mkf. «Zenit» fue la más rápida. Cuando la agencia católica internacional de noticias publicó – el 13 y 14 de septiembre y en varios idiomas – la noticia de la próxima beatificación del P. Gerhard Hirschfelder, martirizado en Dachau, las preguntas de la prensa y de las emisoras de radio se dirigieron a un Schoenstatt muy sorprendido: ¿Un nuevo beato de la Obra de Schoenstatt? Es un hecho. El P. Gerhard Hirschfelder, prisionero Nº 28.972, perteneció al primer grupo de sacerdotes schoenstattianos en el campo de concentración de Dachau. Lo notable es que a ese grupo perteneció también el beato Carlos Leisner, además de Ricardo Henkes (sacerdote palotino) y Alois Andritzki (párroco alemán), cuyos procesos de beatificación ya se han iniciado.
El P. Gerhard Hirschfelder (1907-1942), nacido en el condado de Glatz, Silesia, será proclamado beato el próximo 19 de septiembre a las 15 hs. en la catedral de San Pablo, en Münster.
Mons. Hermann Gebert, del Instituto de sacerdotes diocesanos de Schoenstatt, ha recopilado, durante largos años de minucioso trabajo, breves biografías de los sacerdotes que conocieron Schoenstatt en el campo de concentración de Dachau, que sellaron allí la Alianza de Amor o que estuvieron encaminados a ser schoenstattianos. Se ha reunido en total, sesenta testimonios. Son testimonios de sacerdotes que no han olvidado su vida con la Alianza de Amor, sacerdotes que con su vida y su muerte han aportado a que la Alianza de amor sea fecunda y universal.
De la biografía del P. Gerhard Hirschfelder
Según el P. Fischer, sacerdote schoenstattiano, y prisionero junto con el Padre Kentenich en Dachau, el P. Gerhard Hirschfelder, nacido en Glatz el 17-2-1907, perteneció al primer grupo de Schoenstatt en el campo de concentración. Había sido capellán en Habelschwerdt, en la arquidiócesis de Praga. Fue arrestado en Habelschwerdt el 1º-8-1941 y llegó a Dachau el 27-12-1941, con el número de prisionero 28.972. Allí murió el 1º de agosto de 1942. (Cfr. E. Weiler, pág. 298, y documentación del P. José Fischer I 164 y III 235 b).
En 1989 se publicó una biografía de 44 páginas, titulada: «P. Gerhard Hirschfelder, un mártir del condado de Glatz, fallecido el 1º de agosto de 1942 en el campo de concentración de Dachau», editada por Mons. Franz Jung, visitador canónico para los sacerdotes y fieles del condado de Glatz. Edición del autor: 48143 Münster, Aegidiikirchplatz 4.
De allí se han tomado los siguientes datos: Gerhard Hirschfelder nació el 17 de febrero de 1907 en Glatz, condado de Glatz, en Silesia. Su madre se llamaba María Hirschfelder. Estudió en el Liceo humanístico de Glatz, y aprobó allí su examen de bachiller en 1926. Por ser hijo natural, su camino al sacerdocio estuvo lleno de dificultades (el antiguo código de derecho canónico no lo permitía), necesitó una autorización especial para estudiar teología y una dispensa para las órdenes mayores, que recibió con retraso, por lo que no pudo ser ordenado junto con sus compañeros de curso. El 31 de enero de 1932 el Cardenal Bertram lo ordenó sacerdote en la gran catedral de Breslau. Desde 1932 hasta 1939 fue capellán en Grenzeck (Tscherbeney), y desde ese año hasta el 1º de agosto de 1941, capellán mayor en Habelschwerdt y responsable de la pastoral juvenil de la diócesis.
En el punto de mira de la Gestapo
Muy pronto la Gestapo comenzó a vigilar su exitoso trabajo con la juventud. El 1º de agosto de 1941, durante una reunión religiosa con jóvenes, fue arrestado por la Gestapo y trasladado a la cárcel de Glatz. Estuvo allí por más de cuatro meses. Allí escribió, entre otras cosas, impresionantes oraciones para el Vía Crucis: un fiel se ocupó de hacer cien copias inmediatamente después de su muerte y de hacerlas circular. A mediados de diciembre fue transportado a Dachau. Pasó la Nochebuena en una cárcel de Viena. Habló con otros prisioneros sobre el misterio de la Navidad. Después de su ingreso en el campo de concentración estuvo en el bloque de entrada (según lo consigna como remitente de una carta del 24-1-42: bloque 9, habitación 3). En la mencionada biografía hay datos no tan ciertos sobre su siguiente ubicación: en el bloque de los sacerdotes polacos (Nº 30) al principio, y luego en el bloque 26/3. En el verano de 1942 fue destinado a trabajar en la gigantesca plantación. El informe de julio de 1942 sobre el trabajo en la plantación de grosellas, recuerda las experiencias similares del P. Dresbach (sacerdote schoenstattiano colaborador del Padre Kentenich en Dachau) (Ver Gebert, P. Dresbach, pág. 72 y 73).
