Schönstatt - Begegnungen

La Peregrina Jubilar de Haití comienza a caminar

Desde el Santuario de República Dominicana: Envío oficial de la primera Mater Peregrina a Haití

They call her "Mater Peregrina" - and they love her with all of their heart
Sie nennen sie "Mater Peregrina" und sie lieben sie aus ganzem Herzen
From the Shrine in La Victoria, Dominican Republic, the Pregrina Jubilar set out for Haiti
Vom Heiligtum in der Dominikanischen Republik aus ging das Bild der Pilgernden Gottesmutter nach Port-au-Prince, Haiti
Procession with the Auxiliary, accompanied by the "Knights of the Virgin of Fatima"
Die "Ritter der Jungfrau von Fatima" gaben das Ehrengeleit bei der Prozession
Feast of the Schoenstatt Pilgrim Mother -Campaing in the Dominican Republic
Fest der Kampagne der Pilgernden Gottesmutter in der Dominikanischen Republik
Dedication of new Missionaries of the Pilgrim Mother
Aussendung neuer Missionare der Pilgernden Gottesmutter
Children who work as missionaries
Missionarische Begeisterung von Klein auf
At the end of the feast, balloons carried a styrofoam crown to the skies
Am Ende des Festes stieg eine Styropor-Krone zum Himmel
A crown for each picture of the Pilgrim Mother - sign of love, gratitude, and comittment
Eine Krone für jedes Pilgerbild - Dank, Liebe, Hingabe
Flowers for the Queen - also as a gift for the beginning in the neighboring country, Haiti
Blumen für die Königin - auch als Geschenk für den Neuanfang im Nachbarland Haiti
Fotos: Hna. Mariluisa, Dominikanische Republik © 2001

(Hna Mariluisa) En el mes de septiembre la Peregrina Jubilar partió del Santuario de Schoenstatt "Victoria Patris", en la República Dominicana, para recorrer las calles de Haití. En la celebración de los 50 años de la Campaña de la Virgen Peregrina en Santa María, Brasil, se hizo una lista de los países donde la Mater aún no estaba peregrinando, entre los que se encontraban Haití y Curazao. La delegación de la República Dominicana, que participó en la celebración, recibió dos imágenes con la misión de hacerlas llegar a esos dos países vecinos.

Desde el 9 de noviembre, día en que la delegación regresó al país, esperábamos el momento en que la Mater nos abriera la puerta para cumplir nuestro encargo.

Esta puerta se abrió en mayo de 2001 cuando llegó a nuestra casa de retiros un grupo de haitianos, miembros de un Movimiento dentro de la Iglesia católica conocido con el nombre de "Potencia del Divino Amor". Estos tienen una veneración especial por el Espíritu Santo y la Santísima Virgen María.

Coronación de las Imágenes Peregrinas como Reinas de las Familias y envío de la Peregrina Jubilar

El 20 de mayo, los misioneros nos reunimos para la solemne peregrinación y coronación de la Mater Peregrina como Reina de las Familias y el Nuevo Milenio.

Se vivió un momento hermoso, todos llevando una imagen de la Virgen María en una mano y flores en la otra. Al frente de la procesión iba uno de los "pequeños Joao Pozzobones Dominicanos" con la imagen Auxiliar (llamados así porque quieren llevar la Auxiliar en su hombro como él). La Peregrina Auxiliar fue acompañada y custodiada por "Los Caballeros de la Virgen de Fátima".

En la tarde del mismo día se hizo un homenaje a la Reina Coronada, donde niños, jóvenes y adultos pudieron rendir homenaje a la Virgen con pequeñas representaciones, cantos y bailes. En el transcurso de la Santa Misa se realizó el envío de nuevos misioneros (niños, jóvenes y adultos) y al término de la misma se lanzó una corona al cielo.

La Hna. M. Nilda, quien entonces era la encargada de la Campaña de la Mater Peregrina, hizo los contactos con los haitianos expresándoles nuestro deseo. Ellos aceptaron con mucha alegría. El día 21 de mayo durante la Santa Misa de despedida del grupo, que estuvo cuatro días en nuestra casa, se hizo el solemne envío.

La primera Mater Peregrina en territorio haitiano

La Mater no comenzó inmediatamente su peregrinar al llegar a Haití, sino que permaneció en el salón de oración y reunión de los miembros del Movimiento Potencia del Divino Amor, hasta que estos hablaran con el obispo de la diócesis, Monseñor Joseph Miot .

La Mater misma se encargó de preparar este encuentro: el obispo la aceptó en su diócesis.

Para sorpresa nuestra recibimos una invitación firmada por Monseñor Miot para participar del envío oficial de la primera imagen de la Mater Peregrina en territorio haitiano el 1 de septiembre de 2001. Esto nos alegró mucho e inmediatamente comenzamos los preparativos para el viaje.

