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 published: 2003-12-03

Al servicio de la "gran patria" sin límites que es la Iglesia

En Bogotá, Colombia, está desde hace un mes el Padre Sidney Fones como Secretario General Adjunto del CELAM

 

El Padre Sidney Fones ahora está Secretario General Adjunto de CELAM, Consejo Episcopal Latinoamericana

Father Sidney Fones is now Vice Secretary General of CELAM, Council of the Latin American Bishops' Conference

Pater Sidney Fones ist jetzt stellvertretender Generalsekretär von CELAM, dem Rat der Lateinamerikanischen Bischofskonferenz

Foto: CELAM © 2003

 

P. Sidney Fones, en Schoenstatt

Fr. Sidney Fones, in Schoenstatt

P. Sidney Fones in Schönstatt

 
 

Intercambio con el P. Michael Marmann y P. Wilfried Hagemann, Movimiento de Focolare

Discussion with Fr. Michael Marmann and Fr. Wilfried Hagemann, Focolare Movement

Im Gespräch mit P. Michael Marmann und Pfr. Wilfried Hagemann, Fokolar-Bewegung

Fotos: POS Brehm © 2003

 
 

Plazoleta en Usaquén, Bogotá

Place in Usaquén, Bogotá

Platz in Usaquén, Bogotá

Foto:Archiv

 

Fotos: © 2003

 

COLOMBIA, P. Sidney Fones/mkf. Hace casi un mes hay un nuevo Secretario General Adjunto en las oficinas centrales del Consejo Episcopal Latinoamericana (CELAM) sitas en Bogotá, Colombia. Es muy conocido tanto en Schoenstatt (Alemania) como en muchos países donde ha estado visitando a su comunidad: los Padres de Schoenstatt. Es el P. Sidney Fones. Al mencionar a Colombia, se piensa en un Movimiento de Schoenstatt naciente, y también en la violencia e inseguridad que azotan a ese país. Pero allí está la sede del CELAM, en cuyo ámbito se encuentra representado el 45% de la Iglesia universal.

El P. Sydney Fones cuenta sus experiencias en su nueva tarea al servicio a la Iglesia.

"Hace ya casi un mes que llegué a esta ciudad, a instalarme en las oficinas centrales del CELAM. Es noviembre, y en muchos países estamos celebrando el Mes de María. Es Ella quien mejor nos hace caminar por el Camino y la Vida así como se nos va dando y por donde se nos vaya dando.

Después de tantos años trabajando en el servicio interno de la comunidad, en el Movimiento, y de vivir los últimos doce en el corazón de ella en Schoenstatt, es una aventura bastante desestructurante de los modos de vida que uno ha adquirido. Aquí no tengo a nadie más de mi propia comunidad y el trabajo es enteramente en relación directa a la "gran patria" sin límites de nuestra Iglesia, aquí en Latinoamérica y el Caribe, casi el 45% de la Iglesia universal.

La tarea del Secretario General Adjunto

En estos primeros días no hubo tiempo para ocuparme de otra cosa que de lo que aquí tenía que asumir rápidamente. De a poco me voy dando cuenta lo que significa este cargo de "Secretario General Adjunto". El Secretario General es un Obispo elegido en la Asamblea General de todas las veintidós Conferencias Episcopales de nuestros países, junto con y formando parte de la Presidencia de este Consejo Episcopal Latinoamericano. Este Obispo debería tener presencia asidua aquí en Bogotá para coordinar todos los servicios que presta el CELAM y ser enlace con otras agrupaciones episcopales continentales y romanas, como también con organismos no eclesiales internacionales. La continuidad de esta presencia para servicios y enlaces la hace el "adjunto".

El "adjunto" también es co-responsable en el lugar, de los servicios que el CELAM presta a través de seis departamentos para las diversas áreas pastorales (cada uno con su sacerdote ejecutivo), tres centros de formación (cada uno con su director) y una casa editora. Además es responsable de esta casa, que es el Centro nervioso del CELAM. En conjunto esto es algo similar a una empresa mediana, de unos cien empleados. De esta manera, aquí uno tiene que velar por el espíritu, los planes y procedimientos de un pequeño mundo de personas, equipos y proyectos. Tiene algo de parecido a lo que me ha tocado hacer muchos años en la comunidad aunque, tal vez, mucho más amplio y complejo.

Preparación para un encuentro "Interamericano"

La casa es un conjunto de oficinas y lugar de residencia para los que trabajamos tanto acá como fuera de Bogotá. Fue construida hace quince años y tiene un estilo arquitectónico colonial. Lo pueden ver en www.celam.org. Bien equipada y con muy buen personal. Las habitaciones para los residentes son muy buenas: dormitorio, baño y escritorio. Un poco instaladas a la manera de un hotel... siempre hay gente de paso. El bloque de oficinas está bien distribuido con diversos grupos de secretarias y una oficina de sistemas (electrónicos), otra de personal y tesorería. Una cafetería grande donde compartimos al almuerzo con todo el personal y otra privada para el desayuno y cena de los residentes. También hay vehículos disponibles para los muchos traslados de servicio que uno tiene que hacer acá.

