Santuario Original y Casa de Alianza - una unidad: oración de mañana durante la Jornada Jubilar Original Shrine and Covenant House - a unity: Morning prayer during the Jubilee Convention Urheiligtum und Bundesheim, eine Einheit: Morgengebet bei der Jubiläumstagung
Fernando Arrau, Presidente de la Fundación "Maria Reina del Trabajo": palabras de bienvenida Fernando Arrau, President of the Foundation "Maria Reina del Trabajo": welcome speech Fernando Arrau, Präsident der Stiftung "Maria Reina del Trabajo": Begrüßung
Participantes de la Jornada Jubilar Participants of the Jubilee Convention Teilnehmer der Jubiläumstagung
P. Dr. Joachim Schmiedl: historia Fr. Dr. Joachim Schmiedl: history P. Dr. Joachim Schmiedl: Blick in die Geschichte
P. Dr. Lothar Penners: desafíos para el hoy Fr. Dr. Lothar Penners: challenges for today P. Dr. Lothar Penners: Herausforderung heute
Misa festiva Festive Mass Festgottesdienst
P. Peter Wolf: sermón Fr. Peter Wolf: sermon Dr. Peter Wolf: Festpredigt
Fotos: © 2003

SCHOENSTATT, mkf. Centro de unión de la familia y de irradiación misionera, fuente de gracias junto con el Santuario Original, lugar desde el cual "en aquel tiempo" el Padre Kentenich y sus colaboradores brindaron un aporte decisivo a la Iglesia y la sociedad desde el punto de vista pedagógico, apostólico y espiritual, todo eso era el "Bundesheim", la "Casa de la Alianza", que el 15 de agosto de 2003 celebró su Jubileo. Esperamos que muy pronto lo sea nuevamente, ésa fue al menos el desafío a futuro que dejó la celebración del Jubileo, que culminó el día domingo 17 de agosto con una Misa festiva de fuerte carácter internacional en el patio central de la Casa. Ningún plan, fecha ni proyecto futuro para el uso de la Casa, pero esta celebración del Jubileo se orientó marcadamente hacia una perspectiva común, orgánica, misionera, que lleve de una herencia común a una misión común.

"Schoenstatt International e.V." y la Fundación chilena "María Reina del Trabajo" invitaron a la Familia de Schoenstatt y a todos los que se interesan por la Casa a celebrar el 75° aniversario de su bendición, un día 15 de agosto de 1928. Unos cien participantes de Alemania y schoenstattianos de Chile participaron de la Jornada Jubilar el 16 y 17 de agosto pasado, que contó con dos notables conferencias sobre el sentido de la Casa de Alianza en el pasado (P. Dr. Joachim Schmiedl) y su herencia como desafío y misión para el presente (P. Dr. Lothar Penners).

Una casa intrínsecamente ligada a la historia de Schoenstatt y a la misión del Padre Kentenich

Difícilmente otra casa en Schoenstatt esté tan intrínsecamente ligada a la historia del Movimiento de Schoenstatt como la "Casa de la Alianza", el "Bundesheim"; los primeros planes para su construcción surgieron en 1924, diez años después de la fundación de Schoenstatt, siendo bendecida el 15 de agosto de 1928.

La Jornada Jubilar comenzó el 16 de agosto de 2003 en la capilla de la casa, con una Santa Misa celebrada por el P. Gerhard Pfennig, del Instituto de Sacerdotes Diocesanos, moderador también del encuentro. La cena en el patio central de la Casa despertó recuerdos de los festejos del 31 de mayo de 1999, simultáneos a la celebración en Bellavista, Chile, a raíz del Jubileo de Oro del tercer hito, y otros eventos en que los schoenstattianos de diversos países y comunidades se reunían para compartir y disfrutar de la presencia y experiencias mutuas, en un clima cordial y festivo. Hubo tiempo para saludar y conversar con los Padres de Schoenstatt que participan del Capítulo, felicitándolos por su nuevo Superior General y Consejo, tiempo también para compartir con schoenstattianos de Puerto Rico, Chile, Argentina, Portugal… gente que hasta el momento sólo se conocía vía e-mail o por reportajes en la web de Schoenstatt, tiempo para sentarse en la misma mesa que los Superiores Generales… Tiempo de experimentarse familia, reunidos en la casa del Padre.

