Schönstatt - Begegnungen

Una corona de rosas vivas por la paz del mundo

Rosario encendido rezado por el Movimiento de Schoenstatt en la Iglesia Santa Catalina de Siena, Buenos Aires

Illuminatd rosary in the St. Catherine's Cathedral, Buenos Aires: each candle a sign of the faith in Christ's and Mary's love
Jede Kerze ein Zeichen des Glaubens an die Liebe von Jesus und Maria
Children as attentive participants: they understood the message of candles, roses, and common prayer
Aufmerksam dabei: Kinder verstehen die Sprache von Kerzen, Rosen, gemeinsamem Beten
With each Hail Mary prayed, the "living crown of roses" grew
Mit jedem Ave Maria wuchs die "lebendige Krone von Rosen"
Also the youngest particants joined in the prayer of the rosary
Auch die Jüngsten beteten den Rosenkranz mit
Foto: Badano© 2001

(Ana y Guillermo Echevarría) El jueves 1° de noviembre, en la Iglesia Santa Catalina de Siena, Buenos Aires, Argentina, tuvo lugar una jornada de oración por la paz del mundo convocada por la Comisión Arquidiocesana de Espiritualidad y los movimientos y asociaciones que la integran. Después de la Santa Misa celebrada por el Padre Guillermo Carmona, Director del Movimiento en Argentina y Asesor nacional de la Campaña del Rosario de la Virgen Peregrina, sus misioneros ofrecieron como corona a Jesús y María, un "rosario encendido" rezado en Adoración por toda la Familia diocesana y representantes de diferentes Movimientos de la Iglesia.

Participaron varios Movimientos, entre ellos los Focolares, Legión de María, Movimiento Familiar Cristiano, Cursillos de Cristiandad, Soledad Mariana, Kerigma, Encuentros Matrimoniales, Talleres de Oración y Vida, Asociación Puente, Apóstoles de María, Movimiento de la Palabra, Centro de Espiritualidad Santa María, Talleres de Vida Cristiana y Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús.

La Familia de Schoenstatt diocesana se hizo presente a través de sus Institutos, Federaciones y Ramas junto a las Voluntarias de María, Casa del Niño, Taller San José, Círculo Vocacional, Centro Pedagógico, Secretariado P. J. Kentenich, Círculo de Adoración de Schoenstatt, Círculo de Adoración Monte Sión, Sanatorio Mater Dei, Colegio Mater, Pro-Dirigencia, Editorial Patris, Vicepostulación J. Pozzobon, Casa María Reina, Confidentia, Campaña de los jóvenes, de los taxistas, de las familias, de los niños, de los bebes en riesgo, de los ciegos, de los hospitales y de las cárceles. También estuvieron representados el Santuario Nacional, Santuario del Centro, de Belgrano, La Plata, Villa Ballester y San Isidro.

Una respuesta al la inquietud del Santo Padre

Todos ellos se unieron para dar respuesta a la inquietud del Santo Padre, quien últimamente ha reiterado su pedido de oración. En el trasfondo resonaban las palabras del Padre Fundador en la Semana de Coronación: "Ahora que coronamos a la Santísima Virgen como Reina del mundo, ¿no nos quisiéramos proponer en adelante no rezar sólo a la Madre Tres Veces Admirable, sino a la Madre y Reina de Schoenstatt Tres Veces Admirable? ¿No quisiéramos asumir como un deber sagrado en adelante rezar todos los días el Santo Rosario como el gran medio de salvación para el tiempo actual?"... ?”... Las personas que ese día se unieron en el rezo del rosario sintieron una alegría especial de compartir también el anhelo expresado por el  Papa Juan Pablo II , que volvió a invitar a los católicos a rezar habitualmente el Santo Rosario en una carta dirigida al Cardenal Louis-Marie Bille, Arzobispo de Lyon y presidente de la Conferencia de los Obispos de Francia. Allí  invita a los fieles de todo el mundo a progresar en el conocimiento de los misterios de Cristo mediante la meditación del Rosario, haciendo que poco a poco purifique sus almas para transformarse, siguiendo a María, en discípulos auténticos del Señor y para conformar sus vidas a la Pasión y Resurrección del Salvador”.
Ese mismo día, en la tarde del 1 de noviembre, fiesta de Todos los Santos, Juan Pablo II se recogió en silencio para rezar «por las numerosas víctimas de la violencia, sobre todo de estos últimos tiempos», y en particular por quienes han dado la vida por Cristo. Por la súplica silenciosa del Papa volvieron a pasar las víctimas de los salvajes atentados del pasado 11 de septiembre contra las Torres Gemelas y el Pentágono, así como las de tantas personas que han muerto este año en situaciones dramáticas en los cuatro rincones del planeta: desde el País Vasco hasta el Ulster; desde Oriente Medio hasta Afganistán. El Papa Juan Pablo II volvió a invitar a los católicos ha rezar habitualmente el Santo Rosario en una carta dirigida al Cardenal Louis-Marie Bille, Arzobispo de Lyon y presidente de la Conferencia de los Obispos de Francia. El Papa invitó a los católicos "a progresar en el conocimiento de los misterios de Cristo mediante la meditación del Rosario, haciendo que poco a poco purifique sus almas para transformarse, siguiendo a María, en discípulos auténticos del Señor y para conformar sus vidas a la Pasión y Resurrección del Salvador".

