ITALIA, Michael Gerber. Belmonte, en Roma: 39º y nada de sombra a lo largo y a lo ancho del terreno. En ese mediodía ardiente, se reunió un grupo muy variado en Belmonte. Los albañiles de Roma y los jóvenes voluntarios de Baden, los sacerdotes alemanes y la artista estadounidense, la familia argentina que custodia el Santuario y una Hermana de María brasileña (mientras tanto, la colaboradora de la oficina de prensa estaba varada por una huelga de ómnibus en Roma). ¿Por qué se reunieron?
Porque él, el Fundador, ha llegado. Lo hizo en la forma de la estatua del Padre, que en este momento es erigida uniendo las fuerzas de todos.
Se la ha ubicado frente al Santuario. Está firme, y sin embargo mueve: atrae a la gente en movimiento y los guía hacia el Santuario…
El Fundador en el corazón de la Iglesia quiere encender muchos corazones con el amor con el que él amo a la Iglesia.
El 10 de junio al mediodía será bendecida esta estatua, con la presencia de muchos sacerdotes y amigos de Schoenstatt.
