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| Each night, a group of pilgrims walked up
to the Adoration Church on Mount Schoenstatt to spend some time by
the tomb of Father Kentenich. Abend für Abend liefen bis zu zwanzig Pilger zu Fuß vom Tal nach Berg Schönstatt, um einige Zeit am Grab Pater Kentenichs zu beten. |
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Pictures of the Pilgrim Mother, the
picture and crown for the Auxiliary, rosaries, photos were placed
in the Founder Chapel |
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| Father Pablo
Pelaez from Ecuador, Federation priest, celebrating Holy Mass with
the pilgrims Kpl. Pablo Pelaez aus Ecuador, Bundespriester, feierte die heilige Messe mit den Pilgern |
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| Visiting the
church where Father Kentenich was baptized: St. Kunibert, Gymnich
Besuch in der Taufkirche Pater Kentenichs: St. Kunibert, Gymnich |
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A boat
trip on the Rhine was part of the program |
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| Visit to Metternich:
documentation on the life of Sr. Emilie Engel Besuch in Metternich: Dokumentationsraum zum Leben von Sr. Emilie Engel |
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| Farewell party
in House Sonnenau Abschied in Haus Sonnenau |
| Fotos: Hamilton © 2001 |
(mkf) Imágenes de la Virgen Peregrina por todas partes, coronas, rosarios- y cada noche un grupo grande o pequeño de peregrinos caminando desde el Valle al Monte de Schoenstatt, dirigiéndose a la Capilla del Fundador: los misioneros de la Virgen Peregrina, quienes hicieron esta peregrinación para prepararse a la coronación de la Virgen Peregrina Auxiliar de Ecuador, marcaron la atmósfera en Schoentattt durante su estadía: con su alegría y emoción espontáneas y su orgánico amor por Jesús y María. Lo que se llevaron a casa del tiempo que estuvieron en Schoenstatt se puede resumir en lo que uno de los participantes expresó en el día que se regresaba a Ecuador: "Una nueva motivación y fuerza para el trabajo apostólico". Los misioneros están convencidos de que la vibrante fe en Jesús y el amor por María que ellos experimentan en Schoenstatt pueden cambiar las corrientes predominantes en la sociedad. Ellos están listos para cooperar, llevando a Jesús y María a los lugares más remotos.
El 8 de Diciembre será un día de coronación en Ecuador. Además de la coronación de la Reina de la Unidad en el Santuario de Quito, ese mismo día, en ese mismo lugar, serán coronadas las imágenes de la Virgen Peregrina de los misioneros y la Imagen Auxiliar de la Virgen Peregrina de Ecuador –una réplica de la Peregrina Original de Don Joao Pozzobon, que se lleva a las familias, parroquias y colegios. La corona y la imagen estuvieron presentes en Roma y en Schoenstatt. Junto a los misioneros, estaban también un grupo muy animado y vivaz de miembros de la Liga de Profesionales femenina.
Para ambos grupos, el Día de Alianza en Schoenstatt y la procesión de Corpus Christi el 17 de Junio, fueron los momentos culminantes de su viaje –y, como muchos lo manifestaron, también lo fue los momentos de oración en la Tumba del Padre Kentenich.
Cada noche, algunos de ellos, usualmente unos 20, caminaban hacia el Monte de Schoenstatt. Dice la Hna. Consuelo: "La primera noche, dije que quería ir a la Tumba del Padre Kentenich. Espontáneamente algunos fueron conmigo. Después caminabamos hasta allá cada noche, generalmente unas veinte o más personas. Nos sentíamos en casa ahí, todas nuestras fotos, cartas, y pequeños tesoros estaban sobre la alfombra." Karen Rumbea lo confirma: "Estar juntos en la Tumba de Nuestro Padre fue el momento más lindo del día!"
Una peregrinación de fe – con María a Jesús y al Padre
La participante más joven tenía 17 años, la mayor 87, Ella dijo: "Esta peregrinación fue un regalo de Dios para el resto de mi vida." El marco para la experiencia personal de los peregrinos son visitas al Santuario Original y otros Santuarios en Schoenstatt, a Gymnich, cerca de Colonia –el lugar de nacimiento del Padre Kentenich- la tumba de la Hna. Emilie, recorridos por el valle y el Monte de Schoenstatt y por supuesto el viaje al Rhin y compras en Boppard. Es una peregrinación de fe, estar en elcamino con María, a Jesús y al Padre, en una atmósfera de alegría y oración. A Angela Diaz de Cabrera le hubiera gustado quedarse más tiempo en cada uno de los lugares visitados, porque "en cada uno experimenté la bendición de la presencia de Cristo. Schoenstatt es para mí amor paz y alegría!"- Schoenstatt es un Movimiento Mariano, que vibra, que enciende, que está lleno de vida, uno se siente tocado y urgido a cambiar algo en tu vida, aplicar la fe a la vida diaria" decía Delcie Echeverría de Ruales. "Yo quiero transmitir esta fe a mi familia y a la Iglesia."