Un viaje con la Virgen Coronada

El 31 de agosto a las 11:30 de la mañana, tres Hermanas Marianas y dos señoras salimos de Santo Domingo hacia Haití. Viajamos a través de la parte sur de nuestro país. A las 6 de la tarde llegamos a la frontera, donde fuimos sometidos a un chequeo de equipajes y pasaportes.

Después de una hora, aproximadamente, ingresamos al territorio haitiano. Comenzó nuestro recorrido alrededor de un paisaje impresionante. A la derecha un hermoso lago, que con la inmensa montaña a la izquierda forma curvas en la carretera haciendo el paisaje más hermoso.

A las 7 de la tarde, hora haitiana, llegamos a Puerto Príncipe; una ciudad entre montañas, que a pesar de la pobreza es muy hermosa. Fuimos recibidos con mucha alegría por algunos miembros del Movimiento del Divino Amor, el sacerdote encargado del Santuario del Perpetuo Socorro desde donde la Mater Peregrina sería enviada, y dos religiosas de la comunidad Hijas de María, en cuya casa nos hospedaríamos. La buena acogida de las Hermanas Hijas de María nos hizo sentir en casa. Nos invitaron a cenar con ellas en su comedor, donde nos dieron una muy alegre bienvenida.

Después de la cena tuvimos una hora de recreo, donde aprovechamos para enseñarles algunas canciones de la Mater que aprendieron muy rápido y cantaron con mucho entusiasmo.

Una de las puertas laterales de la casa da al Santuario de la Virgen del Perpetuo Socorro.

Allí, sobre un hermoso altar, descansaba la imagen de la Mater Peregrina, que el próximo día 1 de septiembre sería enviada oficialmente.

Llegó el gran día

La celebración eucarística comenzó a las 6:45 de la mañana, presidida por Monseñor Miot acompañado de dos sacerdotes y dos diáconos, quienes al día siguiente serían ordenados sacerdotes.

La Santa Misa empezó con un prólogo de alabanza a la Madre de Dios y después el coro entonó con mucho entusiasmo la canción de entrada.

La iglesia estaba repleta, unas 800 personas participamos con mucho fervor. La estampita de la Mater fue duplicada y todos los presentes recibieron una copia en blanco y negro. La celebración eucarística estuvo muy bien y hermosamente preparada. Después de la comunión llegó el momento esperado, todos nos arrodillamos y el obispo rezó la oración de consagración a la Virgen escrita por el Santo Padre. Después bendijo la imagen de la Mater Peregrina y caminó por toda la iglesia rociando agua bendita sobre los fieles.

Al regresar al altar tomó la imagen, la puso en alto y con ella bendijo al pueblo presente y la entregó al grupo del Divino Amor. Después de la bendición final nos dirigimos a la casa de la sede del Movimiento Potencia del Divino Amor, donde habían preparado un hermoso acto de recibimiento. Nos congregamos frente a la casa y nos dirigimos en procesión hacia el salón de reunión, donde estaba su trono. La Mater fue recibida solemnemente entre canciones y oraciones, finalizando este acto a eso de las 10 de la mañana.

La presencia de la Mater en Haití

En el comedor nos esperaba un sabroso desayuno. Después visitamos la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, que estaba llena de gente en oración ante el Santísimo expuesto en la custodia. Tras saludar a Jesús, hicimos un recorrido dentro de la iglesia: fuimos a una capilla donde había personas postradas en profunda oración ante el Santísimo y, de ahí, a otra capilla donde también estaba el Santísimo expuesto. Estábamos muy impresionadas ante tanto espíritu de oración y sacrificio. Cuando le preguntamos al joven que nos acompañaba si esto sólo se debía a que ese día era primer sábado de mes, contestó: el Santísimo está expuesto todos los días y siempre hay gente en adoración.

Una amor y una fe capaz de mover montañas

A las 4 de la tarde tuvimos un encuentro con Monseñor Miot, quien expresó su satisfacción por nuestra presencia y la presencia de la Mater en Haití. Nos comentó que había estado en Schoenstatt, hace un tiempo, y desde entonces esperaba el momento en que este Movimiento llegara a su diócesis, por lo cual estaba muy alegre y desde ya nos daba la bienvenida. Nosotras le explicamos el proceso que seguiría el recorrido de la Mater Peregrina y que nuestro establecimiento en Haití dependía de la acogida que ella recibiera.

Todos estamos muy entusiasmados y confiamos que la Mater hará maravillas en este pueblo tan pobre y sufrido, pero a la vez con un amor y una fe capaz de mover montañas.

Al regresar a la casa nos encontramos con un grupo de jóvenes, miembros del coro parroquial, les cantamos algunas canciones y ellos cantaron para nosotras. Parecían jóvenes muy sanos y alegres, con un entusiasmo contagioso.

Casi un año después de la entrega en Santa María, Brasil, al menos tres de las 50 Peregrinas Jubilares han llegado a su país de destino: la de Turquía (enero de 2001), la de Senegal (septiembre de 2001) y la de Haití.

 



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Last Update: 16.10.2001 15:22 Mail: Editor /Webmaster
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