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Piece of the
Berlin Wall, erected on the Joseph Kentenich Farm, the Center of the
Federation of Families
Stück der Berliner Mauer, errichtet auf dem Josef-Kentenich-Hof,
dem Zentrum des Familienbundes |
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Renate Martin
during her speech before the red rose, sign of the love that is stronger,
was planted
Renate Martin bei den Worten vor dem Pflanzen der roten Rosen,
Zeichen der stärkeren Liebe |
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Renewal of
the Covenant of Love for our People
Erneuerung des Liebesbündnisses für unser Volk |
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A joyful get-together
and sharing with coffee and cake
Froher Ausklang des Festes bei Kaffee und Kuchen |
Fotos: POS,
Fischer © 2002 |
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SCHOENSTATT,mkf. Como testimonio de libertad y solidaridad, rememorando
los esfuerzos de la generación que se negó a la separación
de la Federación Alemana al dividirse el país en Alemania
Occidental y Alemania Oriental, se erigió un pedazo del muro de
Berlín en la Granja José Kentenich, el Centro de la Federación
de Familias. Los trozos del muro de Berlín esparcidos por varios
lugares de Alemania, como también en Fátima y los jardines
de las Naciones Unidas en New York, son "signos de victoria de la libertad
y de la solidaridad", o en términos schoenstattianos, signos de
derrumbe de herencias mecanicistas y un crecimiento de vida orgánico.
Sólo algunas ondulaciones demasiado simétricas para ser
parte de la naturaleza perduran aún como recuerdo del antiguo anfiteatro
que se encontraba en Schoenstatt, devuelto a su estado original, cubierto
de maleza. Poco después de la caída del muro de Berlín
en 1989, un pedazo de este muro fue emplazado en este sitio, donde el
Movimiento de Schoenstatt alemán selló la "Alianza de Amor
por todo nuestro pueblo" en 1984 y donde tuvo lugar la celebración
del Centenario del Padre Kentenich en 1985. La Federación de Matrimonios
se ha hecho cargo de este monumento histórico, y en presencia de
los miembros del Consejo Nacional, erigió solemnemente el pedazo
del muro en su Centro, el 26 de mayo de 2002, día de su Peregrinación
Anual y Fiesta de la Santísima Trinidad.
Plantando la rosa roja
Fue como un guiño del cielo: de pronto, en plena claridad, el
sol resplandeció, justo cuando en los tramos finales de la ceremonia
plantaron y echaron agua a la rosa roja - rosa destinada a crecer hasta
ir cubriendo poco a poco el muro de cemento gris con flores rojas - y
como telón de fondo, los versos que hablan sobre la libertad en
el Cántico al Terruño, entonados por los matrimonios de
la Federación que llegaron de todas partes de Alemania para participar
de este día de peregrinación. Antes de plantar la rosa,
Renate Martin recordó a tantas personas que encontraron la muerte
junto al muro de Berlín, tal vez junto a este pedazo inclusive.
Durante la celebración, los paraguas multicolores se abrían
y cerraban al compás del clima que rápidamente pasaba del
sol al chaparrón. Los jefes regionales de la zona Este de la Federación
alemana, el matrimonio Jäger, estuvieron a cargo de la celebración,
marcada por un clima de profunda y sincera gratitud por y hacia aquellos
que experimentaron los dolorosos años de una Alemania dividida
en dos, y los esfuerzos de solidaridad puestos de manifiesto por la
Federación de Familias y todo el Movimiento de Schoenstatt.
Al comienzo de la ceremonia, los jefes de la Federación, Norbert
and Renate Martin, dieron la bienvenida a los miembros del Consejo Nacional
allí presentes, a los representantes de la Liga de Matrimonios
y de la Oficina de Prensa. Norbert Martin explicó el significado
de la colocación de un símbolo de odio, separación
y dolor, convertido en un signo de victoria de la libertad. El pedazo
de muro llevará una placa con un texto del Padre Kentenich donde
habla de Schoenstatt como un Movimiento de y para la libertad. "Al recordar
el muro de Berlín, los muros levantados entre pueblos, entre unos
y otros, dentro de la propia matrimonio: falta de libertad, dureza de
corazón! La respuesta: un lazo profundo de amor en las matrimonios,
el país, el mundo, y como fruto del Espíritu Santo: la verdadera
libertad". automatizado
Testimonios de coraje, esperanza y fidelidad
"Duc in altum" - El amor es más fuerte, lema de la celebración
y de toda la Jornada, pudo percibirse claramente en los testimonios de
Gerhard Haasler, de Erfurt, y Käthe Becker, de Hillscheid, quienes
desde ambos lados del muro hicieron lo imposible por mantener unida la
Federación del Este y del Oeste.
