Publicado el 2009-09-16 In schoenstattianos

El hombre que construye Santuarios: Franz M Vogel

Franz M. Vogel con uno de los pequeños santuariosmkf. El 31 de agosto pasado cumplió 70 años el Sr. Franz M. Vogel – miembro del Instituto de los Hermanos de María de Schoenstatt – nacido en Rottweil y un «fruto» del trabajo apostólico del P. Moser, como afirma él sonriendo. Él es quien cada 18, y frecuentemente en otras ocasiones, enciende el fuego en el que se queman los capitalarios con los aportes al Capital de Gracias, luego de la renovación de la Alianza de Amor en el Santuario Original. Algo poco conocido: el Sr. Franz Vogel construye pequeños Santuarios desde hace más de cuarenta años. Ha hecho casi mil. Tienen veinte centímetros de altura, y son una fiel copia, en escala, del Santuario. Hoy no están solamente en Alemania sino también en Suiza, en EE.UU., Puerto Rico, en las Filipinas, para acrecentar el amor al Santuario.

Mostrando la iluminaci¿on interiorEstos pequeños tesoros están hechos con enorme cariño, minuciosamente, hasta en el último detalle, e insumen de 10 a 12 horas de trabajo, siempre tomadas de su tiempo libre. «Es un complemento a mi trabajo de cocinero», dice el Sr. Vogel, «y mi apostolado por el Santuario». Las paredes y el techo son de madera terciada; el exterior de los muros «revocado» con arena; en las ventanas hay diapositivas de los vitrales del Santuario; y tiene una iluminación interior que lo hace resplandecer… Cada detalle está pensado al máximo, a punto tal que la campana y el campanario han sido fundidos en bronce en la orfebrería de los Hermanos de María. Desde 1972 el Sr. Vogel ofrece también, además de los Santuarios terminados, el «equipo de trabajo» para hacerlos: todas las partes totalmente listas con las instrucciones; sólo hay que recortar las ventanas y la puerta con la sierra, armar y revocar todo por sí mismo.

Por el Santuario

El motivo de esta acción de construir Santuarios nace del anhelo de la comunidad de los Hermanos de María de tener su propio Santuario. En el año 1968 el Sr. Vogel vio, en Liebfrauenhöhe, un pequeño Santuario de cartón que había hecho una Hermana de María. ¡Allí nació la idea! Campanario y campanaNo estaba en primer lugar el interés por la ganancia material, sino la idea de regalarle a la Mater muchos pequeños Santuarios para que Ella les regalara su Santuario. La primera serie tuvo una aceptación tan grande que año tras año siguió construyendo los pequeños Santuarios, frecuentemente más de cien. En el año 1979 el Santo Padre, Juan Pablo II, recibió de regalo uno de estos pequeños Santuarios, y los Sres. Franz M. Vogel y Clemens M. Holländer – que con frecuencia colaboraba en esta tarea – recibieron una carta de gratitud de la Secretaría de Estado del Vaticano. Hasta 1985 había construido y repartido dentro del Movimiento de Schoenstatt 497 Santuarios y 635 «equipos de trabajo» para armarlos. En los últimos tiempos llegan pocos pedidos, dice el Sr. Vogel. ¿Por qué? «¿Quizás porque entre tanto se han construido muchos Santuarios filiales?», se pregunta. Detalle. Quizás sencillamente porque muchos no saben que se pueden adquirir estos pequeños Santuarios. Una colaboradora de schoenstatt.de en Buenos Aires que traduce noticias al castellano, dijo categóricamente al ver las fotos: «¡Quiero tener el próximo que haga! ¡Es algo tan hermoso, único!».

Bodas de oro como Hermano de María

Amor al Santuario: esto es lo que deposita en cada pequeño Santuario el Sr. Franz Vogel, que el año que viene celebrará sus bodas de oro como Hermano de María. En una conversación en la Oficina de Prensa – la antigua orfebrería – vinieron a la mente espontáneamente las vivencias en esta casa, que por mucho tiempo fue el hogar de los Hermanos de María. Aquí estaba por comenzar a celebrar la Santa Misa el P. Alexander Menningen el 15 de septiembre, justo cuando recibió la noticia del fallecimiento del Padre Kentenich. ¿Qué recuerdos tiene el Sr. Vogel del Padre Kentenich?