Un lugar para experimentar la cercanía de Dios
Este lugar refleja el amor y la calidez de Dios" dijo Lupe Suarez de Arce. "Talvez podría ser yo misma un pequeño Schoenstatt en casa y reflejar ese amor". Lastenia Gutierrez de Cedeño experimentó el Santuario Original como un lugar donde "siento la presencia de dios, porque María toca el corazón." Junto a otras cuatro mujeres y dos hombres, ella hizo la Alianza de Amor en Schoenstatt. "Quiero llevar esta alegría a casa y contar sobre el hermoso lugar donde estuve, donde uno en verdad siente la presencia de Dios y de María. En mi vida diaria, quiero entregarme por entero a los demás."
"Estoy tan feliz que no tengo palabras para expresarlo," dijo Elvira Cedeño Pólit, de Guayaquil. "En un momento especial, en este lugar se me concedió la gracia de comprender mi vida entera, todo estaba claro. Siempre estaré agradecida pues por un momento tuve el privilegio de vivir muy cerca de Dios."
Donde al Padre Kentenich no se lo estudia, sino que se lo comprende
"He leído mucho sobre el Padre Kentenich" dijo Astrid Ulloa de Campos; ella es de San Salvador y vive en Ecuador, donde participa en la Rama de Madres. "Aquí, en cambio, lo pude experimentar muy cercano, y entendí que él todavía está cerca nuestro y nos acompaña cuando queremos cumplir nuestra misión." Las historias que contaron sobre el Padre Kentenich hicieron que su historia y la historia de Schoenstatt se haga "tangible" a los peregrinos.
Nuevas fuerzas para el trabajo apostólico
Los peregrinos experimentaron mucha alegría natural y sobrenatural en Roma, en Schoenstatt, pero sobretodo recalcaron que han recibido nuevas fuerzas y motivación para el trabajo de la evangelización. "Cuando llevamos a María a los demás", dice María Elena Viteri, misionera de la Virgen Peregrina "contribuímos a la evangelización del mundo, que es la misión que el Padre Kentenich nos ha regalado". Teresa de Valarezo, resume su experiencia de Schoenstatt en una frase "Soy un instrumento para la nueva evangelización del mundo." Pero no por mí misma, por mi propia genialidad, sino porque Schoenstatt me da las fuerzas para seguir adelante," dice Mirella de Pólit. "Me hace tan fuerte, que yo, como María, quiero decir sí a todo lo que Dios quiere de mí, que quiero ser un instrumento para el Reino de dios como misionera de la Virgen Peregrina."
"Esta vibrante fe en Cristo que marca Schoenstatt tiene el potencial de cambiar nuestra sociedad"
"Fue como estar en el cielo," dijo Dolores Cuillas, 86, sobre la procesión de Corpus Christi. Como ella, los peregrinos de Ecuador comparten un profundo amor a Jesús Eucarístico. José Aizco, de 62 años, tiene un puesto dirigente como ingeniero civil; el fue a Schoenstatt por primera vez e hizo su Alianza de Amor. "Si hay paraísos en la tierra," dijo, "entonces Schoenstatt es uno de ellos –con su espiritualidad, las comunidades, el amor y la paz. Lo que me llevo a casa es un testimonio de fe en Cristo y en María, un testimonio que quiero dar en gratitud por todas las gracias que he recibido aquí. He experimentado personalmente el total compromiso de amor, la fe y de esperanza que marcan las comunidades de Schoenstatt. Esta vibrante fe en Jesús y el amor por María que se experimenta en Schoenstatt puede cambiar las corrientes que predominan en la sociedad de hoy, estoy convencido. Aquí nuestra propia actitud frente a la vida cambia. El conocer a sacerdotes, hermanas, gente de diferentes naciones que están todos marcados por la misma profunda fe en Jesús y María. Para mí, la procesión de Corpus Christi fue una clara expresión de ello y una experiencia inolvidable".
Traducción: Angie Santos, Guayaquil, Ecuador