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Santuario Original, primero minuto del Año 2005: bendición Original Shrine, first minute of the year 2005: eucharistic blessing Urheiligtum, erste Minute des Neuen Jahres: eucharistischer Segen |
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Misa del cierre del Año en el Santuario Tabor, Schoenstatt Holy Mass at the end of the year in the Tabor Shrine, Schoenstatt Messe zum Jahresschluss im Taborheiligtum, Schönstatt |
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Jovenes de Sudafrica y Estados Unidos: ¡Feliz Año Nuevo! Youth from South Africa and USA: Happy New Year! Junge Leute aus USA und Südafrika wünschen einander ein frohes Neues Jahr |
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1 de enero: Misa en la Iglesia de Peregrinos January 1: Mass in the Pilgrims’ Church Januar: Messe in der Pilgerkirche |
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Peticiones: Constanze Evers y Gregor Siml Prayers of the faithful: Constanze Evers and Grogor Siml Fürbitten: Constanze Evers und Grogor Siml |
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El pesebre en la Iglesia de Adoración se llena cada vez más de estrellas The crib in the Adoration Church with more stars each day Immer mehr Sterne finden sich an der Krippe in der Anbetungskirche |
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Ya llegaron unos 4.000 personas More than 4,000 people already participated Mindestens 4.000 Menschen waren schon da Fotos: POS Fischer © 2005 |
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Donación generosa de galletitas y chocolates Generous sponsors of cookies and chocolates Großzügige Spende des Edeka-Marktes Koblenz Foto: Brück © 2005 |
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Schoenstatt, mkf. 31 de diciembre, 23.59 hs: a lo lejos se ven fuegos artificiales y morteros, aunque menos cantidad que en otros años, cae una suave llovizna, las velas luchan contra el viento... y comienza a repicar una campana, y otra, y otra, a las que se les une la del Santuario Original, así como se unen también las oraciones de las treinta o cuarenta personas de Alemania, Estados Unidos, Polonia y Sudáfrica al repique de la campana: Que la Mater bendiga este año 2005, año de la Jornada Mundial de la Juventud, año que comienza con la cifra creciente de muertos, hora a hora, a causa del maremoto en el Océano Indico; y en ese instante se siente que el Santuario Original está lleno de gente que comienza espiritualmente el Año Nuevo en este lugar de gracias. "Que la paz del Santuario Original, con la fuerte impronta de nuestro querido Padre, se derrame hoy sobre toda la Familia y todos aquellos que tanto la necesitan en estos momentos: los países de Asia, sacudidos por el terremoto, los de África, que padecen la guerra y el hambre, la Argentina, enlutada por la muerte de tantos jóvenes que son su esperanza, y todas aquellas personas que hoy enfrentan el comienzo de un nuevo año con dolor y sufrimiento en su corazón. Que la MTA, desde el Santuario, les haga llegar muy especialmente su cercanía y cariño maternal", es la expresión de deseo llegada desde la Argentina.
Es el don precioso de la solidaridad mundial la "huella de Dios" que se encuentra en medio del tremendo horror ocasionado por el maremoto y el tsunami, comentó días pasados Mons. Elio Sgreccia, presidente de la Pontifica Academia por la Vida, en Roma. Una solidaridad mundial que despertó con la tragedia en el Sudeste asiático, pero que no debe quedarse allí sino que debe abrirse a la "desastrosa orfandad", como la denominó el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan. "Es lo que siempre me ha fascinado de Schoenstatt", dijo una señora de la Obra Familiar en Alemania al preguntar de qué manera canalizaría su ayuda el Movimiento de Schoenstatt. "Ese ver al hermano en cada hombre, ese sentirse familia, esa conciencia de contar con hermanos en el mundo entero". "Fue duro sentarnos a la mesa familiar y pensar en el horror... tomados de las manos, rezamos por las víctimas y sus familias y agradecimos profundamente el estar vivos, ¡cuánta tragedia en el mundo!", comparte Inés de Vecchi desde Coronel Dorrego, Argentina.