No necesita reflexionar mucho para responder:

P. Kentenich con Hermanos de María - El Sr Vogel atrás, en el centroLo primero que recuerda es la atención del Padre Kentenich al más mínimo detalle. «Me llamaba la atención lo atento que estaba en la mesa. Era el primero que veía si alguien deseaba alcanzar la manteca, la mermelada, si tenía que acercar el plato del fiambre». Se siente el asombro con el que, aún hoy, el Sr. Franz Vogel dice: «Aquí estábamos ante un gran fundador, ante un gran hombre, y él estaba atento a las cosas más insignificantes».

Una segunda impresión es su irradiación: «En su presencia no se podía pecar», así resume el Sr. Vogel su vivencia. Calma, paz, cordialidad: esto es lo que irradiaba el Padre Kentenich, y esto era lo que se creaba en su cercanía.

El Padre Kentenich con el sr. VogelY finalmente un rasgo de su buen humor. El Sr. Vogel recuerda que una vez apareció una multitud de chicas adolescentes que a toda costa querían ver al Padre Kentenich, y lo expresaban con mucho estruendo. Sonriendo, el Padre Kentenich remarcó: «¡A veces uno se siente como un oso grizzli que debe ser presentado!». Y entonces recibía con gran cordialidad a las chicas.

«El motivo es su consagración a María», dice el Sr. Vogel. Hubo algo de María que se sentía en él…

Como también en los pequeños Santuarios construidos con tanto esmero y pasión por el Sr. Vogel.

Felicitaciones, Sr. Vogel!

 

 

 

 

 

 

 

 

 

>>> Para pedir Santuarios: Franz M. Vogel, Am Marienberg 4, 56179 Vallendar, Alemania – o vía pressoffice@schoenstatt.de

 

5 Responses

  1. Ingeborg dice:

    Estimado Sr Vogel,
    Preparando un tema de capitalarios he llegado a este articulo en el que he podido conocer de su amor a la Mater y a nuestro Santuario a través de la elaboración de las pequeñas réplicas de Santuarios. Son simplemente hermosos!!

    Me gustaría pedirle me confeccione 2, uno para mi y otro para mi mamá, ambas pertenecemos a la Rama de Madres en Guayaquil Ecuador.

    Dios mediante estaré en Schoenstatt para la celebración jubilar.

    Espero su respuesta vía email, al correo que he puesto en los datos, para conocer si es posible y el valor de los mismos.

    Muchas gracias, espero verlo en nuestra sacramental celebración jubilar!

    Que Dios y la Mater lo bendigan abundantemente, Ingeborg de Illingworth

  2. Queca Espinoza dice:

    Señor Franz Vogel, lo felicito por su trabajo en la construcción de réplicas de Santuarios. Me gustó mucho su articulo y el que haya tenido el privilegio de conocer al Padre Fundador y nos cuente sus vivencias.
    Una amiga mía está viajando al Sanutario Original y le voy a encargar uno para mi Sanutario Hogar, en caso que no pueda traérmelo yo misma lo compraré el 2014 fecha en la que haré todo lo posible por estar ahí.
    Muchos saludos y que sigan los exitos.
    Desde mi Santuario Hogar en Lima-Perú le pido a la Mater lo salude.
    Queca Espinoza

  3. Luz Marina López L. dice:

    Apreciado Sr. Vogel, es maravillosos leer testimonios de personas que como usted, tuvieron ese gran regalo al poder conocer a nuestro padre fundador.
    Vivo en Barcelona y estaríamos mi familia y Yo, muy orgullosos de tener en nuestro santuario hogar, una réplica en miniatura.
    Si existe algún modo de hacerlo, le agradezaco me lo haga saber.
    Le felicito por su apostalado y rezamos por su fidelidad.
    Un saludo grande desde Barcelona (Sant Cugat),

    Luz Marina López

  4. Angela Florindo dice:

    Que maravilloso apostolado hace usted, a traves de este santuario en miniaturala MATER ESTA LLEGANDO A LAS CASAS, ESCUELAS, HOSPITALES ENFIN TRAVESANDO TODAS LAS FRONTERAS Y CON ELLA LLEVANDO LAS 3 GRACIAS DE DEL SANTUARIO. LE FELICITO REALMENTE Y REZARE PARA QUE CONTINUES HACIENDO SU LABOR. GUAYAQUIL-ECUADOR

  5. Irma Delgado dice:

    Muchisimas gracias por su fidelidad. Deseo un satuario hecho por usted ‘Lo apreciaria mucho por todo el a mor que pone en ellos. Irma Delgado

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