 |
 |
Monseñor Heinrich Jansen, Obispo Auxiliar de la diócesis de Münster, con un rosario hecho en La Plata, Argentina Auxiliary Bishop Heinrich Jansen, Münster, with a rosary made in La Plata, Argentina Weihbischof Heinrich Jansen, Münster, mit einem Rosenkranz aus La Plata, Argentinien |
|
 |
|
Jennifer Kempen, Gabriele Sudermann, Mons. Jansen, Inge Cleven, Monika Hillebrand (de izq.): unidos en el amor por el rosario Jennifer Kempen, Gabriele Sudermann, Bishop Jansen, Inge Cleven, Monika Hillebrand (from left): united in the love for the rosary Jennifer Kempen, Gabriele Sudermann, Weihbischof Jansen, Inge Cleven, Monika Hillebrand (v. links): sie verbindet die Liebe zum Rosenkranz |
|
 |
|
En la tumba de Carlos Leisner, en Xanten, el sede del Obispo Auxiliar Prayer at the tomb of Charles Leisner, in Xanten, seat of the Auxiliary Bishop Gebet am Grab von Karl Leisner in Xanten, dem Sitz des Weihbischofs Fotos: Rasch © 2003 |
|
|
ALEMANIA, Jennifer Kempen. Las señoras que están sentadas en torno a la mesa perciben claramente el entusiasmo de Monseñor Heinrich Janssen cuando se habla del Rosario. Y como ellas comparten este entusiasmo, pronto se genera un interesante y ágil diálogo. Intercambian algunas vivencias acerca del rezo del Rosario y surge un vínculo tan cordial que no podría "prefabricarse" adrede. Las señoras experimentan lo que el Obispo les cuenta sobre la historia del Rosario: "¡El Rosario une profundamente a los católicos!"
Esto comenzó así: el lunes 30 de junio de 2003, a las 17.15 hs se encontraron, delante de la Catedral de Xanten (sede del Obispo Auxiliar), Martina Rasch, Gabriele Sudermann, Inge Cleven, Monika Hillebrand y Jennifer Kempen de la comunidad de mujeres profesionales de la región norte de Alemania. Su destino es la oficina de Monseñor Janssen, que está ubicada cerca de la Catedral. Todavía hay un poco de nerviosismo: "¿No nos olvidamos de nada?". Cinco pares de ojos van desde la Virgen Peregrina hacia unas fotos y artículos de Internet. Último acuerdo: "¿Quién cuenta qué?" Ya se puede comenzar. La puerta se abre, las visitantes son recibidas amablemente por la secretaria: "Contraseña: Rosario argentino", dice riendo y saluda a cada una. Con esto se rompió el hielo, y al entrar la sala de recibir, rápidamente sacaron los tesoros de sus carteras. Luego entró sonriendo en la sala Mons. Janssen.
Relación entre Internet y el Rosario
Gabriele Sudermann presentó rápidamente al grupò y explicó el motivo de la visita. Las mujeres profesionales sabían que el Obispo colecciona Rosarios y querían regalarle uno muy especial, que en la comunidad tiene un gran significado. El Obispo escuchaba atentamente. Entonces ellas le contaron "su" historia del Rosario: hace más o menos dos años se enteraron, por Internet, de una forma de rezar el Rosario en la Argentina que enseguida captó el entusiasmo de ellas, porque ahí se encontraban expresados en una manera muy gráfica y a la vez concreta sus propios ideales. En esta forma de rezar el Rosario, llamado Rosario de Luces y rosas, o Rosario Iluminado: se colocan velitas en forma de Rosario y luego, con cada Avemaría se van encendiendo de a una y colocando al lado una rosa para la Virgen. Se trata de rezar profundamente su propia vida, con sus gozos y sus dolores unidos a los misterios del Rosario.
¡Rezar, vivir y ofrecer el Rosario!
Esta oración se convirtió rápidamente en una "tradición" para las mujeres profesionales del círculo del norte. Experimentaron que el Rosario Iluminado es una forma intensa de rezar por otros, porque a cada Avemaría se une un pedido concreto, que es mencionado en voz alta por la persona que reza esa Avemaría. Experimentaron que el Rosario Iluminado es una oración apostólica y también un medio para difundir esta devoción. En los dos años pasados el Rosario de Luces fue rezado en muchos lugares de Alemania, incluso en algunas Parroquias. Muchos agradecieron la profunda atmósfera religiosa que reinó durante la oración.
Un rosario une a la Argentina con Alemania
El Obispo escuchó atentamente, hizo algunas preguntas y contó algunas de sus propias experiencias con el Rosario. Martina Rasch le regaló al Obispo un rosario artesanal, hecho en la Argentina. En realidad un rosario muy sencillo, porque no está hecho con cuentas de madera, sino con una única cuerda con nudos de macramé. "Estos rosarios", cuenta Martina Rasch, "se unieron a nuestro Rosario Iluminado. Los hacen personalmente un matrimonio argentino de la Campaña del Rosario de la Virgen Peregrina, Héctor y Raquel Antonioli, y son regalados a los enfermos y a los presos. Nosotras apoyamos este apostolado: algunos de estos rosarios los vendemos o regalamos en Alemania. Solo así es posible que este matrimonio argentino pueda regalar los rosarios a los que tanto los necesitan en su país. Ellos, mientras hacen cada rosario, lo van rezando por aquella persona que lo recibirá. Sin nuestra ayuda esto no sería posible, ya que la economía en la Argentina todavía está en crisis, y como les ha sucedido a muchos otros, el marido no tiene trabajo". Las mujeres profesionales desde mediados del año pasado, han repartido entre la gente alrededor de mil seiscientos rosarios – todos hechos por este matrimonio y sus hijas – y así han estimulado esta devoción.
Oración ante la tumba de Karl Leisner
El obispo se alegró por el regalo y prometió agregarlo a su colección. Tiene cerca de cuatrocientos Rosarios, desde algunos muy valiosos hasta otros muy sencillos como uno recibido de un campo de concentración en Camboya. Le pareció bien que sigan recibiendo los rosarios de la Argentina y que no los hicieran ellas aquí. "Pero el Monseñor Jansen no entendió porque llegan por correo," contó Gabriele Sudermann mientras reía, "¡cómo vienen tantos Obispos argentinos a Alemania!"
¡Qué pena!, dijo aún: hace apenas un mes terminé un libro sobre el Rosario, en el que hubiera incluido con gusto el Rosario de Luces. "Razón suficiente para escribir un segundo libro" dijo una de las visitantes y el obispo asintió sonriendo.
Entre tanto había pasado una hora... Las mujeres agradecieron el interés del Obispo y le prometieron rezar por él. Seguidamente fueron a rezar ante la tumba de Karl Leisner en la cripta de la Catedral de Xanten. ¡Y con toda seguridad Mons. Janssen será mencionado en un Avemaría del próximo Rosario de Luces!