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Participantes del Rosario de Hombres en el Santuario de Olinda, Recife, Brasil Participants of the Rosary of Men, in the Shrine in Olinda, Recife, Brazil Teilnehmer des Rosenkranzes der Männer im Heiligtum in Olinda, Recife, Brasilien |
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Torta de fiesta del primer aniversario del rosario de hombres en la parroquia de Cruz de Rebouças, PE Feastday cake at the first anniversary of the rosary of men at the parish in de Cruz de Rebouças, PE Festtagstorte beim ersten Jahrestag des Rosenkranzes der Männer in der Pfarrei von de Cruz de Rebouças, PE Fotos: Tabor em paginas © 2005 |
BRASIL, Carlos Alves. El Espíritu Santo se ha mostrado sumamente creativo en la Iglesia a lo largo de estos años. También el Movimiento Apostólico de Schoenstatt viene experimentando este impulso del Espíritu entre sus filas. Cuando aparentaba ser imposible acercar de nuevo a los hombres a la Iglesia, surge repentinamente un nuevo apostolado, típicamente masculino, llamado el "Rosario de Hombres". A la par de su inesperada irrupción, este apostolado crece con una velocidad impresionante en todo el Brasil. Carlos Alves, Coordinador General del Rosario de Hombres en la Arquidiócesis de Olinda/Recife, habla sobre los inicios y objetivos del Rosario de Hombres, como un nuevo brote de vida.
El Rosario de Hombres nació de una semilla muy fecunda lanzada por el Diácono João Luiz Pozzobon. Fue el 10 de septiembre de 1950, al momento de recibir él la Imagen de la Madre y Reina para llevar a las familias, los hospitales, las escuelas, las cárceles, que esta semilla comenzó a germinar.
La primera inquietud de João Luiz Pozzobon fue convertirse en un instrumento dispuesto a llevar a la Mater a todos los lugares donde le fuese posible. La forma concreta de atraer a las personas fue a través del rezo del Santo Rosario. Con esto, de alguna manera, estaba sembrando en aquel momento ya la semilla del Rosario de Hombres, tan fecundo en el Movimiento de Schoenstatt, sobre todo porque con el correr de los años, en la Campaña del Rosario, por lo general, casi se hizo una costumbre el que sólo las mujeres se acercasen a rezar el Rosario.
Ya en tiempos de Don João se había formado en torno a él un grupo de hombres que llegó a contar con un número aproximado de 100 participantes. Fue entre ellos que nació la idea de mandar hacer algunas imágenes de la Mater y llevarlas a las familias para rezar el Rosario, dando inicio así a la Campaña de la Virgen Peregrina de Schoenstatt. Es sabido también que finalmente Don João quedó solo en este grupo de hombres. Aún así, perseveró en su misión porque, iluminado por el Espíritu Santo, sabía de su responsabilidad.
Los primeros pasos
En 1996, en Maceió/AL, Jurandir de Oliveira, actual Coordinador Arquidiocesano de la Campaña de la Campaña de la Virgen Peregrina, incentivado por el Padre Miguel Lecastre, Padre de Schoenstatt portugués que trabaja en Brasil, implementó el Rosario de Hombres en esa ciudad, llegando a reunir a 60 hombres con el objetivo de rezar el Rosario. Sólo que el Rosario se rezaba quincenalmente, lo que fue desmotivando poco a poco el compromiso de los hombres; algunos debido a la distancia que los separaba del lugar. Fue así que con el tiempo, este grupo fue desapareciendo.
En 1997, por increíble que parezca, el Rosario de Hombres fue implementado en Jaboatão dos Guararapes/PE, por una mujer, que participara también del Encuentro Interestatal de este año en Igarassu, Doña Oneida, Coordinadora de la Campaña. Viendo la tarea realizada por Jurandir en Maceió, llevó esta iniciativa a su comunidad de Jaboatao, formando allí un grupo de Rosario de Hombres que hasta hoy día perdura.
Inmediatamente, el Padre José Pontes, que en aquel tiempo colaboraba con el Nordeste, comenzó con un grupo de Rosario de Hombres en el Santuario de la MTA en Olinda, los últimos martes de mes. El P. José Pontes contó con la valiosa colaboración del señor Antônio Medeiros Costa Filho, de feliz memoria (+ 13.03.2000), padre de Rodrigo, seminarista de los Padres de Schoenstatt oriundo de la ciudad de Olinda.