El rosario según el Padre Kentenich: una corona de rosas vivas

La ceremonia en la Iglesia de Santa Catalina se inició explicando el sentido de lo que íbamos a hacer: "El Padre J. Kentenich -dijimos- solía hablar del Rosario como ‘una corona de rosas vivas’; una corona de amor, hecha de oración y de vida. Por eso, en la Campaña, coronamos al Santísimo y a la Virgen Peregrina con el Rosario. Es una corona muy sencilla pero de gran belleza, porque está formada por la vida de Jesús y de María entrelazada con nuestra propia vida. Como símbolo de esto, en cada Padre Nuestro y cada Avemaría, las diferentes personas que rezamos iremos depositando una rosa a los pies de Jesús y de María, junto a una vela que encenderemos".

En un ambiente de profunda devoción, personas de todas las edades se unieron para pedir por la paz. Atentos a lo que sucedía, unos treinta chicos de 6 a 8 años del Colegio Mater, sentados en el suelo a la derecha del altar, parecían captar en ese lenguaje simple de los símbolos que algo grande estaba ocurriendo. Con el rosario en la mano, seguían en silencio cada movimiento. Seguimos explicando: "Con las velas encendidas queremos representar el amor con que Cristo y María vivieron los misterios de la Redención para iluminar nuestra vida. Las rosas significan nuestra respuesta a ese amor, nuestro anhelo de rezar y vivir nuestros propios misterios de gozo, dolor y gloria de cada día, santamente, como ellos lo hicieron".

"Jesús Eucaristía, te coronamos, en bi-unidad con María, para que reinen en el mundo y nos concedan la paz"

A medida que iban sucediéndose las Avemarías, un clima de hondo recogimiento fue inundando los corazones. Se fue formando así, al pié del altar, un Rosario, una corona de rosas vivas que ofrecimos a Jesús Eucaristía y a María para pedirles que reinen en el mundo y nos concedan la paz que tanto anhelamos, poniéndonos en sus manos para que nos transformen y nos utilicen como instrumentos de paz. Al finalizar el Rosario, rezamos la oración de coronación:

"Te adoramos, Jesús, que estás aquí presente entre nosotros. En momentos difíciles para nuestra Patria, para nuestras familias y para la humanidad desorientada, nos hemos reunido alrededor tuyo para coronarte, y así decirte que te necesitamos. Que el mundo entero necesita recurrir a Vos para llenarse de tu Presencia, de la alegría y el consuelo que nos regalas cuando nos acercamos a adorarte. Por eso, queremos hoy coronarte Rey en el Santísimo Sacramento, pidiéndote que desde la Eucaristía irrumpas con todo tu poder en el mundo que tanto te necesita, y surja en la Iglesia un gran movimiento de Adoración. Que en todos los rincones de la tierra seas conocido, amado y adorado en el Santísimo Sacramento de tu Amor, y millones de hombres pongan su esperanza en Vos, como Alimento, Camino, Verdad y Vida,... y así el mundo se transforme".

La suave música de fondo, interpretada por un coro de jóvenes, nos iba acompañando. "Estábamos como suspendidos, penetrados por la presencia viva de Jesús entre nosotros. Había algo que me hizo pensar en el tiempo de los primeros cristianos". Al pié del altar, rodeada también por el Rosario, estaba la Peregrina Auxiliar, réplica de la que llevara al hombro don Joao Pozzobon... Nos quedamos por un momento en silencio, contemplando a la luz tenue de la Iglesia esa "corona llena de luz que expresaba maravillas" (J.L.Pozzobon) y que, llenos de confianza en su poder y su bondad, regalaríamos a Jesús y María, poniéndonos a su disposición.

"Te ofrecemos, Jesús, este Rosario, como corona de amor con la que también queremos coronar a María. Pedirles así, que reinen en el mundo y nos concedan la paz que tanto anhelamos. Queremos ponernos en sus manos para que nos transformen y nos utilicen como instrumentos de esa paz: que en medio de las dificultades, llenos del fuego de tu Corazón, Jesús, fortalecidos por la Eucaristía, impregnemos de amor y esperanza el mundo que nos rodea".

Y el Rosario permaneció encendido...

Afuera de la Iglesia, situada en pleno centro de la ciudad, bocinas, ajetreo y todo el stress de la zona bancaria con las angustias de los problemas económicos y las amenazas de guerra. Nada hacía pensar que un grupo de personas estaba también allí moviendo con su entrega al Cielo, implorando la paz al Señor de la historia.

Poco a poco todos se fueron retirando, los corazones llenos de una alegría contagiosa.

Tocaba ahora dirigir la oración a otro Movimiento. El Padre Rafael Braun, alma de la Jornada, iba a celebrar una Misa y quiso que el Rosario quedara prendido, rodeando el altar. Allí permanecieron, en las rosas, la entrega de los instrumentos hecha con sentido de Alianza, y en las velas, el fuego del Amor de Cristo Eucaristía y de María junto a su Hijo, ocupando el lugar que Dios le destinó en el Plan de Salvación. Con emoción, vimos que, en forma muy sencilla, estábamos regalando a muchos la riqueza del pensar del Padre Fundador... "por los santos misterios de la Redención, te pedimos Padre, ...que Schoenstatt florezca como jardín de Dios, y se proyecte universalmente a la Iglesia".

Y el Rosario permaneció encendido...Todo un símbolo de la esperanza que, en tiempos de desarraigo y confusión, María quiere irradiar desde el Santuario a la Iglesia y al mundo...



Zurück/Back: [Seitenanfang / Top] [letzte Seite / last page] [Homepage]

Last Update: 08.11.2001 17:24 Mail: Editor /Webmaster
© 2001 Schönstatt-Bewegung in Deutschland, PressOffice Schönstatt, hbre, All rights reserved