«Conoció y amó a la Madre tres veces Admirable»
Un sacerdote que estuvo prisionero con él, el P. Engelbert Rehling OMI, cuenta: «El P. Hirschfelder vivió junto conmigo en el bloque 26/3. En su ambiente él daba una impresión sumamente humilde, casi tímida, practicó una noble discreción y a la vez estaba siempre dispuesto a hacer un favor a los demás. Lo conocí un poco más de cerca por medio del P. Fischer. Me puso en contacto con él y así conversamos sobre Schoenstatt. El P. Hirschfelder se interesó por la comunidad y conoció y amó a la Madre tres veces Admirable» (Pág. 25).
Dos días después de su baja por enfermedad (una grave neumonía), ingresó en la comisaría (24-7-42).
Será beatificado en Münster
La beatificación se realizará en Münster, donde tiene su sede del Vicariato apostólico para los sacerdotes y fieles del condado de Glatz. Tendrá lugar en la catedral de Münster. El obispado cuenta con unos 4.000 participantes, del interior y del exterior del país. Por eso la Sta. Misa se transmitirá a las vecinas iglesias de Überwasser y Lamberti. En la víspera de la beatificación está planeado celebrar una Eucaristía vespertina en la iglesia de Überwasser, finalizando con una procesión con candelas hasta la catedral y una hora de oración silenciosa.
A fines de marzo el Papa Benedicto XVI promulgó oficialmente el decreto sobre el «martirio del siervo de Dios Gerhard Hirschfelder». El proceso se abrió en septiembre de 1998, con una Sta. Misa en la catedral de Münster. Después fueron consultados dos docenas de testigos, se emitieron peritajes teológicos e históricos, y fueron enviadas desde Münster quinientas páginas de documentos al Vaticano. En abril de 2002 fue entregada en Münster la «Positio» terminada, con todos los documentos. Además se reunieron – en Alemania, Polonia y la República Checa – más de diez mil firmas pidiendo la beatificación del P. Hirschfelder. Ante esta cifra, el prelado decano de Glatz, Mons. Franz Jung, dijo que el futuro beato puede ser «un constructor de puentes para una Europa unida».
En la ciudad polaca de Czermna (Tscherbeney), en la Baja Silesia, donde el P. Hirschfelder trabajó como capellán y donde están enterradas sus cenizas, el 10 de octubre se celebrará posteriormente su beatificación.
Traducción: aat, Argentina
¡Que alegría tan grande! ¡ya tenemos otro Beato Schoenstatteano!
Para nuestra familia es una señal de nuestro Padre Dios; que la Santísima Virgen María esta cuidando de su reino de schoenstatt, para que se extienda por todo el mundo.
Nos toca encomendarnos P. Gerhard Hirschfelder, para que nos guie hacia el schoenstatt Eterno y para que interceda por nosotros para solucionar nuestras dificultades.
Particularmente le encomiendo por el Centro Leonor Tarifa del Perú, CLETARP para los niños con habilidades diferentes.Para que nos ayude en nuestra labor educativa.
Y debemos todos unidos en nuestra Alianza,pedirle su intercesión para la beatificación de nuestro Padre Fundador.ACJ.
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Comment(*): Demos gracias a Dios por esta grata sorpresa!!! La vida de este nuevo BEATO me recuerda la imagen que hace años, el P.Santiago Königer (Padre de Sch. ya fallecido), nos presentó en relación a los santos: las grandes cumbres del planeta no surgen en medio de una llanura sino sobresalen sus picos en medio de una cordillera… el P.Kentenich necesita que muchos de sus hijos sean santos para que su vida se eleve por encima de ellos y sea reconocido SANTO!.
La beatificación del P.GH. aparece como una cumbre más que va formando esa cordillera en la que ha de sobresalir la santidad de nuestro Padre y Fundador y a la vez, nos invita y alienta a exaltar la santidad de los hijos de Schoenstatt en proceso de beatificación y a esforzarnos por crecer en nuestra santidad diaria! Un desafío genial para el centenario de la Alianza de Amor! codo a codo; corazón en corazón, caminemos tras esas huellas que nos marcó el Padre y sus hijos santos! HMA.
¡Es realmente una sorpresa para nosotros!
Que el sacrificio del P. Gerhard Hirschfelder dé los frutos de santidad que la Iglesia necesita. Que sus méritos unidos a la Cruz del Señor Jesús y su amor a la MTA, le lleven al honor de los altares y, a todos nosotros nos ayuden a creer cada vez más en la fuerza de la Alianza de Amor vivida en el día a día.