Schönstatt - Begegnungen


Tras las huellas de Jesús en el Año Santo

Peregrinación de la Familia del Santuario de Nuevo Belén, Santiago - Chile, a Tierra Santa.

Nazareth, Sinagoga
Besuch in der Synagoge, Nazareth

Bautismo, Jordan
Baptism renewal, river Jordan
Tauferneuerung am Jordan

Encuentro con la familia de Schoenstatt, Nazareth
Begegnung mit Schönstättern aus Nazareth
Visiting with Schoenstatt members from Nazareth
Gruta pastores, día de alianza
In the Milk Grotto Church, Covenant Day
In der Hirtenfeldkirche am Bündnistag

Fotos: Angie Santos, PressOffice Schönstatt, © 2000

(Angela Santos) Del 14 al 21 de Agosto, 2000 un grupo de 42 personas de diferentes ramas de la Familia de Schoenstatt de Chile, acompañados de 6 ecuatorianos, realizaron una peregrinación a Tierra Santa que incluyó Nazareth, el lago Tiberíades , Jerusalem y por supuesto Belén, lugar muy especial para ellos pues representa el ideal de su Santuario.

Ir a los lugares santos de Israel y Palestina es siempre una bendición, pero lo es más todavía en un Año Santo como el 2000. Fueron seguramente las gracias de este año las que ayudaron a experimentar una cercanía tan grande con Jesús y nuestra querida Madre en las tierras en las cuales Ellos vivieron y a forjar vínculos tan profundos de cariño y preocupación mutua entre los integrantes del grupo.

Quizá el regalo más grande de la Peregrinación fue el haber podido alojar en las casas de los Franciscanos contiguas a la Basílica de Nazaret y a la Iglesia de la Natividad, lo cual permitió a los participantes poder visitar esos lugares a tempranas horas de la mañana o en horas de la noche cuando ya no había tanta congestión de turistas y peregrinos. El grupo fue guiado por un Sacerdote Franciscano de México, que impresionó a los participantes con toda su sabiduría y profunidad y además por su alegría.

Nazareth: Encuentros de Schoenstattianos.

Nazareth recibió a los peregrinos el 14 en la noche con fuegos pirotécnicos. Era la expresión de amor y alegría de los habitantes árabes católicos de Nazareth por la víspera de la Fiesta de la Asunción. Por supuesto que lo primero que hizo el grupo fue ir a la gruta de la Anunciación a saludar a nuestra Reina en su día de fiesta y un signo de la predilección de Ella por sus pequeños hijos schoenstattianos fue que la gruta estaba abierta y pudieron entrar todos. Para el guia ésto fue una sorpresa, para el resto fue una evidente muestra de amor.

Durante estos días de alojar en Nazareth se visitaron otros lugares como el Monte Tabor, el Lago de Tiberíades y los rincones donde Jesús enseñaba a sus discípulos. Las páginas del evangelio y las oraciones de las Horas del Hacia el Padre iban tomando un significado más profundo al irlos visitando. También pasaron por el Jordán, donde renovaron sus promesas bautismales y Caná, donde los participantes casados renovaron sus promesas matrimoniales con mucha emoción. Por las noches el grupo se reunía a cantar y rezar en las afueras de la Basílica dando testimonio de una gran alegría y amor a nuestra Madre. Más de una vez se les unieron peregrinos de otros grupos, especialmente de italianos. Incluso una vez se terminó bailando y cantando canciones folclóricas.

En Nazareth un grupo de tres chicas de las profesionales se juntaron con Enaia y familia, miembros de la Familia de Schoenstatt de Nazareth, disfrutando de la hospitalidad árabe. Contaron de su anhelo de tener algún día un Santuario. Enaia dijo unas palabras que las hicieron reflexionar mucho. "Aquí en Nazareth te sientes feliz, pero en Belén y Jerusalem es... diferente". Era verdad, la atmósfera de Nazareth y de su hermosa Basílica custodiada por los Franciscanos, era alegre y sagrada y lo que experimentarían posteriormente sería... diferente.

