COSTA RICA – Hugo García •
Con gran anhelo y alegría en nuestros corazones hemos estado esperando esta madrugada del 17 de octubre durante varias semanas, luego de que se nos dio la noticia de que, como parte de las actividades en preparación para la celebración de los 106 años de Schoenstatt, los Madrugadores de Costa Rica, así como la Rama de Hombres, tendríamos el honor de iniciar las actividades presenciales participando de la santa misa celebrada por el P. Jose Luis Correa en el Santuario Familia de Esperanza en San José, Costa Rica. —
En conjunto con nuestro coordinador general de Madrugadores, Carlos Alfaro, y apoyados por los coordinadores de las 24 comunidades de Madrugadores en nuestro país, y por los miembros de la Rama de Hombres, iniciamos la motivación para hacernos presentes en el Santuario, a pesar de la situación nacional con la pandemia, y demostrarle con hechos a nuestra Mater que la amamos y que queremos que Ella nos continúe educando y transformando.
Misa, Mesa y Mundo: nuestro sello de madrugadores
Suficientes razones teníamos para hacernos presentes esta madrugada en la misa. Llevábamos ya ocho meses de no poder madrugar presencialmente en el santuario, tiempo en el cual la mayoría de las comunidades (algunas no han podido) han seguido perseverando con las madrugadas de forma virtual. Nuestra madrugada de hoy fue eso, un maravilloso reencuentro con nuestro sello de madrugadores: levantarnos muy temprano y ofrecer nuestras alegrías, nuestras penas, nuestras preocupaciones y afanes a la Mater y a nuestro Señor; entregarle en sus manos a nuestras familias, nuestros matrimonios, nuestros hijos, nuestros trabajos y nuestras debilidades para que, encendida nuevamente la llama de nuestras vivencias en las madrugadas, sigamos haciendo ese pequeño pero heroico gesto de vencer al calorcito de la cama y levantarnos, para vivir intensamente con hechos las tres dimensiones de los madrugadores, o las 3M, como le llamamos: Misa, Mesa y Mundo.
Misa… que hoy de forma providencial fue misa completa, ya que algunas veces es el Santo Rosario, el rezo de Laudes, oración ante el Santísimo Sacramento. Es ese espacio de oración comunitaria y personal ante nuestro Señor y su madre.
Mesa… donde compartimos y nos conocemos más; qué hacemos, a qué nos dedicamos, qué nos gusta, el momento donde nos hacemos verdaderos hermanos en la fe. En algunas comunidades en Costa Rica ya llevamos 13 años de ser hermanos. Hoy no tuvimos mesa, pero pronto la tendremos de nuevo.
Mundo… donde durante los 15 días que siguen hasta la próxima madrugada, procuramos ser congruentes con lo que hacemos en nuestras madrugadas, tratar de reflejar a nuestro Señor en el mundo.
Baterías bien cargadas hasta la próxima madrugada
Este sábado contamos con la participación de hermanos de varias comunidades y gracias a la tecnología, nos acompañaron también hermanos de otras comunidades del país que, por diversos motivos, no se pudieron hacer presentes. También tuvimos la dicha de tener virtualmente a hermanos madrugadores de Chile, Colombia y Nicaragua.
Con las baterías totalmente recargadas por una nueva madrugada, hicimos el anuncio de que podremos volver a madrugar de forma presencial con nuestra querida Mater en el Santuario Familia de Esperanza, para continuar viviendo nuestra impronta mariana, Dios mediante, el próximo sábado 24 de octubre a las 6 am, donde de forma callada y sencilla, como varones comprometidos con la Iglesia, procuramos ir transformándonos cada día en hombres de mayor fe y espiritualidad, buscando siempre llevar más hombres a los pies de nuestro Señor y la MTA.
¡Seguimos perseverando, seguimos en Alianza!
