ARGENTINA, Mónica García •
El santuario Tierra de la Promesa, de Rawson, Chubut, ha cumplido 25 años. Se agolpan los recuerdos y la “película” de las experiencias vividas, que han significado un crecimiento en algunos aspectos, así como preocupaciones en otros. Este cumpleaños del santuario nos presenta también el desafío de seguir adelante con nuestra misión: misión personal y misión del santuario. En suma, la misión de schoenstattianos en el mundo actual, en la perseverancia de nuestra autoeducación. —
Este acontecimiento nos ha llenado de energía y hemos trabajado mucho en pos de mostrar la alegría del aniversario y compartirla con nuestros hermanos en la Fe.
¡Y llegó el día 12 de diciembre, aniversario de la bendición!
La misa celebrada a las 19.00 h en el santuario “Tierra de la Promesa” por el padre Ludovico Tedeschi, fue muy cálida, en el recuerdo de la bendición y de los inicios del Movimiento.
El padre se refirió al desarraigo de los que habitamos aquí; por qué elegimos quedarnos y no volver a nuestro lugar de origen, de la misma manera que la Virgen eligió este lugar para establecerse e irradiar sus gracias. Muchos de los integrantes de la Familia de Schoenstatt radicados en Rawson, Trelew y Madryn, vinieron de distintos lugares del país, a trabajar, a formar familia y se han quedado en esta tierra patagónica a la que aman.
Un momento misionero
Se entregaron imágenes de la Madre Tres Veces Admirable (MTA) a los peregrinos del grupo Michay de Trelew.
Es un grupo de misioneros, iniciado por un sacerdote salesiano, vinculado a la parroquia María Auxiliadora de Trelew, que hacen su labor en la meseta patagónica, acompañados por un sacerdote de la parroquia que celebra la Eucaristía y ayudan a preparar a la población para recibir los sacramentos, en lugares donde no hay sacerdotes. A la par, llevan alimentos y ropas para personas con necesidades. En esta ocasión, decidieron partir para la misión desde el santuario Tierra de la Promesa y se les entregó un cuadro de la MTA que se bendijo el mismo día 12 de diciembre. Pidieron llevar una imagen peregrina, pero a causa de los festejos, ningún misionero podía acompañar en esta fecha para transmitir el sentido de la campaña, lo cual quedó pendiente para otra ocasión. La Campaña del Rosario de Trelew colaboró con alimentos y bolsas navideñas.
Reviviendo 25 años de historia
Por la noche, el festejo en el cine-teatro fue grato y se mezclaron la emoción y las risas. Conmovedor el recuerdo de los 25 años en un video realizado por Carlos Papaiani, que también elaboró el In Memorian, agradeciendo la entrega de los aliados en el Cielo.
Dirigieron palabras alusivas al aniversario, el P. Juan Nota, José Eduardo e Inés Epele, y el P. Ludovico Tedeschi.
En el inicio del espectáculo actuaron las niñas del Danza Jazz Ballet dirigida con acierto por la profesora Karina García, las cuales después de la danza, armaron un Santuario en el escenario, colocando en la puerta de este una imagen de la Virgen Peregrina, que acompañó durante todo el desarrollo del espectáculo.
Karina García, danzó una hermosa creación suya, iniciando el In Memorian y Gabriela Carel lo acompañó en el desarrollo de este, donde se desgranaban imágenes de nuestros aliados en el Cielo, con su canto y con una canción que la artista creó para este momento.
Un grupo de madres, con su dinamismo y alegría interpretaron un gracioso ballet que mereció el regocijo y las risas de los presentes.
Los Ministerios de Música de la parroquia de Rawson, amenizaron con su generosidad esta significativa celebración para nuestra familia, con sus guitarras y sus voces, significando con su presencia, la unión del Pueblo de Dios en todo acontecimiento.
El Coro Municipal de Rawson, dirigido por el Maestro Oxilia, el Coro de Adultos Mayores de la Municipalidad de Rawson, dirigido por Claudia Irigoyen, el cantante de tango Elio Cantone, y Gabriela Carel, nos regalaron sus voces, en una segunda parte del espectáculo.
El locutor fue Marcelo Juy, de Canal 7 de Rawson, quien condujo el Festival, haciendo gala de su experiencia y dándole al mismo un toque familiar y distendido.
El aporte voluntario y generoso de los presentes, de un alimento no perecedero, fue destinado a la elaboración de las canastas navideñas, que se distribuyeron entre familias necesitadas.
La fiesta popular
El día 16 de diciembre se realizó el festejo popular.
Se inició a las 11 h, con un rosario en la ermita del predio del santuario, organizado por la Campaña del Rosario, que preparó nuestro corazón, y hubo renovación del compromiso de los misioneros.
La misa, que contó con la presencia del obispo auxiliar de Comodoro Rivadavia: padre Roberto Álvarez, el párroco de Rawson: padre Juan Nota y el padre Ludovico Tedeschi, se celebró frente al santuario ante numeroso público. Hermosa misa, donde se entronizó la estatua de San Miguel Arcángel, conquistada espiritual y materialmente a lo largo del año. El viento patagónico, como en aquella jornada de 1993, estuvo presente y el Señor y la Santísima Virgen, nos bendijeron, como siempre ocurre en nuestras celebraciones, con unas gotas de lluvia.
El coro, que nos acompañó con bellas canciones, entre las que se entonó “A la Patagonia” de nuestra Cantata ’88, estuvo integrado por un matrimonio de Comodoro y por nuestra Juventud Femenina de “todos los tiempos” (o sea, mayores). En el año 1988 se realizó en Rawson una “Jornada Patagónica”, para la cual se elaboró una cantata de cinco canciones, cuya música creó Luis Ricci y la autora de este articulo, las letras. Entre ellas, una se llama “A la Patagonia” cuya letra dice “¡A la Patagonia, a la Patagonia, nos llama la Mater…! “y habla de que venimos de distintos rumbos para encontrarnos en este lugar.
Luego, el almuerzo compartido integró gran cantidad de comensales, festejando la felicidad y emoción del momento. Se sirvió un buffet, muy solicitado, y contamos con la presencia de “locales” de Rawson, Trelew y Madryn, y visitas de Paraná y de Hasenkamp (Entre Ríos), La Plata, Esquel, Gaiman, Comodoro Rivadavia, entre los cuales se contaban algunos Madrugadores. El tono festivo imperó en el encuentro y la alegría fue la invitada de honor.
