One of the many groups of the Schoenstatt Boys' Youth present at "Schoenstatt Youth Milwaukee02" - Father Kentenich in the center: in the photo, and in the hearts. Eine vielen Gruppen der Mannesjugend beim Internationalen Jugendtreffen "Milwaukee02" - in der Mitte Pater Kentenich, im Foto und in den Herzen.

At Lake Michigan: because Father Kentenich went there so often with his visitors Am Michigan-See, wo Pater Kentenich oft mit seinen Besuchern war

Standing where he stood... Stehen, wo er gestanden hat

German Boys' Youth Deutsche Mannesjugend

Presentation: giving and receiving Präsentation: gegenseitiges Bereichern

Experiencing community Gemeinschaftserlebnis Fotos: Garnham © 2002

It was also a special experience for the US American Schoenstatt family, Auch für die amerikanische Schönstattfamilie war es ein besonderes Erlebnis

Fotos: Welser © 2002

EEUU, Margaret Fenelon. Mirando hacia atrás a lo que fue el Encuentro Milwaukee02 de la Juventud de Schoenstatt, representantes de los Estados Unidos están muy agradecidos "porque ahora sabemos que hay casi 500 jóvenes schoenstatteanos alrededor del mundo que pueden comprender y compartir el regalo que recibimos aquí en la tierra del exilio."

Tengo aquí una pequeña caja de plástico que nuestra familia llama la "Caja de recuerdos de Milwaukee02." Hay recortes de periódicos, un boletín de prensa, algunas notas misceláneas de los encuentros, las tarjetas de identificación de mi esposo y mías, un par de programas, menús de las comidas, algunas hojas de papel membreteado y hasta un adorno del luau hawaiano.

Mi esposo Mark y yo, fuimos los encargados del comité de las relaciones públicas y de marketing para el Encuentro de Juventud Milwaukee´02. Nosotros y nuestros cuatro hijos, fuimos bendecidos con el privilegio de participar en un evento que cambió nuestras vidas y hasta me atrevo a decir, la vida de cerca de 500 jóvenes de 16 países que asistieron.

Conociendo al Padre Kentenich en Milwaukee

El propósito del encuentro de cinco días era dar a la juventud de Schoenstatt en el mundo una oportunidad para conocer de una forma más íntima a nuestro Padre y Fundador en su etapa del exilio. Por medio de una peregrinación a pie al Santuario del Exilio, talleres sobre los héroes de Schoenstatt, una representación teatral sobre la vida del Padre Kentenich, charlas con la gente que personalmente conoció al Padre Kentenich en Milwaukee, un picnic en el Parque Grant, una peregrinación al Santuario de Madison, y mucho más, este grupo de jóvenes entre 16 y 27 años, vino a conocer una parte de su fundador que no habían conocido antes.

Uno de los jóvenes dijo, "En Chile, dicen que no se hable sobre el exilio, porque fue un tiempo tan triste. Pero, ahora me doy cuenta que no fue un momento triste, fue un momento de alegría lleno de bendiciones de la paternidad del Padre Kentenich."

Celebrando el amor y el deseo de conocer al Padre Kentenich profundamente y compartir su misión

Los jóvenes no vinieron sólo a ganar sino también a dar. Ellos intercambiaron sus ideas y sentimientos sobre Schoenstatt en sus discusiones, cantaron juntos, rieron juntos, lloraron juntos, y compartieron su herencia cultural en presentaciones muy hermosas y llenas de vida. Desde el 17 al 21 de Julio, este grupo internacional celebró su amor y su deseo para conocer profundamente al Padre Kentenich. Al mismo tiempo, se prepararon a esparcir su amor y conocimiento a los otros católicos en la Jornada Mundial de la Juventud en Toronto.

"Todos vimos al Padre Kentenich desde una nueva perspectiva"

El día que se fueron, contemplé con lágrimas en los ojos como todos esos buses llenos de jóvenes partían a Canadá desde el Centro Internacional de Schoenstatt en Waukesha. Lloré tanto de alegría como de tristeza. De tristeza porque me había reencontrado con viejos amigos y conocido maravillosos nuevos amigos que quizá nunca más vería. Un pedazo de mi corazón se iba con esos buses. Aún así, estaba llena de alegría porque estaba muy alegre por haber experimentado algo increíble, algo maravilloso, aquí en Milwaukee. Todos habíamos visto al Padre Kentenich desde una nueva luz a través de los ojos de la Juventud de Schoenstatt del mundo.

Cada vez que vuelvo a hurgar en la caja de recuerdos, me viene ese mismo sentimiento mezcla de alegría y tristeza. Una sonrisa se dibuja en mi rostro, porque sé que hay más de 500 jóvenes de Schoenstatt alrededor del mundo que pueden comprender y compartir el regalo que hemos recibido en esta tierra del exilio.

Traducción: Angie Santos, Guayaquil, Ecuador