CHILE, Gabriel Montecinos •
El 25 de agosto, en el Santuario Cenáculo de Bellavista y en el contexto de la celebración de los 10 años del inicio de la Federación de Hombres de Chile, hizo su consagración perpetua el Curso 1, con lo que dio un paso muy importante en la consolidación hacia su autonomía. El encargo del proceso fundacional, emanado del Consejo Internacional de Familia, recayó hace más de una década en el P. Mariano Irureta y Jorge Westphal.—
Los que sellaron su consagración para siempre son: José María Fuentes, Guillermo Frez, Rafael Ojeda, Ángel Mansilla, Octavio Galarce, Gabriel Montecinos, Rolando Cori, José Miguel Arévalo y Hernán Medina. Su ideal de Curso es: Apóstoles del Padre, pan de alianza para la ciudad nueva.
En la Eucaristía celebrada por el P. Mariano fueron acompañados por sus respectivas esposas y la Hna. María Luisa, hija de Ángel Mansilla; por los miembros de los otros cursos de la Federación; algunos invitados especiales; representantes de la Columna de Hombres: Madrugadores, Rama de Hombres, Jóvenes Profesionales, Forjadores y Comunidad Mambré; y los padres Rafael Fernández, Raúl Feres, Ricardo Bravo y Carlos Cox.
Inicios de la Federación de Hombres
En el caso del Curso 1, el proceso de constituirse, inicialmente como grupo “en busca de algo” parte del año 2005. Prácticamente todos sus integrantes estaban ya vinculados por muchos años de conocimiento y por la pertenencia, en su juventud, a los grupos de jóvenes universitarios de Schoenstatt que se reunían en esa época en la calle Infante, en la comuna de Providencia, en Santiago.
El 31 de mayo de 2008 hubo un primer encuentro encaminado a fundar la Federación de Hombres, que se consolidó el 30 de agosto de 2008 en Bellavista. En esa ocasión se reunieron a la sombra del santuario 17 hombres que se constituyeron oficialmente en los dos primeros cursos en formación de lo que fue, a partir de ese momento, la Federación de Hombres de Chile. Fue una grata sorpresa el encuentro con los integrantes del Curso 2, jóvenes que estaban en un proceso de discernimiento, también “en busca de algo” ….
Actualmente, la Federación de Hombres en Chile cuenta con 4 cursos y está en pleno crecimiento. Desde Chile se apoyó la fundación de la Federación de Hombres en Argentina, donde hay dos cursos, uno en Buenos Aires y otro en Corrientes. Los encargados de llevar adelante el proceso fundacional son el P. Alejandro Blanco, de la Federación de Sacerdotes Diocesanos y José María Fuentes, jefe de la Federación en Chile. En Paraguay se establecen los primeros contactos para contar en un tiempo más con a los menos un curso para dar inicio al proceso fundacional.
Tarea y Misión
La Federación de Hombres está formada por laicos, en su gran mayoría casados, padres de familia, trabajadores, profesionales.
En nuestra formación es fundamental la acentuación de la realidad laical, de nuestra vocación (llamado) a una misión regalada por Dios, como líderes y agentes de cambio de la realidad temporal. Cada uno de nosotros y cada una de nuestras comunidades cultiva la conciencia de este llamado y esta elección particular: Dios nos llama para que, participando de la función sacerdotal, profética y real de Cristo, consagremos el mundo profano a Él. Hay un llamado especial para, particularmente a través de nuestro trabajo, pero también a través de todas nuestras actividades sociales, políticas, docentes, culturales, etc., ordenar y consagrar el mundo profano a Dios, participando en la construcción y desarrollo de un nuevo orden social.
Los miembros de la Federación y sus comunidades están llamados a vivir el misterio más profundo de su identidad como hombres: padres e hijos. Estamos llamados a ser hijos ante Dios (y la Virgen) y a ser padres frente a los hombres y las obras que Dios nos pone delante de nosotros. Ambos elementos (filialidad y paternidad) deben desarrollarse y asumirse al interior de nuestros cursos y al interior de cada uno de nosotros.