El secreto de su fecundidad – el Santuario
Al comienzo, se rezaba una vez por mes, pero más adelante, los hombres sintieron la necesidad de reunirse semanalmente para rezar el Rosario, idea que fue apoyada unánimemente por los que participaban. Además, como veían que era una iniciativa muy fuerte, con una participación muy amplia, decidieron difundir el Rosario de Hombres en otras parroquias y comunidades, con lo que se formaron varios grupos, que hasta el día de hoy siguen funcionando.
El secreto de su fecundidad está en su vinculación al Santuario de la Madre tres veces Admirable de Schoenstatt y las gracias que los hombres reciben allí. Se trata, por tanto, de un apostolado "cristocéntrico" pero precedido por Mater, como gran intercesora. De allí que los frutos surgen con una rapidez impresionante. Como el mismo Don João decía, la Mater tiene prisa, una prisa tan grande que sus hijos no logran seguirle el paso.
Este grupo creció y es cada vez más fuerte. Este crecimiento se debe, en gran parte, al apoyo que el apostolado del Rosario de Hombres ha recibido por parte de los Padres de Schoenstatt. Pero se debe también a la aprobación y el incentivo, en la arquidiócesis de Olinda/Recife, del Arzobispo, Monseñor José Cardoso Sobrinho, al igual que del Obispo Auxiliar, Monseñor Antônio Fernando Saburido, junto con Obispos de las otras diócesis donde han surgido grupos de Rosario de Hombres, como por ejemplo en Caruaru, João Pessoa, Fortaleza, Alto do Sertão y Salgueiro, entre otras.
Este apoyo ha sido muy importante, al igual que las palabras de aliento y la bendición impartida recientemente por Monseñor José Ivo Lorscheiter, Obispo Emérito de Santa Maria/RS, durante la celebración del Congreso realizado con motivo del Centenario de João Luiz Pozzobon en septiembre del año pasado. Asimismo, recibieron el apoyo del actual Obispo diocesano de Santa María, Monseñor Hélio Rubert, y del Padre Marcelo Rossi, con quien se reunieron en San Pablo, camino de regreso del Congreso de Don João, que quedó encantado con la dimensión de este maravilloso movimiento, al que quiso conocer más a fondo.
Desbordados por la participación
Pero, por sobre todo, es importante que los grupos de Rosario de Hombres cuenten con el apoyo de los párrocos, dado que este apostolado se caracteriza por su obediencia a la jerarquía de la Iglesia, capaz de hacerlo cada vez más fecundo.
Para ello, en Olinda/Recife existe una Coordinación Diocesana, cuya tarea es dirigir, orientar y velar por el raudo crecimiento de los grupos de Rosario de Hombres, a la vez que cuidar del número de participantes para que este apostolado no se desvirtúe a raíz del ritmo veloz de crecimiento. Se percibe la necesidad de que el Rosario de Hombres sea cada vez más un apostolado organizado y ordenado. En la actualidad, se hallan registrados oficialmente 126 grupos de Rosario de Hombres, extendidos principalmente en el Nordeste, aunque también en otros Estados del Brasil. En Fortaleza/CE, el Rosario de Hombres está creciendo con gran intensidad, al igual que en Teresina/PI, en Pernambuco y en Alto Sertão. Cuentan hoy con cerca de 13.000 hombres que rezan semanalmente el rosario.
Por eso mismo, se reconocen desbordados en su capacidad de acompañar a este número de personas como haría falta realmente, concientes al mismo tiempo de que la cifra irá en aumento, por lo que se esfuerzan en hacer más eficiente el acompañamiento de los grupos que, cada día que pasa, crecen en todas partes.
Estas estadísticas pertenecen a todo el país, aunque la mayoría - el 90 % aproximadamente – proviene del Nordeste. Entretanto, hay grandes expectativas de que el Rosario de Hombres crezca también en el sur, el este y el oeste del Brasil, especialmente después de haber conversado con gente de todo el país en el Congreso del Centenario de João Luiz Pozzobon, en Santa Maria, donde tuvieron oportunidad de presentar el Rosario de Hombres y distribuir folletos informativos y fichas de inscripción, no sólo entre los participantes brasileros sino también entre los de otros países.
Fueron muchas las personas que se mostraron interesadas, destacándose fundamentalmente las autoridades eclesiásticas presentes, que percibieron la importancia de este apostolado, manifestando su deseo de incorporarlo en sus regiones o sus países.
En octubre de 2004 tomaron parte también de la Asamblea Pastoral Arquidiocesana de Olinda/Recife, donde, para alegría suya, el Rosario de Hombres fue incluido en el tercer Objetivo Operativo, que es la Palabra, la Liturgia y la Caridad. Por tanto, el Rosario de Hombres pasó a ser en esta arquidiócesis un camino oficial y operativo para llevar la Palabra al pueblo y a las comunidades.
