Ella es la Madre y Aliada, la que camina a nuestro lado a lo largo de todo el día...Contribución a la "Mesa Redonda": ¿Qué significa María para su Movimiento? |
ROMA, P. Alberto Eronti. En la "mesa redonda" del 29 de abril, cuatro Movimientos dicen algo de lo que María significa para ellos. No era fácil "condensar" esto en cinco minutos. En representación de Schoenstatt, el Padre Alberto Eronti, Roma, presenta la siguiente contribución. Nuestro Movimiento nace y vive en torno a la Santísima Virgen y nuestra misión es hacerla presente en el mundo. Ella aceptó descender y establecerse en el Santuario de Schoenstatt el 18 de octubre de 1914 y desde ahí derramar sus gracias. Ella escuchó maternalmente la solicitud del Padre José Kentenich y de los jóvenes que querían hacer del Santuario un "Tabor de las Glorias de María", para colaborar en la renovación del mundo en Cristo. Ella les hizo comprender en sus corazones que se trataba de una Alianza de Amor: "No se preocupen de la realización de sus deseos, amo a los que me aman, pruébenme su amor y yo me estableceré aquí". Y le respondieron a María: "Madre, nada sin ti, nada sin nosotros". Desde entonces y a lo largo de los años es lo que experimentamos en nuestras vidas. La Santísima Virgen se manifiesta en el Santuario de origen y en todos los Santuarios de Schoenstatt en el mundo, como la que "acoge" maternalmente a cada hijo peregrino que llega a su Casa, la educadora que despierta los anhelos de "transformación" de los corazones y la que los "envía" a ser testigos de Cristo, viviendo la santidad cotidiana en el mundo. Ella es la Madre y Aliada, la que camina a nuestro lado a lo largo de todo el día. La que nos educa y transforma en instrumentos de amor en sus manos. La Compañera de todos los instantes de la vida, ya que nada nuestro es ajeno a su amor. Ella, en su misterio de Inmaculada, nos regala la visión del hombre y del mundo que anunciamos. Creemos que Ella realiza la "Humanidad nueva" iniciada en Cristo, la que con su poder de Madre, Educadora y Aliada ""vence las herejías antropológicas", despierta en el hombre lo más noble, permitiéndole vivir en unidad lo humano y lo divino. Ella es la Madre que nos hace experimentar a la Iglesia como familia. Ella nos enseña que la Iglesia es servidora de todos los hombres y de cada hombre. Ella es la Reina de los Apóstoles, Reina de la Iglesia Misionera llamada a ser alma del mundo y creadora de historia. Esta es la misión de María para el tiempo actual y, como aliados, queremos colaborar con Ella. Por eso nuestro Fundador nos decía: "Sean María", "Sean pequeñas María" y ya que el amor asemeja, rezamos así: ¡Madre! |
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Last Update: 29.04.2003
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