo la Hna. M. Claire Lise. "Y a los lugares donde no llegamos, nos llevó el P. Ernst Schmid mediante diapositivas", continuó diciendo. A él le alegró mucho mostrar a los peregrinos la belleza de su nuevo hogar. El P. Toni Durrer los visitó también y muchos aprovecharon la posibilidad de "poner el alma en situación de vacaciones" mediante de la confesión. Un puente a la fiesta del SantuarioEn una meditación se tendieron puentes con el Santuario de la Inmaculada, en Quarten, que en septiembre celebrará sus bodas de oro. "¿Cuál es nuestro aporte a la fiesta, qué le regalamos a la Sma. Virgen?" se preguntaron los peregrinos. Y pronto lo encontraron: ellos quieren llenar el cántaro del Santuario con todos los pequeños y grandes sacrificios que diariamente les exige la enfermedad o la discapacidad. Una conferencia del Padre Niklaus Stadelmann sobre el tema de la Eucaristía, los vinculó además con la Iglesia Universal, que celebra un año especial de la Eucaristía. ¿Un nuevo turno?En el viaje de ida aún pudieron ver nieve, recordó la Hermana. El tiempo se puso cada día más hermoso y los huéspedes pudieron disfrutar del espléndido parque que rodea el Santuario. "Normalmente hacemos un cambio anual: un año tenemos jornadas de reflexión en Quarten, y al año siguiente una peregrinación a Schoenstatt. Pero esta semana de vacaciones – no planeada de antemano – les hizo tanto bien a todos, que estamos pensando de incluirla en el turno", concluyó la Hna. M. Claire Lise. |
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17.06.2005
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