Gerhard Haasler trazó una breve síntesis de las circunstancias
históricas, económicas y políticas que llevaron a
la rebelión de los trabajadores y su represión el 17 de
junio de 1953, de los acontecimientos que derivaron en la construcción
del muro de Berlín y las funestas torres de control limítrofe
con dispositivos automáticos de disparo
– apuntando al Este, no hacia invasores del Oeste sino hacia aquellos
que querían abandonar el Paraíso Comunista. Recordó
también el otoño de 1989, aquel 18 de octubre en que Erich
Honecker fue derrocado, y ese 9 de noviembre en que el muro de Berlín
dejó de dividir a las dos Alemanias. Pocos días después
de la construcción del muro de Berlín, finalizó diciendo,
en Friedrichroda, en el Santuario "Triunfo de la MTA", el 21 de agosto
de 1961 el primer curso de Alemania del Este y tercero de Alemania selló
su primera consagración, prometiendo fidelidad a la Iglesia, al
Santuario, al Padre Fundador (que estaba en el exilio), a la Federación.
Käthe Becker contó que desde el Día de los Católicos
celebrado en Colonia, en 1956, entró en contacto con matrimonios
de Alemania del Este - en ese entonces hasta cierto punto se podía
viajar todavía del Este al Oeste. "Teníamos dos países
separados, pero la Federación no iba a separarse", expresó.
Los matrimonios de Alemania del Este tenían un "co-matrimonio"
en Alemania Occidental, y, bajo riesgo de arresto o encarcelamiento, los
Asistentes de la Federación - Padres y Hermanas - y los matrimonios
dirigentes viajaron a Alemania del Este para visitar a sus "primos" llevándoles
noticias, apoyo, material, medallas y algunas cositas que faltaban, desde
café hasta picaportes, desde Schoenstatt, contándoles cómo
se iba desarrollando la vida en el Oeste, cómo se vivían
los ideales de la Federación en la vida diaria, escuchándolos.
Desde 1980, Käthe Becker viajó tres o cuatro veces por año
a la República Democrática de Alemania, participando en
los retiros de matrimonios. Contó algunas aventuras sobre controles
de frontera, notas escondidas bajo el vestido, formularios de ingreso,
y planillas meticulosamente completas con descripción detallada
de cada uno de los artículos ingresados. Cuando los matrimonios
del Este quisieron donar una corona, réplica exacta de la corona
ofrecida a la MTA por los matrimonios del Oeste, las piezas imposibles
de fabricar en Alemania Oriental llegaron con Käthe Becker - como
un collar con numerosos colgantes de un diseño sumamente interesante!
La Virgen, añadió, había protegido siempre los emprendimientos
riesgosos cuyo objetivo era mantenerse unidos espiritual y humanamente.
"Recuerdo estos años con enorme gratitud", comentó ella.
"Vivimos la caída del muro de Berlín en 1989 con una emoción
especial, pensando en nuestros matrimonios que finalmente tenían
la libertad de venir aquí. Es verdad, los muros caen cuando el
amor es más fuerte".
Renovando la "Alianza de Amor por nuestro pueblo"
En la oración posterior junto al Santuario, todos renovaron la
"Alianza de Amor por nuestro pueblo" con el texto completo de 1984. "Estamos
convencidos de que esta Alianza por nuestro pueblo fue decisiva para la
caída del muro de Berlín cinco años más tarde",
afirmaron los matrimonios. Reinó una atmósfera especial
durante esos minutos en que rezaron las oraciones de 1984 en una Alemania
completamente distinta, ¿quién se hubiese atrevido a creer en 1984
que algo literalmente duro como piedra, la división de Alemania,
se derrumbaría a los cinco años? ¿Cuántos "muros"
caerían si creyésemos en milagros? Dijo Renate Martin en
su saludo final: "En 1999, durante el Jubileo de Oro del 31 de Mayo celebrado
en Bellavista, Chile, el Padre Guillermo Carmona expresó en su
conferencia: 'En 1989 escuchamos con estupor la noticia de la caída
del muro de Berlín. A los pocos días fue arrasado y reducido
a pedacitos, que se repartieron como testimonio de una gran victoria de
la libertad y de la solidaridad de los hombres. Cada vez que caen muros
de Berlín, es preciso que nosotros, los schoenstattianos, lo
sepamos aplaudir'. Hoy colocamos aquí un pedazo de este muro roto
como emblema de libertad, como un monumento contra el pensar mecanicista
y a favor de un vivir, amar y pensar orgánico. No sólo tiene
significado para nosotros aquí en Alemania sino también
para nuestra comunidad internacional, como lo demuestran los ecos llegados
de otros países".
Finalizada la celebración, todos compartieron café y tortas;
el evento al aire libre finalizó abruptamente a causa de una lluvia
torrencial que obligó a todos los miembros de la Federación
- salvo algunos "resistentes al agua" - a refugiarse en la casa, donde
luego se agruparon en pequeños círculos de conversación,
con jarros de café y torta en sus manos, literalmente por todos
los rincones!
A partir de hoy, el Centro de la Federación de Matrimonios, la
Granja José Kentenich, tiene un nuevo foco de atracción
para quienes llegan allí de visita desde lejos y desde cerca -
un documento histórico de Alemania y de Schoenstatt.
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