Procesión al Santuario, con la corona en las manos de Monseñor José María Arancibia, y la Auxiliar en andas. Procession to the Shrine, with the crown carried by Archbishop José María Arancibia, and the Auxiliary carried by youth. Prozession zum Heiligtum mit der Krone in der Hand von Erzbischof José María Arancibia, gefolgt von der Auxiliar auf den Schultern Jugendlicher.
Te coronamas, Reine de la Patria Nueva! We crown you, Queen of a new Argentina! Wir krönen dich, Königin eines neuen Argentinien! Fotos: Pocovi ©2003

ARGENTINA, Mendoza, Lilian y Miguel Mateu. El domingo 24 de agosto se realizó la coronación de la Mater en el Santuario en Mendoza. La Familia de Schoenstatt contó con la presencia del Arzobispo de la arquidiócesis, Monseñor José María Arancibia en su hermosa fiesta familiar. El lema: "En comunión te coronamos, María, Reina de la Patria nueva", expresó el compromiso de la Familia de Schoenstatt de trabajar por el bien común y la paz, ahondando la conciencia solidaria, en común unión con toda la grey diocesana.

"Querida Madre y Reina: Tus pequeños hijos venimos hoy a renovar la coronación que, año tras año, hacemos en este lugar. Queremos regalarte nuevamente tu corona de Reina..." Fue una procesión impresionante que se acercó al Santuario en este día soleado de coronación. Al final de los sacerdotes, y monaguillos caminó Mons. Arancibia, llevando en sus manos bien alta la corona de flores, para regalarla a la Reina de la Patria Nueva. Una corona cuyas flores eran símbolos de la esperanza para una Mendoza nueva, una Argentina nueva:

"Venimos con una profunda esperanza en un futuro mejor para nuestra Patria Argentina. Nosotros reconocemos tu reinado y anhelamos la victoria de la transformación de tu pueblo, la victoria de un sano sentido de la autoridad y de la paternidad, de la fraternidad y de la solidaridad, para construir una Iglesia nueva, una Mendoza nueva, una Argentina nueva. Venimos a proclamarte: ¡María, Reina de la Patria Nueva!"

Detrás del Arzobispo venía la Mater Auxiliar llevada en andas por los jóvenes.

Traemos las manos cansadas y ocupadas, que aún así, llevan tu corona de Reina de la Patria Nueva.

Muchos de los que participaron en esta procesión de la Reina, llevaron alimentos no perecederos para los hermanos más necesitados. Regalos para la Reina, donaciones que Cáritas distribuirá entre los pobres.

"Te traemos un corazón agobiado por las dificultades", rezaron todos, "pero, vigoroso y fortalecido en un renovado amor filial".

Traemos las manos cansadas y ocupadas, que aún así, llevan tu corona de Reina de la Patria Nueva.

Somos un pueblo mariano, que en comunión, camina hacia Cristo de tu mano de Madre y Educadora desde este Santuario: ‘Nazaret del Padre, tierra de unidad’. Educa nuestros corazones para ser sal y levadura en la Iglesia y en nuestra patria Argentina que necesita tu mirada de Madre y Mediadora.

En comunidad fraterna te pedimos que despiertes la generosidad de nuestros jóvenes, para que atraídos por Jesús e iluminados por el Espíritu Santo, regalen a la Iglesia y a la Patria abundantes vocaciones, sacerdotales, religiosas y misioneras."

En nosotros recorre nuestro tiempo

"Madre y Reina: Desciende con tu Hijo a los caminos de nuestra Patria, y en nosotros recorre nuestro tiempo. Te imploramos nos transformes en apóstoles sencillos y solidarios, filialmente cercanos a nuestro Obispo, a nuestros sacerdotes y a nuestros consagrados. Así, en comunión, formaremos la Familia del Padre que tanto esperas."

Era una multitud comprometida y alegre, que, rodeando el Santuario, expresó su gratitud y su confianza:

"En éste, tu Santuario, recibe esta corona que representa la disponibilidad de nuestro entendimiento y de nuestros bienes, al servicio del Reino de Dios en esta tierra.

María, en comunión, te coronamos: ¡Reina de la Patria Nueva! ¡Para que reines en tu Iglesia y en tu Patria Argentina!"