Día de Alianza en Belén.

El 17 de Agosto el grupo partió a su nuevo lugar de alojamiento en Belén, pasando por el Mar Muerto, Qum Ram y el caluroso desierto de Jericó.. Llegar a Belén en Palestina, fue una gran alegría, con sus casas de piedra vista, y su ordenada arquitectura. Al día siguiente ya algunos pudieron ir temprano a visitar la gruta de Belén, aunque más tarde el grupo entero tuvo que esperar por mucho tiempo mientras terminaba un rito Armenio. Esta Iglesia, a diferencia de la de Nazareth es más bien lúgubre y no muy bien mantenida. El lugar santo es custodiado al mismo tiempo por los Ortodoxos, católicos y armenios y hasta se experimenta cierta tensión al presenciar los otros ritos y tener que abandonar la gruta cuando estos tienen lugar. Pero aunque es un lugar sencillo, el corazón se conmueve al poder tocar y contemplar el lugar donde Jesús nació y fue recostado en un pesebre.

La Familia de Nuevo Belén tuvo el gran privilegio de celebrar el Día de Alianza en la gruta de San Jerónimo, contigua a la de la de la Natividad. Allí se presentaron todos los símbolos que las diferentes ramas traían y se renovó la Alianza en unión a la Familia de Schoenstatt Internacional. Al visitar más tarde la gruta de los Pastores, se encontraron con la grata sorpresa de que la Imagen de la MTA presidía la capilla, y aprovecharon de cantar el Himno de la Familia y canciones de Navidad.

El grupo visitó también Jerusalem, experimentando talvez cierto dolor al estar en una ciudad tan dividida entre judíos, cristianos, musulmanes. Incluso el mismo cristianismo está dividido. Eso se pudo palpar, por ejemplo, al visitar la iglesia de la Dormición de la Virgen. Al mismo tiempo se celebraban tres ritos, el armenio, el ortodoxo y el etíope, y cada grupo hacía más ruido que el otro. Esto se palpaba también en el Calvario y el Santo Sepulcro. Otras razones para experimentar dolor fueron ver la Via Sacra repleta de comerciantes y el hecho de que el Cenáculo esté en manos de los Judíos, los cuales no permiten realizar celebraciones o cantos. Las continuas peticiones del Santo Padre para rezar por la unidad de los cristianos adquieren mucho más sentido.

Navidad en Agosto

Pero la alegría de Belén era la experiencia más fuerte. El grupo se reunió todas las noches a rezar la oración de la Noche en las afueras de la Iglesia de la Natividad, al frente de la pequeña puerta que recuerda a todos que para vivir Belén hay que hacerse pequeño como un niño. Ese fue el lugar de cantos, juegos y hasta bailes, a los cuales también se sumaron algunos habitantes de Belén. Todo esto sin saber que lo hacían debajo de las ventanas del convento de los armenios.

El momento culminante de la Peregrinación fue el 21 de Agosto, en el último día en Tierra Santa. El grupo se reunió a celebrar la Santa Misa de la Navidad en la Gruta de San Jerónimo en Belén. Se cantaron hermosos villancicos, se agradeció por todos los regalos, se realizó la adoración al Niño y, entre lágrimas de emoción, todos los participantes se desearon una feliz Navidad con un fuerte abrazo.

El grupo partió entonces con dirección a otra Tierra Santa, a Schoenstatt, llevando en el corazón todos los lugares sagrados que tocaron, pisaron y besaron, pero sobretodo con la emoción de haber experimentado una atmósfera de familia, de amor, de luz, de alegría, de haber experimentado un Nuevo Belén.

 

 



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Letzte Aktualisierung: 14.09.2000 14:21 Mail: Redaktion / Webmaster
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