Desde aquí: efecto multiplicador de las conferencias del Padre Kentenich

La conferencia del Padre Joachim Schmiedl despertó el asombro de la audiencia, a menudo acompañado de risas y sonrisas, ante los testimonios sobre la decisión final para la construcción de la Casa de la Alianza – especialmente cuando dio a conocer a la audiencia que los audaces sacerdotes y laicos que apoyaron la construcción de una gran sede para el entonces pequeño Movimiento de Schoenstatt y sus (futuras) actividades apostólicas eran muy jóvenes – el Padre Kentenich, de tan sólo 42 años de edad, la Hna. Emilie, de 35, y los demás en torno a los 20 años (más jóvenes que cualquiera de los oyentes probablemente!). En los años treinta, los retiros del Padre Kentenich para sacerdotes y sus Jornadas Pedagógicas atrajeron a un tercio del clero alemán y a un gran número de laicos vinculados mayoritariamente al quehacer pedagógico.

No obstante, la Casa es también el lugar donde el Padre Kentenich unió a las diversas comunidades schoenstattianas en proyectos comunes y tareas comunes en favor de Schoenstatt.

El día finalizó con un momento de oración en la Capilla de la Casa, inspirada en la consagración de la Casa de la Alianza a la MTA el 21 de noviembre de 2003. A continuación, Fernando Arrau, en nombre de la Fundación "María Reina del Trabajo", invitó a todos a unirse a la coronación de la Mater como "Reina del 31 de Mayo", vale decir, trabajar desde esta casa y en esta casa por la misión que le fue encomendada al Padre Kentenich, para la cual él buscó y encontró aliados, que aún hoy sigue buscando y encontrando también.

La habitación en la que el Padre Kentenich vivió y trabajó durante el largo tiempo en que habitó en esta casa, cobijó en esta tarde al cuadro de la MTA que generalmente se halla en la pequeña capilla de la Adoración; la Hermana Anne-Meike y las colaboradoras del Centro de Asistencia para mujeres embarazadas que precisan ayuda, que cuentan con dos oficinas en la Casa de Alianza, decoraron magníficamente el cuadro con flores de vivos colores. Tras la oración de coronación, se encaminaron todos a la Capilla en procesión, encabezada por dos miembros de la Fundación chilena portando el cuadro.

A continuación, algunos se extendieron en amenas conversaciones…

La Casa de la Alianza y el Santuario Original

Una mañana de domingo clara y soleada congregó a los participantes dentro y en torno al Santuario Original para la oración de la mañana. El Santuario Original, tan pequeño allí en el valle, "coronado" con la inmensa Casa de la Alianza elevándose por sobre la ladera del Monte Schoenstatt, es el "porqué" de la Casa de la Alianza – y todo lo que hace Schoenstatt.

La Casa de la Alianza, en los años treinta, tuvo tanta irradiación e importancia en Alemania como

Burg Rotenfels, donde enseñó Romano Guardini, o como Maria Laach con el Abad Ildefons Herwege – vale decir que su impacto se extendió mucho más allá de Schoenstatt.

El Padre Lothar Penners, Director del Movimiento en Alemania, enumeró en su charla seis aspectos de la herencia de la Casa de la Alianza que hoy debe tornarse misión, por momentos, de un gran desafío:

La unidad entre el Santuario Original y la Casa de la Alianza
El desafío consiste en: Schoenstatt, como lugar de origen, ¿es un centro de irradiación? En comparación con otros centros schoenstattianos, como Tuparendá, Florencio Varela, Bellavista, Atibaia, ¿basta la vida que fluye en torno al Santuario Original? Esta es una pregunta para todo Schoenstatt. ¿Qué aportan los "montes" (Institutos, Federaciones y Ligas) en favor del Santuario Original?

La Casa de la Alianza simboliza la unidad familiar de Schoenstatt
Esta Casa fue un lugar donde "todas las agrupaciones schoenstattianas vivieron y trabajaron bajo el mismo techo. ¿Podría transformarse en punto de encuentro para toda la Familia de Schoenstatt, donde los miembros de las diversas comunidades puedan reunirse como familia?

Fue una Casa de Formación en vistas a la trilogía de espiritualidad, pedagogía y apostolado
La originalidad de la misión del Padre Kentenich es una pedagogía como puente entre la espiritualidad y el apostolado. Otros Movimientos de Iglesia perciben a menudo este "puente" como algo que a ellos les hace falta y le piden a Schoenstatt que comparta.

Esta Casa nos llama a ampliar los horizontes de apostolado
¿Cómo llevamos a cabo esto hoy en día?

La Casa nos llama también a trabajar en un proyecto en común
En aquel entonces fue el libro "La santidad de la vida diaria", por ejemplo, ¿qué proyectos en común tenemos actualmente en Schoenstatt?

La Casa nos llama a una estrategia de trabajo
El Padre Kentenich motivó, unió y a veces corrigió también a sus colaboradores aquí, pero sobre todo se trató de trabajar unidos y bajo una estrategia común. ¿Cuál es la estrategia de Schoenstatt a nivel internacional, a nivel europeo, a nivel alemán?