La Misa de cierre del año en el centro de Schoenstatt en Bamberg, Alemania, fue celebrada en memoria de las víctimas del maremoto; en la misma, el P. Martín Emge pidió a todos una generosa donación para el fondo de ayuda de emergencia en las regiones afectadas. Huellas de Dios en medio del desastre: Un presidente de Alemania que asegura a las víctimas que muchos rezan por ellos, y agrega: lo hago yo también.
En el Santuario Original, a medianoche, fue impartida la bendición con el Santísimo; se rezó especialmente por las víctimas del maremoto, por los jóvenes fallecidos y heridos a raíz del incendio en el boliche de Buenos Aires, por todos los que fallecieron y perdieron su trabajo durante el año pasado, por todos los que visitaron y visitarán el Santuario Original... Tras la breve bendición, llegó el momento de intercambiar entre todos saludos y felicitaciones por el Año Nuevo.
"Aliados – entusiasmados por Cristo, movilizando el mundo"
"Imagínate que invitas a todo el mundo a tu evento y viene todo el mundo...", comenta un joven, reparándose del frío al calor del fuego encendido frente al Santuario Tabor, donde a las 23.00 hs. dio comienzo la Misa de cierre del año, organizada por jóvenes de Schoenstatt y seminaristas de los Padres. Poco antes, tuvo lugar la ya tradicional fiesta de Nochevieja en el Centro de la Juventud Masculina. "Pensamos que nadie asistiría a la Misa", cuenta Arno Hernadi, seminarista de los Padres de Schoenstatt "Fue una enorme sorpresa ver que tantos jóvenes dejaban la fiesta para ir a Misa...". También se alarmaron un poco, aunque ya tarde: no había micrófono ni guión, tampoco sillas, cancioneros, traducción ni luces... Asimismo, asistieron también los voluntarios de la Oficina de la JMJ en Schoenstatt, un matrimonio joven de México con su hija de cuatro años, chicas que estaban de retiro y de jornada en la Casa Sonnenau, muchachos de la Juventud Masculina al cabo de su Jornada Nacional, un seminarista sudafricano de la Federación de Sacerdotes Diocesanos, a la par que numerosas personas de corazón juvenil y pelo gris... La Eucaristía fue celebrada por el Padre Helmut Müller, el P Duncan McVicar y el Padre Ludwig Güthlein. Al finalizar la misma, se encendieron bengalas saludando al nuevo año, año de la Jornada Mundial de la Juventud.
Al día siguiente, por la mañana, a las 10.30 hs, unas 300 personas se congregaron para asistir a la Misa en la Iglesia de Peregrinos, entre ellas, matrimonios de la Federación de Familias de diversos países, a punto de comenzar, al otro día, su congreso internacional. Un coro de jóvenes aportó canciones y alegres melodías juveniles de navidad, y antes de finalizar la Misa se rezó la segunda parte de la Novena de la Juventud de Schoenstatt en preparación a la Jornada Mundial de la Juventud. "Pensábamos comenzar llenos de entusiasmo y despreocupados este nuevo año, en que se daría apertura al Año de la JMJ", expresó en su prédica el Padre Lothar Penners, Director del Movimiento alemán "Y aunque nos resulta imposible ante la tragedia acontecida en Asia, tampoco por eso nos dejamos robar el entusiasmo. Que el lema de año de la Juventud Femenina – "Tocado por Cristo, en medio de todo" - sea señal e indicador de camino para todos". La Juventud Masculina, a través de su nuevo lema, quiere expresar lo mismo, aunque aún en forma más contundente: "Aliados – entusiasmados por Cristo, movilizando el mundo". El P. Penners pidió a todos rezar por las víctimas y todas las personas afectadas por la tragedia, tal como se lo hizo en las peticiones. Constanze Evers y Gregor Siml, pareja de novios a cargo de las peticiones, sintetizaron de manera muy simpática los pedidos, deseos, inquietudes y anhelos de los jóvenes en el primer día de este año.