Estos días han sido para zambullirse en estas tareas. Dos días de trabajo con el P. Cardenal Francisco Javier Errázuriz (Presidente del CELAM) y el saliente Secretario adjunto. Dos días en Miami con los Secretarios Generales de las Conferencias Episcopales de Estados Unidos y de Canadá preparando un encuentro "interamericano" en Texas para febrero de 2004. De regreso, reuniones con equipos, revisión de construcciones, presupuestos y programas. Conociendo gente y procurando instalarme en lo que serán mis "pagos" (= mi "hogar") los próximos 4 años.

Trabajo pastoral con los pobres

Aquí en casa, somos unos doce junto con los sacerdotes de los centros. Somos de muchos países, la mayoría diocesanos y dos de institutos de vida consagrada. Yo debo ser el mayor. Hay buen ambiente fraterno. Temprano podemos rezar Laudes y celebrar la Eucaristía en común. De a poco nos vamos conociendo y enhebrando conversaciones más de fondo y personales, menos anecdóticas. Me han invitado a dos incursiones en la ciudad para conocer algo más. He salido con un boliviano-chileno para conocer los alrededores de nuestra casa que no había visto aún. Este barrio se llama Usaquén. Fue un pueblito que se tragó el desarrollo de Bogotá con sus cinco millones de habitantes. Conserva algo colonial pero se ha convertido en un barrio de moda. Proliferan a nuestro alrededor los grandes centros comerciales y restaurantes con comidas de todos partes, desde fondue suizo, pasta italiana con buenos vinos chilenos... hasta ahora sólo los que he escuchado y visto al pasar... El centro tiene hermosas partes coloniales y otras muy modernas. Por aquí cerca, sin embargo descubrí una población muy pobre y hablé con el párroco para ir a ayudar allí al menos los domingos y algunos otros días.

La violencia colombiana

¿Qué es de la violencia colombiana? Existe, sin duda. En estos días, en 24 horas mataron a dos sacerdotes en un sector del país alejado de acá. Sólo por mencionar la violencia que nos toca más de cerca. Por supuesto también civiles y personal de las fuerzas de seguridad. En los últimos tres años han matado a veinte sacerdotes y muchos más civiles y militares. Pero esto es una realidad de más de sesenta años, primero por rivalidades políticas liberales y conservadoras, luego por motivos socio-marxistas y ahora animada por el narcotráfico. La violencia ha ido cambiando de contextos y, como en todo el mundo, haciéndose más letal, pero siempre presente. Además, hay hoy bastante corrupción política. Tanta, que el Presidente Uribe llamó a un plebiscito con medidas anti-corrupción y lo perdió por la abstención provocada por falta de interés de los mismos políticos y parlamentarios. Hace pocos días más de ochocientos paramilitares (anti-guerrilla, privada, también ilegal) entregaron sus armas y están en proceso de reintegración. Pero... ¡debe haber más de doce mil! Sin duda que este nivel de violencia hace que las personas deban tomar ciertas medidas de seguridad y aquí en casa, por ejemplo, todo el que entra debe estar anunciado en la portería por quien lo haya invitado. Hasta existen aquí unos pasillos de fuga por si ocurriese un asalto... aún no he visitado estos pasillos.

Schoenstatt en Colombia

¿El Movimiento de Schoenstatt? En estos días me vino a visitar un pequeño consejo diocesano de lo que hay aquí de Schoenstatt. También fui invitado a cenar a casa de una familia de ellos. Con gusto caminaremos juntos acá sembrando y apoyando estos comienzos aunque la responsabilidad directiva la llevan un Padre desde Guayaquil y una Hna. Mariana desde Santiago, quienes hacen visitas periódicas acá. En otras ciudades colombianas también hay buenos inicios del Movimiento.

Visita a los vecinos: Ecuador

El 17 recién pasado aquí era "puente" (entre dos días feriados) de modo que decidí hacer mi primera visita a los Padres de Schoenstatt más cercanos que tengo, mis "vecinos" en el Ecuador. Quito está como a una hora y cuarto de vuelo desde aquí. Pude visitar Guayaquil, estar con el primer curso de Federación, celebrar en el Santuario, saludar a las Hermanas y "hablar" en alemán con la Hna. M. Emilia quien estuvo tanto tiempo en Schoenstatt. En Quito estuve donde los Padres, celebré Misa en el hermosísimo lugar del Santuario, Alangací, visité dos colegios que han surgido al alero de Schoenstatt, uno para niños extremamente pobres. Caminamos por el centro histórico que es un "tesoro universal." . Algo hice con la conferencia episcopal ecuatoriana y ya estoy de regreso. Fue un baño muy refrescante de Schoenstatt.

P. Sidney Fones: sfonesi@webbox.com


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Last Update: 03.12.2003 Mail: Editor /Webmaster
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