Por otro lado, sienten la necesidad de unirse cada vez más. Está agendado ya el "Primer Encuentro Nacional del Grupo de Oración del Rosario de Hombres" de Brasil, a realizarse en el Estadio Deportivo de Recife, Geraldão, el día 29 de mayo de 2005. Este Estadio cuenta con una capacidad para 15.000 personas. "Estamos seguros", afirman los organizadores, "de que lograremos llenarlo, demostrando así la fuerza del apostolado del Rosario de Hombres".
Objetivo del Rosario de Hombres
El objetivo es precisamente hacer florecer y fructificar aquella semilla que fuera sembrada por el Diácono João Luiz Pozzobon, vale decir, una participación activa en la Nueva Evangelización, misión que tiene el Santuario de Olinda/Recife. Los hombres no sólo se comprometen a rezar el rosario sino también a promover un cambio de vida y una transformación del ambiente en el que viven y trabajan.
Mediante el uso de la camisa del Rosario de Hombres, cada uno es invitado a velar, fundamentalmente, por la familia y la comunidad, incentivado a cultivar la fraternidad, haciéndose hermano de todos. Con enorme felicidad, pueden afirmar que lo han logrado, principalmente llevando la Palabra, dado que el rezo del rosario lleva incorporado siempre la proclamación de la Palabra de Dios, especialmente del Evangelio. De allí que son portadores, realmente, de la Palabra y de la comunión fraterna, con una participación plenamente activa en todas las reuniones de hombres.
Casos concretos de transformación
Hay muchos ejemplos concretos de transformación entre los hombres que participan del Rosario, personas que han cambiado totalmente su actitud de vida. He aquí algunos testimonios transmitidos durante las reuniones del rezo del rosario:
Había una familia en que la señora rezaba diariamente el rosario, a lo que su marido no le daba la menor importancia, no tenía en cuenta para nada ni respetaba a su mujer. Este señor poseía una combi, que en cierta oportunidad fue contratada para llevar a un grupo de hombres al Santuario para participar del Rosario de Hombres. Este pasó a buscar a los hombres y se quedó afuera esperando que terminase el Rosario para llevarlos de vuelta, pero podía escuchar el rezo del rosario a través del altoparlante. Así, sin querer, no le quedó otra que participar del Rosario. A partir de ese día, este señor pasó a ser un miembro activo del Rosario. Se reconcilió con su familia y hoy trae a los hombres en su combi, sin cobrar nada por el viaje y participando feliz de la vida en el Rosario.
Hay otro caso, el de un señor que siempre llevaba un arma en su bolsillo. Un día, al sacar el arma, sacó también el rosario. Fue en ese momento que se cuestionó sintiendo que debía decidirse entre el rosario o el arma. Desde aquel día, dejó el arma a un lado y hoy su arma es el rosario.
Otro testimonio muy fuerte tuvo lugar en Garanhuns/PE, con un amigo, miembro del Rosario de Hombres. Venía manejando y el auto se desbarrancó por una pendiente, dando cinco vuelcos. El auto quedó prácticamente destruido. El llevaba puesto el cinturón de seguridad, por lo que logró salvarse. Al sacar la cabeza de entre los escombros que lo cubrían, lo primero que vio fue el rosario que llevaba, que tomó en sus manos. En ese momento tomó conciencia de que el rosario lo había salvado.
También había miembros que no estaban bautizados, otros que no habían tomado la primera Comunión, o que hacía años no se confesaban. A través de su participación en el Rosario, fueron asumiendo un compromiso más fuerte con la Iglesia y regularizaron su vida religiosa.
Un colega al que le realizaron un transplante de corazón se hallaba deprimido y sin esperanza alguna de sobrevivir. Era un joven de apenas 29 años de edad. Fue al Santuario y le pidió ayuda a la Mater, y aunque con pocas ganas, se sometió al transplante de corazón. Hace más de tres años desde que se lo hizo y hoy participa regularmente del Rosario de Hombres. Se encuentra en perfecto estado de salud y no sufrió rechazo alguno al nuevo órgano.
Habría muchos testimonios más para citar, pero estos son suficientes como para demostrar que el Rosario de Hombres ha logrado su objetivo en su peregrinar apostólico. En el futuro, con el correr de los meses, iremos compartiendo más sobre esta nueva iniciativa divina de gracias.
Fuente: Tabor en Paginas, Brasil, N° 39, 2004