"Iglesia repleta y todo el Monte Schoenstatt transformado en playa de estacionamiento"
En la Iglesia de la Adoración, el Año Nuevo comenzó con los Diez Minutos junto al pesebre – que dieron cierre también al año 2004. Esos dos días, únicamente, la participación fue algo menor que la usual, por ejemplo, el día domingo, en que hubo que alertar a través de un cartel: "Iglesia repleta, todo el Monte Schoenstatt transformado en playa de estacionamiento". Entre 800 y 900 personas aproximadamente colmaron por completo la Iglesia, hasta el último rincón, mientras que los parkings oficiales del Monte Schoenstatt se vieron totalmente desbordados en su capacidad. Gracias al generoso donativo del encargado de un gran supermercado en Koblenza - que obsequió una cantidad numerosa de grandes cajas con galletitas y chocolates – y las galletitas llegadas el día 4 de enero desde la ciudad de Heek en el norte de Alemania, no faltaron galletitas en los Diez Minutos junto al pesebre, aunque sí faltaron sillas en la granja!
Día a día aumenta nuevamente el número de estrellas en el pesebre, día a día se producen nuevamente encuentros con el Niño en el pesebre, encuentros personales, silenciosos, profundos... Chicos, e incluso bebes que a gatas pueden caminar, por unos instantes se transforman en María y José, a la vez que en pastores, reyes, ovejas, estrellitas... Los "pastores modernos" llegados para contemplar al Niño y a su madre vienen desde Vallendar y Koblenza, desde Bendorf y Höhr, y desde todos los pueblos vecinos a Schoenstatt, así como también desde los "lejanos" Hamburgo y Munich; y al igual que los pastores de aquel entonces en Belén, prácticamente desconocen lo sucedido en "aquel pesebre", pero vienen, y le cantan y rezan como los pastores de antaño, traen sus regalos – tristezas y preocupaciones – y a su regreso anuncian a sus vecinos y amigos que han sido testigos de algo grande, algo especial, algo divino, acontecido en sus vidas...
Sin embargo, no fueron ellos los únicos "pastores" y "reyes" que se acercaron a Schoenstatt durante estos días, hubo también una fuerte presencia de jóvenes: la Juventud Masculina llevó a cabo su Jornada Nacional, unas 30 estudiantes universitarias de la Juventud Femenina participaron de un retiro, y unas 10 secundarias estuvieron de jornada en la Casa Sonnenau. A su vez, mientras que en la Casa Marienau tuvo lugar un encuentro de la Federación de Sacerdotes Diocesanos, en Monte Moriah se llevó a cabo una jornada para candidatos del Instituto, los superiores provinciales de los Padres de Schoenstatt se reunieron en el Monte Sión, y el 3 de enero dio comienzo un congreso internacional de la Federación de Familias. Asimismo, llegó también un matrimonio de ciudad de México con su hija, dos chicas de Perú, chicas de Chile, señoras de Bolivia... ¡todo un encuentro internacional!
Un puente solidario
Una y otra vez los schoenstattianos se preguntan cómo hacer para colaborar con las víctimas en Asia. El anhelo de ayudar es inmenso, no sólo ante esta situación de emergencia, sino a través de un aporte concreto y perdurable en el tiempo. "No es mucho lo que puedo dar", comenta una señora, "pero quiero que mis pocos euros hagan una diferencia para algunos".
Como Schoenstatt carece de contactos eficientes para canalizar la asistencia en los países más afectados, se ofreció hacerlo a través del Movimiento Focolar en Tailandia. Otra posibilidad es a través de la Red Solidaria, en Argentina, que apoyará en primer lugar a la organización AFLAC (Association for Lighting a Candle) que desde 1995 trabaja por las víctimas de la guerra civil y la pobreza en Sri Lanka, mediante la compra y el envío de arroz, como primera necesidad. "Estamos decididos a colaborar en estos momentos, a la vez que seguiremos enviando aportes durante todo el año 2005, dada la magnitud de la tragedia. Para eso, actualmente estamos abocados a definir uno o dos lugares en Sri Lanka donde hay niños damnificados a fin de establecer, de esta manera, un ‘puente solidario’ que perdure en el tiempo", escribe Juan Carr, titular de la Red Solidaria, que coopera con un organismo reconocido en Sri Lanka. "Es lo que andaba buscando", dice una señora de la OF de Alemania. "Ayudar a niños, durante un largo tiempo. ¡Gracias por brindarme esta posibilidad, voy a apoyarlos todo lo que pueda!".