Fue un lugar donde el Padre Kentenich afirmó su punto de vista sobre temas de debate eclesiales y sociales. A esta altura de su conferencia, el Padre Penners señaló nuevamente hacia el Santuario Original, fuente de gracia y lugar de origen de Schoenstatt, interpelándonos a una visión común, general. ¿Podría llegar a ser la Casa de la Alianza un taller para una Pastoral del Santuario Original?

A continuación, siguió un trabajo en talleres – varios en alemán, uno en español - donde los participantes pudieron compartir qué los había movilizado en estos días, las oportunidades y desafíos que perciben y cómo piensan responder al legado.

Una fresca brisa

Durante el almuerzo, los participantes del encuentro Jubilar junto con un gran número de personas que se sumaron a la Misa festiva que dio cierre a la celebración, compartieron comentarios, puntos de vista, planes y mil ideas. Se hicieron presente también muchos Padres de Schoenstatt participantes del Capítulo, incluyendo los nuevos Consejeros P. Mario Romero, P. Patricio Moore, P. Ángel Strada y P. Paul Vautier, al igual que los Superiores Generales de otros Institutos y jefes de Federaciones y Ramas. Una fresca brisa desparramó las partituras de la banda musical Esperamor así como también parte del decorado de flores ¿un signo de la fresca brisa que este Jubileo soplará sobre esta antigua casa? Quedó claro que este jubileo no dará respuesta a las muchos interrogantes sobre el futuro de la casa, sino que fue más un impulso y apertura a una perspectiva más amplia en vistas al lugar de origen, y la unidad misionera de Schoenstatt como requisito para la realización, o más aún, la continuación de la tarea que el Padre Kentenich y sus aliados desarrollaron desde esta casa, antes de que el Nacional Socialismo y el Exilio del Padre Fundador pusieran fin a una etapa de fecunda labor apostólica que influyó más allá de la Iglesia y sociedad alemana.

Hablando sobre Dios – en consonancia con la vida y acontecimientos de hoy

"Fue un grupo alegre de amigos celebrando juntos una misión común y un Padre común", dijo Martina Rasch, que viajó desde Düsseldorf para participar de la Misa festiva, "fue una familia". La numerosa procesión de sacerdotes encaminándose hacia el patio central, la gran cantidad de schoenstattianos llenando todos los espacios entre las diversas alas del señero edificio, la alegre melodía y canciones aportadas por la banda Esperamor – todo ello contribuyó a la motivadora experiencia familiar y religiosa que coronó el día.

Las lecturas fueron leídas en inglés por Hilda Pagan, de Puerto Rico, y en español por Juan Eduardo Fernández, de Chile. Una pionera de Schoenstatt que llevó el Movimiento a un nuevo país, el artesano de las estatuas del Padre que en muchos países representan la presencia viva del Padre y su misión, un llamado a ser sus aliados: una proclama.

En su homilía, Monseñor Dr. Peter Wolf, Director General del Instituto de Sacerdotes Diocesanos, habló sobre la Casa de la Alianza como una Casa "de sabiduría de vida". Preguntándose por la receta del éxito de los retiros y conferencias que el Padre Kentenich dio en esta casa, expresó: "Él hablaba sobre Dios, en consonancia con los acontecimientos y la vida de hoy". Tal visión de Dios es tan necesaria hoy como hace treinta años, afirmó él. Pero para llevarla a cabo, nosotros, como aliados e instrumentos de la Mater en pos de la misión del Padre Kentenich, debemos conocer las inquietudes que tiene la gente, las tendencias y problemáticas de la época, debemos "saber de Dios", no en términos teológicos abstractos sino a partir de una experiencia personal.

Esta casa debiera ser también un centro y sede central en el sentido literal de la palabra – un lugar donde "confluyen los torrentes de montañas". A modo de ofrecimiento, de invitación, Schoenstatt precisa un punto de confluencia para las corrientes de los diversos centros schoenstattianos del mundo, que aporten sus riquezas y experiencias.

Un primer paso

La celebración jubilar puede señalar el primer paso de una nueva etapa en la historia de esta casa, dijo Fernando Arrau, Presidente de la Fundación "María Reina del Trabajo", al finalizar la Misa, expresando su deseo de que todos los corazones se enciendan este día en "el fuego del corazón de nuestro Padre y Fundador".

Antes de que la casa pueda ser utilizada, hace falta hacerle una profunda renovación.

El amor por la fuente común de gracia y el compromiso de trabajar por su misión pueden ser renovados también – fue éste el anhelo y desafío transmitido en ese día. "Vinimos aquí para celebrar una casa señera, un edificio histórico, y partimos de aquí con un nuevo compromiso de llenar el Santuario Original y todo este lugar de origen de gente, de un contagioso espíritu misionero", comentó uno de los presentes. "Tal vez sea eso lo que nuestro Padre quiere compartir y regalarnos desde esta casa".